Tour Life: Alén (Aphonnic)

La escena metalera gallega es muy conocida porque es como una especie de reducto que soporta contra viento y marea todas las músicas y modas que pasen por delante, como una especie de Galia pero sin que Asterix, Obelix y compañía vivan allí. Entre las muchas bandas gallegas que han ido cosechando éxitos a lo largo de los últimos años destaca Aphonnic (entre otras más), y por eso hoy su batería, Alén, protagoniza nuestra sección Tour Life de cada viernes.

• Nombre del músico: Alén (batería)
• Grupo: Aphonnic

¿De quién es la persona que te despides con más dificultad cuando te vas a tocar?

La verdad es que no me cuesta despedirme de nadie en concreto cuando me voy a tocar. Es mi parte favorita de estar en una banda y la disfruto mucho.

¿Cuál es la mayor cantidad de gente ante la que has tocado y dónde?

Creo que fue la primera vez que Aphonnic salió de Galicia, en el multiusos Sánchez Paraíso de Salamanca en una fiesta universitaria. La parte baja estaba ultra petada pero tan sólo unos 100-200 disfrutaban del bolo, el resto le estaba gritando a nuestro técnico que bajara nuestro fader y empezara a poner techno y reggaeton (risas). Había muchísima gente allí.

¿Cuál es la cantidad más pequeña de gente ante la que has tocado y dónde?

En una concentración motera en Palas de Rei, hace muchos años. Por causa del mal tiempo cambiaron la localización y la hora del concierto, adelantándola casi una hora. Nosotros éramos los primeros en salir, y bueno… teníamos enfrente a dos personas nada más, eso sí… tanto ellos como nosotros lo dimos todo.

¿Tienes roadies o te toca cargarlo todo con tus propias manos y pies?

¿Roadies? ¿Que demonios es eso? (risas) Nada…. todo con nuestras manos y pies. Un día, el difunto de Alberto Madrid me contó que cuando empezó a tenerlos realmente fue un alivio para él y empezó a disfrutar realmente de llegar a los sitios y tan sólo tocar. Espero poder llegar algún día a sentir esa sensación.

Aphonnic (Foto: Fon Valcárcel)

¿Cuál es la mayor cantidad de dinero que has cobrado por un bolo? Puede ser positiva o negativa. La cuestión es que haya muchas cifras.

Más de 1000 y menos de 10000. Espero que en un futuro la tendencia sea acercarse más a la segunda.

Al menos nos ha dado un abanico. Not bad.

¿Cuál es el equipo técnico con el que sueles tocar?

Una Pearl Masters Custom Maple MMX. Bombo de 20”, toms de 12 y 14”. Platos Zildjian: charles 14” A Custom, crash 18” Z3, crash 20” A Custom y china de 18” serie A. Cuando tengo pasta para hacer un pedido numeroso uso baquetas Te&Son, y cuando no pillo Promark Hickory, siempre del 5B. Para los parches me quedo con Evans, sin duda.

¿Tienes patrocinio de alguna marca o sale todo del sudor de tu frente?

Misma contestación que para los roadies… ¿endorsers? ¿Eso que es? (risas) No, en serio, no tengo ninguno. ¿Alguna marca en la sala? Si alguien o alguna marca estuviera dispuesta a echarme una mano estaría encantado, pero de momento, sí… sale todo de la cartera.

¿Te avienes a tocar con material de otras bandas o alquilado si la situación lo demanda o siempre tienes que llevar lo tuyo?

Creo que me he acostumbrado a tocar con cualquier equipo, ya que es lo que me ha ido tocando a lo largo de estos años, compartir baterías y backline en general. En esta gira de Indomables por ejemplo, he de decir que pocas veces he tocado con mi batería. Es algo fastidioso a veces, pero en ocasiones toca ser prácticos. Aún así, agradecido a toda la gente que me ha prestado su equipo en alguna ocasión, ya que el instrumento de cada uno es algo muy personal.

¿Cuál es tu rutina de calentamiento antes de salir a tocar?

Realmente lo que hago son estiramientos, y apenas caliento con baquetas, por ejemplo. Procuro no comer demasiado o nada antes y apenas bebo agua. Nada de alcohol, puede que una cerveza, pero nada más. Todo eso lo hago después, si es que todavía queda algo (risas).

¿Qué es lo primero que haces al bajar del escenario?

Secarme y cambiarme. ¡Acabo empapado! (risas)

Aphonnic (Foto: Óscar Prieto)

¿Cómo reaccionas cuando alguien se sube al escenario?

Si no incordian, no tengo problema. Aunque tengo que decir que en nuestros conciertos la gente por lo general no es mucho de subirse al escenario. El problema es cuando la gente va toda mamada. He visto conciertos de colegas en los que la gente se subía a saco al escenario, y ellos ponían cara de estarlo pasando en bomba, pero en el fondo se nota que se estaban cagando en todo cuando veían que les estaban pisando cables, pedales, moviendo micros, etc.

Con cuidado bien, sino, a tu casa.

¿Prefieres una gira como Dios manda estando un mes fuera de casa o ser un “weekend warrior” que solo hace conciertos solo los fines de semana?

Esta es buena… todo me vale, el caso es estar tocando y en activo. Me gustaría hacer giras de meses, como hacen muchas bandas, normalmente extranjeras, viajando en sleepers y todas esas cosas. Eso significaría que nos podemos dedicar completamente a esto. Pero bueno, no me quejo en absoluto. Por muchas razones, en este país lo normal es ser un weekend warrior como dices, y también lo disfrutamos.

¿Has tocado alguna vez estando enfermo? ¿Cómo superaste aquel concierto?

Creo que fue en el último concierto de la gira de “Héroes” en Vigo, o el primero en Vigo de la de “Indomables”, no recuerdo bien… tenía un buen gripazo y toqué con algo de fiebre. Cuando estás dando golpes todo el rato y tienes el “click” del metrónomo en las orejas durante hora y pico, pues la verdad, no es la mejor de las sensaciones (risas). De todas formas acabé disfrutándolo de alguna manera, la gente con su apoyo te lleva en volandas y así todo es más fácil.

¿Cuál ha sido tu situación más vergonzante sobre el escenario?

Buff… en el primer Resurrection Fest que hicimos, en el 2010. Me estaba secando el sudor con mi toalla entre tema y tema, y cuando iba a empezar el siguiente me dí cuenta que se me había enganchado la toalla al percing de la nariz, no me daba tiempo y le dí un tirón a la toalla para quitarla. Me quedó un buen pedazo de hilos colgando del pearcing que molestaban un huevo y parte del otro al tocar (risas). Algo un poco surrealista, pero bueno… ¡llegué a tiempo!

¿Qué es lo más glamuroso que has hecho estando de gira? Ducharse no cuenta

¿Glamuroso? Pues no recuerdo nada ahora, la verdad… nuestras giras no son nada glamurosas (risas). Pero cuando hay buffet libre a la hora del desayuno en el hotel, ¡ahí si que disfruto como un niño con zapatos nuevos! (risas)