El siglo XXI para los grandes nombres del grunge (I)

 

 

EL SIGLO XXI PARA LOS GRANDES NOMBRES DEL GRUNGE

Pearl Jam seguían adelante contra viento y marea. Ni los problemas que casi hacen que se separaran ni el descenso tanto de ventas como de popularidad como de ventas pudo con ellos; en realidad, era algo que parecía que nunca habían pretendido. Así que el año 2000 comenzaba con ‘Binaural’, el primer álbum de estudio de Matt Cameron en una época donde (como se dice vulgarmente), el grunge no estaba de moda. En realidad soy de los que piensa que las modas no existen, y que al que le interesa algo realmente no necesita que le guste a millones de personas para expresarlo; así que el grunge siempre estuvo ahí, otra cosa es que se le prestara mayor atención. Pero no desvarío, y me vuelvo a centrar en el sexto disco de Pearl Jam. ‘Binaural’ era aún más experimental que ‘No Code’, mostrando un grupo cada vez más asentado, calmado, y alejado de todos los focos de atención de manera tan mediática como en el pasado. Ya en esta época se empezó a notar una bajada en las ventas, que iría en un progreso constante en la era digital. La crítica no dio la espalda al grupo a pesar del relativo tropiezo comercial, alabando los riesgos que habían tomado, viendo el álbum más como un conjunto, ante la falta (de nuevo) de temas remarcables… que los había, pero no con el mismo tirón e inspiración que antes. Lo que no faltaba en el grupo era una fiel legión de seguidores; precisamente estaba destinado para ellos un regalo muy especial: la edición de varios de los conciertos de su gira en discos oficiales (dos de sus visitas en España), empaquetado en un simple cartón. En un era donde la música empezaba a cambiar (tanto los grupos como la industria), Pearl Jam se adaptaba antes de tiempo.

El primer tramo del tour trajo al grupo a Europa, su primera visita en cuatro años, empezando en Lisboa y siguiendo por San Sebastian y Barcelona. Seguían siendo un seguro en directo a pesar de haber bajado la intensidad de sus actuaciones; así lo demostraba su presencia en algunos de los festivales veraniegos más importantes. Pero la tragedia se pondría en su camino en uno de ellos, el Roskilde danés; no llevaban ni media hora de actuación, cuando tuvieron que parar su 

concierto por las avalanchas de gente que se sucedieron. Como consecuencia, nueve personas murieron ese 30 de Junio por aplastamiento contra las vallas de protección; las investigaciones posteriores llevaron a pensar que todo se debió a una negligencia técnica, si bien supuso un duro revés para el grupo, que en aquel momento se mostró perplejo en el escenario. Cancelaron las dos citas europeas restantes, emitiendo un comunicado donde reflejaban el dolor y malestar que sentía el grupo, marcando uno de los peores momentos de sus carreras. Hubo varias consecuencias, como la negativa del grupo a volver a tocar en un festival, y la revisión de la seguridad de estos de cara a que no se repitiera un suceso como este.

También trajo rumores para el grupo, llegándose a pensar una vez más que Pearl Jam lo iba a dejar teniendo en cuenta lo hundido que les dejó. Pero no, salieron adelante reapareciendo en la parte norteamericana de la gira, dejando de tocar ‘Alive’ en señal de duelo hasta el último concierto en su ciudad. Los setenta y dos conciertos que dio el grupo en ese verano y otoño saldrían a la venta entre finales del 2000 y primeros de 2001, suponiendo un éxito de ventas relativo e inesperado. No sería el único material que reflejó esa gira, ya que ‘Touring Band 2000’ fue un VHS/DVD que incluía actuaciones de distintos conciertos de la parte norteamericana, que dieron paso a un pequeño descanso.

El movimiento de los grandes nombres del grunge en los primeros meses del nuevo siglo fue escaso. Dave Grohl y sus Foo Fighters ya tenían cierto nombre tras un buen puñado de singles de su segundo y tercer disco, ganándose una seña de identidad gracias a sus peculiares vídeos cargados de humor. Uno de ellos, ‘Learn To Fly’ ganó el Grammy como mejor videoclip, y el disco que lo contenía, ‘There Is Nothing Left To Lose’, haría lo propio en la categoría de mejor disco de rock. El éxito parecía sonreírle, pero los problemas no eran ajenos para él, teniendo algunos cambios de formación en sus comienzos hasta conseguir una formación estable antes de la grabación de su cuarta obra. Uno que se embarcó en una nueva aventura fue Cornell, anunciando una sorprendente unión como vocalista a la sección musical de Rage Against The Machine tras la separación de estos de Zach de la Rocha, bajo el nombre de Civilian, y anunciando su intención de grabar un disco. Stone Temple Pilots, tras el relativo éxito de ‘No.4’, seguirían con un pobre ‘Shangri-La Dee Da’ tras el cual se separarían por problemas personales entre Weiland y los demás músicos.

Y Alice In Chains seguía sin dar señales de vida, encargándose su discográfica de sacar un nuevo recopilatorio, ‘Greatest Hits’, además de un CD en directo titulado simplemente ‘Live’, explotando al máximo el nombre de la banda. Pero cualquier noticia se vio eclipsada por un triste nuevo episodio en la historia de estos grupos. El 19 de Abril del 2002 el cuerpo de Layne Staley era encontrado sin vida en su casa, con una aguja en el brazo y distintas sustancias alrededor. La autopsia desveló que había muerto dos semanas antes por una sobredosis de una mezcla de cocaína y heroína, y su peso no llegaba a los cuarenta kilos. Mike Starr, ex-bajista de Alice In Chains, declaró que había pasado la tarde con él el día anterior a su muerte, llegándose a sentir culpable por no haber llamado a los servicios médicos al ver la situación de su amigo. Nueve años después moría como consecuencia de una mezcla de metadona con medicamentos contra la ansiedad.

Los rumores sobre su debilitado estado de salud habían sido constantes desde su desaparición pública tras gabar ‘Get Born Again’ y ‘Died’, los dos temas inéditos de ‘Music Bank’ de 1999; para entonces ya estaba en mal estado, y poco se supo de él hasta su muerte. Gente como Sean Kinney o Mark Lanegan intentarían mantener contacto con él, yendo a su casa a visitarle, sin conseguir nada a cambio. Casi un año después de su desaparición, veía la luz la última entrevista conocida del artista, en el libro ‘Layne Staley: Angry Chair — A Look Inside the Heart and Soul of an Incredible Musician’, concedida a la periodista argentina Adriana Rubio. En ella, fechada tres meses antes de su muerte, se mostraba con una crudeza tan aplastante como desgarradora, reconociendo que sabía que su muerte estaba cerca. No se drogaba para estimularse o divertirse, sino porque se había convertido en una necesidad para él; su hígado no funcionaba bien, vomitaba a menudo, sentía dolores continuos que no se marchaban, y sabía que cometió un error cuando empezó a abusar de la heroína. Sorprendían las duras palabras hacia Alice In Chains, advirtiendo que no intentaran contactar con cualquiera de ellos ya que no eran sus amigos. Se sinceraba también sobre la relación con su padre, del que dijo que se aprovechó de su estatus para conseguir drogas, llegando a consumir de manera conjunta, lo que le hundió más aún en su abismo. Una triste historia, con un final más triste aún, terminando sus últimos días hundido en algo parecido al infierno, que supuso la separación oficial y definitiva de Alice In Chains… o eso parecía.

Jerry Cantrell siguió adelante en solitario, dedicando dos meses después ‘Degradation Trip’ a su compañero fallecido. Muchas de las canciones parecían hechas para Alice In Chains, teniendo un sonido semejante al que practicaba en su grupo original; de hecho, las citadas ‘Get Born Again’ y ‘Died’ estaban pensadas para este segundo disco en solitario. La acogida fue mucho mejor que con su debut, y era normal; la gente esperaba ese sonido tan característico de la guitarra de Cantrell, empapando las composiciones de un aire oscuro único. Se acompañaría para girar de la sección rítmica de Ozzy Osbourne, con Mike Bordin tras la batería y Robert Trujillo al bajo, además del guitarra Brian Kehoe; abriría para algunos de los grupos del momento, como Creed y Nickelback, para posteriormente iniciar una gira propia con Comes With The Fall como teloneros.

 

Para finales de ese 2002 habría multitud de nuevos lanzamientos que incluían a diferentes músicos de las bandas más características de la década anterior. El 22 de Octubre Foo Fighters sacaba su cuarto disco, ‘One By One’, obteniendo algunas de las críticas más favorables de su carrera, y consiguiendo un nuevo Grammy como mejor álbum de rock. La fama del grupo estaba en constante ascenso, pero tiempo después se supo que durante la grabación de este el grupo estuvo a punto de separarse; no estaban contentos con como marchaban las cosas, y su líder parecía más interesado en grabar las pistas de batería del nuevo trabajo de Queens of the Stone Age. Después de haberse gastado millones de dólares en la grabación del disco, y tras la actuación de ambos grupos en Coachella, Foo Fighters tirarían por tierra todo lo hecho hasta entonces, regrabando el disco entero en solo diez días. Sus singles se contaron por éxitos (ganando ‘All My Life’ otro Grammy), y girarían con Red Hot Chili Peppers en buena parte de la gira, que venían de cosechar un éxito mundial con ‘Californication’ pocos años antes, y con quienes ya habían compartido cartel en la época de ‘There Is Nothing Left To Lose’.

Solo una semana después de este lanzamiento, veía la luz el tercer álbum de Nirvana posterior a la muerte de Cobain. Si en el pasado se trató de un acústico y una recopilación de temas de distintos conciertos, aquí se limitaron a reunir  los grandes éxitos (llámese también singles), incluyendo algunas tomas del citado ‘Unplugged’. El mayor (y casi único) atractivo de este trabajo era la inédita ‘You Know You’re Right’, grabada poco antes de que el grupo se embarcara en su última gira, y de la cual se apropió la viuda de Kurt durante la aparición de Hole en un Mtv Unplugged en 1995. En realidad, la disputa entre Courtney Love y Grohl/Novoselic fue más comentada que la propia edición de esta recopilación.

 

Para el mes de Noviembre había reservados otros dos trabajos. Pearl Jam publicaban ‘Riot Act’ el día 12, cosechando las peores ventas iniciales del grupo hasta esa fecha; se empezaba a notar el cambio en la industria musical. El grupo estaba totalmente metido en la experimentación, con gran presencia de atmósferas folk en muchos temas; el single ‘I Am Mine’ daba una idea de cómo sonaba el grupo. También tuvieron espacio para rendir homenaje a las víctimas del festival de Roskilde en la canción ‘Arc’. Pero lo que más daría que hablar en esa época sería el activismo político de Pearl Jam, personificado en Eddie Vedder. La historia venía de meses antes, con los atentados del 11 de Septiembre, empezando a mostrar la disconformidad con la gestión de su país por parte de su presidente Bush; en algunos conciertos, el vocalista salía a escena con una máscara de goma del presidente, antes de quitársela para interpretar la curiosa ‘Bu$hleaguer’. Eso le valió algunos problemas al grupo, ganándose abucheos en algunas ciudades, a los que respondieron en una ocasión con una versión de ‘Know Your Rights’ de The Clash, en clara alusión a defender su libertad de expresión. La mencionada ‘Arc’ fue interpretada en algunos conciertos de la gira, pero suprimida de los discos que sacaría Pearl Jam. Porque sí, el grupo seguía poniendo disposición de sus seguidores setenta y dos nuevas grabaciones a través de su página web, comercializando en las tiendas de discos solo seis en esta ocasión. Uno de ellos, el grabado en el Madison Square Garden el 8 de Julio de 2003, sería lanzado en DVD. A finales del 2003 autoeditarían el single ‘Man of the Hour’, de la banda sonora de ‘Big Fish’ de Tim Burton.

El otro disco que tuvo su momento en Noviembre fue el debut de Civilian, el nuevo grupo de Chris Cornell, rebautizados como Audioslave. Su primer disco llevaría como título el nombre del grupo, y no dejó indiferente a nadie; de hecho, los más escépticos criticaron esta unión antes siquiera de escuchar nada de ella. Los medios eran extremistas, estando por un lado los que se cebaron en comparar al grupo con las dos bandas de donde venían sus componentes, sin ver nada de ellas y criticando que nunca llegarían a nada que consiguieron en el pasado por ese camino. Prácticamente el mismo argumento era el usado para alabar la aventura y riesgo que corrían al alejarse del sonido tanto de Soundgarden como de Rage Against The Machine para crear algo nuevo. Por otro lado era lógico, ya que Cornell no tenía el chorro de voz del pasado (más tarde se harían evidentes sus problemas de cuerdas vocales en directo), y Tom Morello y los demás no tenían en él a un cantante donde crear una base musical en la cual rapear. Algunas canciones se filtraron en forma de demo y aún bajo el nombre original del grupo, dejando entrever algo que sería normal con el paso de los años. El resultado fue un disco de rock que en algunos momentos encontraba inspiración en un sonido más clásico y antiguo, pero donde lo que más destacaba era tanto la voz de Cornell, en un tono más calmado que en el pasado, como el particular estilo de tocar la guitarra de Morello. Tras la salida del álbum, se supo que durante el periodo de composición y grabación Cornell atravesó una crisis personal que incluía diferentes tipos de problemas, incluido el alcohol, lo que traería como consecuencia el separarse de su mujer. En la gira el grupo se limitaría a las canciones de su disco, así como algunas versiones… que no incluían de sus bandas originales; algo que sorprendió (a medias).

Los siguientes meses traerían unos cuantos  recopilatorios a la venta. El mismo día salían a la venta ‘Thank You’ de Stone Temple Pilots y ‘Lost Dogs’ de Pearl Jam. Este último reunía caras B y temas inéditos de los de Vedder, incluyendo joyas como ‘Yellow Ledbetter’, que solo había visto la luz en el single de ‘Jeremy’, y se había convertido en uno de los clásicos del grupo, siendo algo normal el cerrar sus conciertos con ella. Una manera distinta de ver la evolución del grupo, a través de temas menos conocidos, treinta y uno en total. El último del segundo disco, ‘Bee Girl’ (de 1993, e inspirado en el vídeo ‘No Rain’ de Blind Melon), incluía un tema oculto llamado ‘4/20/02’ , un tributo a Layne Staley grabado en las sesiones de ‘Riot Act’ y compuesto poco después de su muerte. Por su lado, el del grupo de San Diego contenía muchos de sus temas más conocidos, así como la inédita ‘All in the Suit That You Wear". El mayor aliciente estaba en el DVD de la edición especial, con actuaciones en directo y los videoclips grabados durante su carrera. De todas maneras, Scott Weiland estaba dando más que hablar por otro asunto: siguiendo los pasos de Cornell, entraría a formar parte de otro supergrupo. Se llamaban Velvet Revolver y era junto a los ex-Guns N’ Roses Slash, Duff McKagan y Matt Sorum. Sacaría dos discos con ellos, ‘Contraband’ con grandes críticas y buen recibimiento en 2004, y ‘Libertad’ dos años después, con opiniones más divididas; ambos eran una conjunción de un sonido clásico pasado por el filtro moderno de hard rock, consiguiendo un éxito relativo, aunque solo fuera por los nombres que había en la formación.

Siguiendo con las recopilaciones, 2004 traería consigo dos más de Pearl Jam y una de Nirvana mucho más amplia que la que vio la luz en el pasado. ‘With The Lights Out’ era un box set de tres CDs y un DVD, y sería uno de los más vendidos de la historia. Se incluía canciones que iban desde el primer concierto del grupo de Kurt Cobain, hasta distintas sesiones en radios, demos, grabaciones caseras… y vídeos también poco comunes e inéditos en algunos casos. Toda una pieza de coleccionista que mantenía vivo el legado del mítico grupo (y que de paso aumentaba los ingresos de Geffen). Por su parte, Pearl Jam tendría en la primera mitad del año ‘Live at Benaroya Hall’, un concierto acústico dado el Octubre anterior a beneficio de la organización Youthcare de Seattle. Una delicia desnudando más de veinte canciones de su discografía junto a algunas versiones, donde destacaban la de ‘Masters Of War’ de Bob Dylan y ‘I Believe In Miracles’ de Ramones. Unos meses más tarde, ‘Rearviewmirror (Greatest Hits 1991-2003)" sería un lanzamiento más convencional, con treinta y tres de sus mejores éxitos, donde destacaban la inclusión de ‘Breath’ y ‘State of Love and Trust’, de la banda sonora de ‘Singles’, ‘Man of the Hour’ de ‘Big Fish’, así como la nueva presencia de ‘Yellow Ledbetter’. Sorprendió la remezcla de tres temas de su debut (‘Once’, ‘Alive’ y ‘Black’) por parte de Brendan O’Brien; excepto en ‘Ten’, había trabajado con la banda en el resto de sus discos, ya fuera como productor o para realizar las mezclas. En cuanto a conciertos, sería un año casi sabático para el grupo, solo teniendo algunas fechas en el llamado Vote for Change Tour, donde junto a artistas como REM, Bruce Springsteen o Neil Young, volvían a hacer gala de mensaje político en una iniciativa para promover a la gente a votar en contra de George W. Bush.

Parecía que la mayoría de artistas de gran éxito en los primeros años de la década de los 90 estaban viviendo más de las rentas de aquellos trabajos y de los discos recopilatorios que iban cayendo por parte de la mayoría de ellos, que de su trabajo actual. En 2005 se siguió un poco esa línea, si bien antes pudimos disfrutar de ‘Out Of Exile’, el segundo álbum de Audioslave, y del quinto de Foo fighters, ‘In Your Honor’. Cornell y los suyos seguían con la crítica repartida a la hora de calificar su música, aunque la expectación con este fue bastante alta, siendo incluso nominados a un Grammy. El grupo se alejó un poco de las comparaciones buscando una identidad propia. Poco antes de su salida, Audioslave viajó a La Habana, para dar un concierto en la capital cubana que sería grabado para su posterior lanzamiento en DVD el 11 de Octubre del mismo año; interpretaron veintiséis temas (incomprensible que solo se incluyeran dieciocho en la filmación), donde se apreciaba el mayor cambio en sus conciertos: la inclusión de temas tanto de Rage Against The Machine como de Soundgarden. Fue criticado por un sector debido a dos motivos, ambos teniendo como objetivo a Cornell: no llegaba a los tonos de algunas de sus canciones como antes, y a la hora de hacer de Zach de la Rocha se veía que no era su estilo.