Classics: Meshuggah – obZen (2008)

Publicado el 7 de marzo de 2008, la banda sueca consiguió convertirse en todo un referente del metal moderno con su sexto trabajo de estudio. La combinación de técnica y brutalidad los hace diferentes del resto del montante.

El sexto trabajo de la formación sueca supuso un antes y un después en su carrera y el espaldarazo definitivo que Meshuggah necesitaba para encumbrarse como uno de los estandartes del metal extremo. Si bien en sus anteriores trabajos el quinteto de Umeå ya había dejado bien claro que no eran una banda más haciendo gala de un sonido y composiciones a los cuales era realmente difícil encontrarles parecido, con ‘obZen’ Meshuggah alcanzó un grado de perfeccionamiento y sofisticación que hacen de este álbum una de las grandes obras maestras del metal contemporáneo.

El hipnótico riff de “Combustion” abre la veda en este trepidante viaje donde lo primero que destaca es un sonido mucho más pulido y menos estridente que el de los anteriores trabajos. “Bleed” es por su parte una de las canciones más emblemáticas de la banda. En él Thomas Haake realiza toda una exhibición con el doble bombo como pocas veces se había visto hasta el momento (YouTube está repleto de videos de baterías amateur versionando de mejor o peor forma el tema). “Lethargica”, “obZen” y “This Spiteful Snake” siguen con la tónica del álbum con una métrica totalmente impredecible (la que siempre ha sido una de las principales señas de identidad de Meshuggah) y unos medios tiempos pesados a más no poder.

En “Pravus” los suecos vuelven a pisar el acelerador en un corte totalmente caótico que precede a “Dancers To A Discordant System” que cierra el álbum con sus casi 10 minutos de virtuosismo y caos por partes iguales. Esta complejidad en las composiciones hicieron que el proceso de grabación del disco resultase extenuante (6 meses de trabajo ininterrumpido) y que tras grabarlo tuvieran que encerrarse 5 meses más en el local de ensayo para ensamblar los temas perfectamente de cara a su ejecución en directo.

Cualquiera que haya seguido mínimamente la carrera de Meshuggah no dudará ni un momento en señalar a ‘obZen’ como el disco más relevante de su carrera. Todo cuanto han editado posteriormente ha mantenido un nivel que raya la exquisitez pero fue este trabajo el que supuso un antes y un después en su carrera y el que los aupó al altar de los reyes del metal extremo. Un género tan en boga hoy en día como el djent le debe muchísimo a los suecos y en particular a ‘obZen’ por lo que su inclusión en esta lista de los 100 discos imprescindibles es indiscutible.