Es una de las bandas más importantes del metal actual, jugando en una liga muy cercana a otras como Opeth, Gojira, Baroness, The Ocean o Neurosis. Se formó en 1999 y debutó con el progresivo, agresivo y rompedor 'Remission' en 2002.

Mastodon ha ofrecido desde su primer minuto de vida una originalidad y frescura que ha dado más accesibilidad a su música en comparación con la de otras bandas bandas de su gremio, proporcionando al oyente la sensación de estar percibiendo tanto el poder el sludge y groove metal heredado de Pantera, Melvins o Neurosis como la epicidad del heavy metal más clásico, del doom, del stoner y hasta del thrash. Todo ello con la dosis justa y necesaria de estribillos y progresiones para no empalagar.

Mastodon (Foto: Clay Patrick McBride)

Los ingredientes que hicieron a los de Atlanta ser lo que son a día de hoy son muy variados, pero sus canciones siempre han contado con una serie de componentes que han permanecido inamovibles con los años: la pesadez de las guitarras afinadas y «comprimidas» en tonos bajos, el juego vocal alterno que ofrecen sus componentes, las incesantes y técnicas percusiones del gran Brann Dailor y la temática mitológica tanto a nivel lírico -para expresar emociones y contratiempos vitales-, como a nivel más visual.

Cuando un grupo tiene ya una cantidad de discos más que considerable (y ninguno malo) resulta extremadamente difícil escoger solamente 10 piezas de su puzzle. Esto se complica cuando entran en juego factores personales y gustos o preferencias que pretenden encasillar lo bueno con lo más técnico y mejor producido. Por supuesto, esto es una falacia tristemente extendida por los sectores más snobs que nunca trascienden en el significado de una canción o disco más allá de arreglos, afinaciones y de que todo suene cristalino.

Mencionar que se han quedado fuera de esta selección por muy poco canciones como «Mother Puncher», «Sleeping Giant», «Colony Of Birchmen», «Crystal Skull», «Divinations», «The Czar», «Black Tongue», «The Motherload», «Chimes At Midnight», «Sultan’s Curse», «Show Yourself», «Scorpion Breath» o «Ancient Kingdom». Es prácticamente imposible escoger sin dejarse atrás algo que duele, pero la imparcialidad tiene ese precio. Esta es la selección -en orden cronológico- de las 10 mejores canciones de Mastodon para iniciarse o reafirmarse en su grandeza:

«March Of The Fire Ants» (‘Remission’, 2002)

Con un riff inicial pesado característico, guturales primitivos, redobles de batería brutales y un pasaje melódico brillante, esta canción reúne ya los elementos más básicos de los Mastodon que todos conocen. Todo ello no exime la importantísima influencia del sonido de Neurosis en sus composiciones, que se evidencia más con su presencia en álbumes posteriores con la participación de Scott Kelly como si de un quinto miembro se tratase. «March Of The Fire Ants» es un oscuro y directo y va más allá del sludge gracias a sus capas progresivas y cambios de ritmo y es la carta de presentación de ese debut atemporal que fue ‘Remission’.

«Blood And Thunder» (‘Leviathan’, 2004)

La canción más clásica y famosa de Mastodon. Su riff principal y el mantra «white whale, holy grail» ya son historia dentro del metal contemporáneo, al igual que lo es el disco que la contiene: ‘Leviathan’. Se ha de mencionar que los coros de «Blood And Thunder» salen de la garganta de Neil Fallon de Clutch, que es uno de los colaboradores del álbum junto al ya mencionado Scott Kelly de Neurosis.

«Iron Tusk» (‘Leviathan’, 2004)

«Iron Tusk» es otro tema mítico de Mastodon que no podía faltar en esta lista y que demuestra que esta banda es especialmente genial componiendo intros de canciones. El trabajo de Brann Dailor a la batería es espectacular de nuevo, no tan solo en los primeros segundos, también en ese interludio que aparece pasado el minuto 2:00, donde parece oírse algo parecido a un vibraslap.

«The Wolf Is Loose» (‘Blood Mountain’, 2006)

Con este torpedo se abre ‘Blood Mountain’, el disco más querido del grupo junto a ‘Leviathan’ y el primero en dejar un poso evidente de melodías vocales limpias a través de 12 temas en los que participan músicos de renombre como Josh Homme de Queens Of The Stone en «Colony Of Birchmen», Scott Kelly de Neurosis de nuevo en «Crystal Skull», Cedric Bixler-Zavala de The Mars Volta y At The Drive-In en «Siberian Divide» y el teclista Isaiah «Ikey» Owens, tristemente desaparecido en 2014, en «Pendulous Skin» (donde Josh Homme también deja un mensaje de agradecimiento al grupo en la versión original con hidden track). «The Wolf Is Loose» es puro caos y puede recordar incluso a bandas como Converge (también pasa en algunos momentos de «Bladecatcher»). Tiene una intro de batería que subraya por enésima vez la razón por la cual Bran Dailor es uno de los mejores baterías de las últimas décadas. Locura absoluta y cambios de tempo sobresalientes.

«Oblivion» (‘Crack The Skye’, 2009)

«Oblivion» es clave para la carrera de Mastodon y un punto de inflexión en su música. Es el primer tema en el que Brann Dailor cobra un protagonismo importante como vocalista (si no se tienen en cuenta los coros en otros cortes) y el verdadero paso del grupo hacia un sonido más accesible para el gran público. Con todo ello, sigue siendo una canción 100% Mastodon con elementos hasta entonces no tan palpables en el grupo además de un tremendo solo de guitarra.

«The Last Baron» (‘Crack The Skye’, 2009)

Darle un 10 a «The Last Baron» sería hasta quedarse corto. Son Mastodon explorando el sonido de King Crimson y Rush en 13 minutos exactos de duración. Creativa, enérgica, técnica e inspiradora; es un auténtico y fenomenal viaje sonoro y un regalo tanto para amantes del rock como del metal progresivo en cualquiera de sus vertientes. Aunque sea difícil dictar una sentencia clara y justa, podría ser su mejor canción y el cúlmen creativo de Brent Hinds como compositor. Pocas canciones tan pulidas se han escrito en la historia del metal del nuevo milenio.

«Blasteroid» (‘The Hunter’, 2011)

Si bien con ‘Crack The Skye’ Mastodon tocó techo, con ‘The Hunter’ se pasó un poco de frenada. Sin ser un disco malo en absoluto, sí que es el menos cohesionado. A pesar de todo, su disco más «pop», por así decirlo, tiene canciones como «Blasteroid», que reivindica los momentos más locos de la formación en menos de 3 minutos en los que la demencia se apodera de la voz de Brent Hinds, el cual tuvo que lidiar con la muerte de su hermano durante la grabación del LP. Es su trabajo más desconcertante, su ‘Black Album’ particular quizá, pero aun así sigue siendo un episodio que es importante no saltar para entender a Mastodon y para tener más en cuenta que las «imperfecciones» también humanizan. Una canción o disco puede expresar con una precisión inimaginable un momento vital concreto o una batalla por librar. ‘The Hunter’ también es eso.

«Once More ‘Round The Sun» (‘Once More ‘Round The Sun’, 2014)

«Once More ‘Round The Sun», proveniente del disco de mismo nombre, es una de esas canciones que va más allá del metal al introducir atmósferas y efectos que enriquecen el conjunto. Cuando puedes añadir estructuras pop dentro del metal sin sonar forzado, ni pretencioso, ni a otra cosa radicalmente diferente, estás haciendo bien tu trabajo. Esto ocurre en varios momentos de ‘Once More ‘Round The Sun’, que sigue la línea que trazó ‘The Hunter’ con más de congruencia y grandes temas como el citado, la «twerkeable» «The Motherload» (esto se entiende mejor viendo su clip), «Chimes At Midnight», «Aunt Lisa» (una especie de melliza sónica de «Blasteroid») o la inmensa «Halloween».

«Jaguar God» (‘Emperor Of Sand’, 2016)

Una gran forma de cerrar un gran disco. ‘Emperor Of Sand’ implicó una vuelta a la inspiración de Mastodon, que entre los directos de cuestionable calidad que estaban ofreciendo en años anteriores y sus dos álbumes previos parecían haberse acomodado. De este LP se sacan varias conclusiones que llevan a pensar que Mastodon no parece que quiera quedarse en un cliché y que busca una evolución lógica y natural sin olvidar los riffs y ritmos de batería que los caracterizan desde hace lustros, ni tampoco los momentos -cada vez más puntuales- de locura y griterío en «Andromeda» o «Scorpion Breath». En este trabajo la voz de Brann Dailor da una segunda vida a su música y ya es tan protagonista como la de Brent y Troy (muestra de ello son tanto «Jaguar God» como «Show Yourself» y «Steambreather»). Increíble que se pueda cantar y tocar la batería de esa forma.

«Toe To Toes» (‘Cold Dark Place’, 2017)

En 2017 y casi por sorpresa llegó el EP ‘Cold Dark Place’ con canciones grabadas entre las sesiones de ‘Once More ‘Round The Sun’ y ‘Emperor Of Sand’. De los cuatro temas que lo componen, «Toe To Toes» sobresale como una canción nostálgica que recurre a arreglos vocales, palmas y a esos estribillos ya asentados en la música de Mastodon. Es quizá uno de sus temas más sinceros y expresivos que, sin dar demasiados rodeos, muestra a un Brent Hinds que se eviscera frente al micrófono con un sentimiento y madurez que solamente se interrumpen por un puntual leitmotiv vocal de Troy Sanders.

Jaime Tomé