Tour Life: Frank Carter

Tuvimos la oportunidad de charlar con Frank Carter con su más reciente lanzamiento ‘End Of Suffering’ bajo el brazo y, por supuesto, hablamos con el frontman de algunas cuestiones relacionadas con la intensa actividad en directo de su banda, que se ha vuelto imprescindible en muchos festivales debido a unas actuaciones de altos decibelios perfectamente condimentadas por una música de lo más personal.

Como no podía ser de otra forma, pudimos presentarle nuestro cuestionario Tour Life para que nos desvelara algunos de los entresijos de sus maratonianas giras mundiales. Por supuesto, el cantante se mostró muy abierto a la hora de seguir explicándonos todas las dificultades que se encuentra cada vez que sale a la carretera y se separa de sus seres queridos. Sin embargo, siguió demostrando que es un cantante con las ideas muy claras y que es consciente de todos los sacrificios que debe tomar para estar en su posición actual. Y es que, año tras año, se va haciendo más grande en el panorama rock y punk mundial.   

¿De quién es la persona que te despides con más dificultad cuando te vas a tocar?

De mi hija, sobre todo. Pero también de mi pareja y de mis amigos.

Frank Carter & The Rattlesnakes (Foto: Aritz Sola)

¿Cuál es la mayor cantidad de gente ante la que has tocado y dónde?

El mayor show como cabezas de cartel fuera del Reino Unido fue en Ámsterdam en nuestra última gira europea, había muchísima gente, pero en nuestro país hemos hecho el Brixton Academy en Londres ante 5.000 personas, y el año que viene tenemos planeado tocar en el Alexandra Palace, que son 10.000 personas. De todos modos, el sitio donde hemos tocado ante más gente fue en los festivales de Reading y Leeds… había entre 60.000 y 70.000 personas. 

¿Cuál es la cantidad más pequeña de gente ante la que has tocado y dónde?

En una fiesta de mi cumpleaños en 2016, había unas 17 personas. 

¿Tienes roadies o te toca cargarlo todo con tus propias manos y pies?

Tenemos un gran equipo de roadies, así como gente que se encarga de los instrumentos, de la iluminación… hacen que las cosas sean más fáciles.

Frank Carter & The Rattlesnakes (Foto: Iria López)

¿Cuál es la mayor cantidad de dinero que has cobrado por un bolo? Puede ser positiva o negativa. La cuestión es que haya muchas cifras.

Pregúntame sobre mi arte, no sobre el dinero que gano. Cada concierto me da dinero, pero eso no es importante. 

¿Cuál es el equipo técnico con el que sueles tocar?

Uso un micrófono inalámbrico Shure SM-58. El resto de miembros en la banda, en su mayoría, usan instrumentos Fender y amplificadores Marshall. Últimamente andamos experimentando con los Kempers, que nos permiten utilizar cualquier tipo de sonido de una forma muy cómoda, algo imprescindible en la industria musical actual. 

¿Cuál es tu rutina de calentamiento antes de salir a tocar?

Hago muchísimo yoga antes de los conciertos. En serio, un montón. También jugamos bastante a la Nintendo Switch durante las giras.

Frank Carter & The Rattlesnakes (Foto: Daniel Cruz)

¿Qué es lo primero que haces al bajar del escenario?

Intento sentarme en el lugar más apartado de la sala. Los conciertos, a veces, son muy impactantes, así que necesito relajarme. Después me tomo una ducha. 

¿Cómo reaccionas cuando alguien se sube al escenario?

Dejo que surja de una forma natural. Mientras las personas sean respetuosas no pasa nada. Pero a veces hay gilipollas que hacen daño a los demás, y esos no son bienvenidos a nuestros conciertos. 

¿Prefieres una gira como Dios manda estando un mes fuera de casa o ser un “weekend warrior” que solo hace conciertos solo los fines de semana?

Cada uno tiene sus propios beneficios. Está bien tocar conciertos sueltos porque no te alejas de los tuyos, pero es importante hacer tours grandes para mantenerte en forma y llegar a más gente.

Frank Carter & The Rattlesnakes (Foto: Óscar Gil)

¿Has tocado alguna vez estando enfermo? ¿Cómo superaste aquel concierto?

Llevo una semana enfermo tocando cada día. He tocado muchísimas veces enfermo en mi vida, y es algo realmente complicado. Es complicado respirar y cantar adecuadamente, pero el show tiene que continuar, no hay otra. 

¿Cuál ha sido tu situación más vergonzante sobre el escenario?

No recuerdo nada en concreto, en general estoy satisfecho con mis actuaciones y con todo lo que sucede a mí alrededor. Simplemente dejo que las cosas marchen de una forma natural. Eso sí, hubo una vez que me caí del escenario y me rompí una mano. Quizás fue eso lo más vergonzoso. 

¿Qué es lo más glamuroso que has hecho estando de gira? Ducharse no cuenta

Algunas veces mi chica ha venido en alguna gira y hemos pasado la noche en algún hotel. Estos son mis momentos de glamour, cuando duermo bien y como buena comida. Pasar buenos momentos con mi chica es lo mejor.