Lo que empezó siendo la primera ópera conceptual de power metal, con Tobias Sammet como mente pensante y líder del proyecto, ha terminado por ser una banda con una colección interesante de discos que tienen material de sobra para elegir los diez mejores de su discografía.

Ha costado mucho trabajo elegir únicamente diez canciones de Avantasia, ya que la banda tiene en su haber 8 discos y más de 30 músicos que han aportado gran diversidad a cada una de las canciones que han formado parte de dichos álbumes. Se ha intentado que la mayoría de álbumes tuvieran presencia, ya que por lo visto en sus directos el gusto general de su público está muy repartido.

Tobias Sammet Avantasia

De las dos primeras entregas se han quedado fuera canciones como “The Tower”, “The Final Sacrifice” o “Avantasia”, canción que sigue todavía en su setlist. “The Toy Master” con Alice Cooper, “What’s Left On Me” donde aparece Eric Martin, la brutal “Book Of Shallows” con Mille Petrozza o “Another Angel Down” son otros temas que no han entrado en la selección final.

Únicamente hay dos álbumes que se ha quedado sin representación, pese a ser ambos de un altísimo nivel, ‘Angel Of Babylon’ y ‘The Mistery Of Time’. Los tres primeros discos (‘The Metal Opera’, ‘The Metal Opera Pt.II’ y ‘The Scarecrow’) son los más representados en la lista, no en vano 7 de los 10 temas elegidos pertenecen a ese trío de ases. Esto no quita para que sus últimos lanzamientos hayan tenido bastante éxito, y de hecho del último disco publicado hasta la fecha, ‘Moonglow’, una de sus pistas ha entrado directa a este top 10. Sin más dilación, estas son las 10 mejores canciones de Avantasia -ordenadas cronológicamente-:

“Reach Out For The Light” (‘The Metal Opera’, 2001)

El “Eagle Fly Free” de Avantasia y que sirvió para volver a escuchar a Michael Kiske cantar power metal, fue “Reach Out For The Light”. En esta canción de su disco debut ‘The Metal Opera’, se puede escuchar intercambiándose frases a Tobias Sammet y al propio Kiske, y es uno de los que no ha desaparecido de sus setlists por el pegadizo estribillo y su melodía tan representativa del sonido Avantasia de los dos primeros álbumes.

“Farewell” (‘The Metal Opera’, 2001)

También de su primer disco, aparece un medio tiempo con tintes folk y la voz de una talentosa Sharon den Adel -que se ve acompañada de nuevo por Kiske y Sammet- “Farewell”. Melódica, suave y con un estribillo con grandes coros, nos deja una grata sorpresa en la parte final. Decía Sammet que no le gustaban los finales que simplemente bajaban el volumen de la canción, y en este tema lo demuestran: Cuando parece que ha terminado, por debajo del estribillo principal aparece Kiske con un nuevo estribillo para redondear una fantástica canción.

“Sign Of The Cross” (‘The Metal Opera’, 2001)

En un disco plagado de himnos de power metal, entra como uno de nuestros favoritos la hardrockera “Sign Of The Cross”. Con un Oliver Hartmann extraordinario, la voz del malogrado André Matos en el bridge y la aparición del propio Kai Hansen, la hacen merecedora de estar en la lista. Para Tobias Sammet también debe ser de las mejores, ya que su epico estribillo lo suelen utilizar para los bises finales en un medley junto “The Seven Angels”.

“The Seven Angels” (‘The Metal Opera Pt. II’, 2002)

Si hay una canción que tiene total unanimidad entre los seguidores de Avantasia, esa es “The Seven Angels”. Más de 14 minutos con ocho vocalistas distintos, un estribillo colosal -que mantienen para terminar sus conciertos- y una base instrumental que aunaba técnica, velocidad y altas dosis de melodía.

“Twisted Mind” (‘The Scarecrow, 2008)

Seis años después de su ‘The Metal Opera’, y con muchas dudas sobre la continuidad del proyecto, se sacó Sammet de la chistera un disco más oscuro, sin tanto power metal pero igualmente satisfactorio para los fans. El álbum lo abría “Twisted Mind”, con unas guitarras afinadas de una manera más grave de las que nos tenían acostumbrado, la elegante voz de Roy Khan y otro estribillo cercano al metal sinfónico.

“The Scarecrow” (‘The Scarecrow, 2008)

En Avantasia las canciones largas son ya una seña de identidad, y en casi todas ellas salen del envite con satisfacción. Con “The Scarecrow” ofrecieron una canción de auténtico rock progresivo, que junto a pasajes instrumentales brillantes y la crudeza de la voz de Jørn Lande hicieron el resto para ser otra de las que nunca pueden faltar en sus directos. Para muchos, el mejor tema compuesto de la formación liderada por Tobias Sammet.

“Lost In Space” (‘The Scarecrow, 2008)

Hay canciones que, pese a parecer bastante sencillas, acaban por ser historia de la discografía de un grupo. En el caso de “Lost In Space”, además de ser el single de su tercer disco, sirvió para sacar dos EPs bajo este nombre con otras canciones de Avantasia que, si bien no entraron muchas en su discografía oficial, sí son muy valoradas por los fans más acérrimos.

“Dying For An Angel” (‘The Wicked Symphony’, 2010)

Escuchar al cantante de Scorpions -Klaus Meine- en un disco de Avantasia es otro de esos éxitos que Sammet ha conseguido para el grupo. En “Dying For An Angel” tenemos un medio tiempo con un estribillo a dos voces donde la nasal voz de Klaus adquiere todo el protagonismo. Una canción que deja cada vez más a las claras, que el power metal del inicio no es el género predominante en la segunda etapa del grupo.

“Let The Storm Descend Upon You” (‘Ghostlights’, 2016)

Cuatro de las canciones de este top 10 tienen una duración superior a los diez minutos, pero es que son los mejores en componer temas extensos sin que sean aburridos. En este caso, “Let The Storm Descend Upon You” cuenta con un poderoso inicio de teclados y base rítmica no es más que la antesala que precede a su descomunal estribillo. 11 minutos de total intensidad.

“The Raven Child” (‘Moonglow’, 2019)

La canción más joven de su discografía en la lista, aparece con “The Raven Child”. Tras un inicio medieval, de tempo reposado y un Hansi Kürsch que le da ese toque Blind Guardian tan característico, mezcla pasajes al más puro estilo Accept con voces robotizadas y un desenlace final donde la potencia contenida se suelta la melena para terminar en lo más alto. Es una especie de «The Scarecrow part II».

Edu Bou