Rockambolescos: Satan Panonski (Pogreb X)

El músico y poeta Satan Panonski fue un personaje muy poco conocido a nivel mundial, pero pasó a ser todo un mito dentro de la música rock underground de la zona de los Balcanes (balkan punk) por sus sangrientos directos y su particular y extrema personalidad.

Ivica Čuljak, de apodo artístico Satan Panonski y también bautizado como El Diablo de Panonia, fue un músico yugoslavo-croata nacido en 1960 que militó como vocalista de la banda de punk Pogreb X (traducción al ruso de Funeral X, como guiño a la residencia cercana al cementerio de algunos integrantes) y fue descrito en numerosas ocasiones como el GG Allin de su país.

Ivica se crió en el pueblo de Ceric (Croacia) dentro de una familia de clase media y fue un estudiante brillante interesado por la poesía que pronto se tropezaría con la música punk de Sex Pistols, Sham 69 y Ramones, justamente cuando empezó a dejar de lado los estudios por falta de motivación y aburrimiento.

Al poco tiempo de su primera incursión en el punk, Panonski empezó a cambiar su forma de vestir y su actitud, lo que llevó a que su padre lo echase de casa violentamente por no cumplir sus normas. Ivica también eludió el reclutamiento en el JNA (Ejército Popular Yugoslavo) y fue llevado a prisión por ello. Tras estos episodios, el joven vivió de okupa en varias casas abandonadas de Vinkovci y comenzó con el alcohol y las drogas.

El actual arzobispo de la Arquidiócesis Católica Romana de Đakovo-Osijek, Đuro Hranić (izq.), con su antiguo amigo Satan Panonski (der.)

Con Pogreb X escribió canciones donde trataba temas como el travestismo y la homosexualidad y dio directos en los que su necesaria reivindicación se acabó convirtiendo en un espectáculo donde la gente, según varios testigos, se iba al baño a vomitar al ver que el cantante se golpeaba contra la pared, se provocaba quemaduras, se cortaba la piel y se automutilaba de diversas formas hasta terminar cubierto de sangre y heridas. El músico declaró en una entrevista en 1990 para Radio Sarajevo que estos actos y sus performances no eran más que una forma de deshacerse del dolor mental convirtiéndolo en algo físico y, según él, más llevadero comparado un padecimiento psíquico grave.

Sus incidentes y actitud derivaron en un asesinato provocado en supuesta defensa propia cuando fue asaltado por un grupo de 15 delincuentes una noche de 1981, siendo uno de ellos apuñalado por Ivica en más de una docena de ocasiones. Tras lo sucedido fue llevado por su padre, que trabajaba en el Ministerio de Sanidad de su país, a un hospital psiquiátrico donde fue diagnosticado con un trastorno límite de la personalidad. Su buena conducta le permitió primeramente gozar de libertad los fines de semana, los cuales aprovechaba para dar algún show o ensayar, hasta que en 1990 fue definitivamente dado de alta del centro médico.

Satan Panonski en una de sus presentaciones en vivo

A finales de los 80’s y durante comienzos de los 90’s Ivica se dedicó a dar espectáculos en los que mezclaba la poesía con teatro y a veces también con el punk y con sonidos más experimentales y vanguardistas. Convirtió así su odio, miedos y sufrimiento en algo canalizable gracias al arte dadaísta y surrealista con el que se expresaba mediante la poesía, el lenguaje corporal extremo en sus shows y la pintura hasta prácticamente su muerte en enero de 1992 mientras, curiosamente, ejercía como soldado en la Guerra de Croacia.

Sobre la muerte de este pintoresco e interesante personaje hay tres versiones: que fue asesinado por un francotirador, que se suicidó y que se pegó un tiro accidental al resbalar con su arma. Ninguna de las tres ha sido oficializada, pero sí que se confirmó que el casquillo de la bala que acabó con su vida, clave para esclarecer los hechos, jamás se encontró.