De las bandas actuales de rock con un concepto escénico realmente original y llamativo, tan solo Muse parecen salvarse de la quema. Como decíamos, cualquier grupo de tontos con dinero puede tener llamaradas y baterías que se elevan, pero pocos pueden hacerlo con clase, sentido y lógica.


Muse

De las bandas actuales de rock con un concepto escénico realmente original y llamativo, tan solo Muse parecen salvarse de la quema. Como decíamos, cualquier grupo de tontos con dinero puede tener llamaradas y baterías que se elevan, pero pocos pueden hacerlo con clase, sentido y lógica. 

Los stages de MUSE desde la gira de «Black Holes and Revelations» han sido dignos de admirar. Como se puede admirar en el DVD «HAARP», grabado en el Wembley Stadium, el escenario de la banda en el año 2006 era absolutamente espectacular. Lo mejoraron con la gira de «The Resistance», con un gran uso de los lásers y un escenario multinivel a base de plataformas hidráulicas recubiertas de pantallas de video que elevaban al trio durante su actuación. No contentos con eso, para el tour de estadios al aire libre cambiaron el escenario completamente y lo convirtieron en una pirámide con motivos Orwellianos que incluía naves espaciales de helio con acróbatas colgados de ella haciendo una performance. Todo muy de andar por casa.

https://www.youtube.com/watch?v=44kjEXJtXcE

Pero para la siguiente gira, la de «The 2nd Law», la banda pasó a otro nivel completamente. El escenario al completo, de enormes dimensiones y diseñado para estadios, se asemejaba a una ciudad futurista, con altísimas torres que disparaban enormes llamadas al aire y un espectáculo luminotecnico únicamente equiparable al de Pink Floyd en la gira de 1994.

Una enorme pantalla de video curvada presidía el fondo del escenario, mientras que la pasarela y escenario secundario explotaban durante la intro a «Supremacy». Durante «Blackout» y «Guiding Light», una enorme bombilla con un acróbata colgando flotaba sobre el público del recinto, mediante control remoto. Un enorme robot bautizado como «Charles» aparecía en escena durante «The 2nd Law: Unsustainable». Cañones de CO2 llenaban de humo el escenario durante «Follow Me». Y así hasta el infinito. Un auténtico ataque a los sentidos por parte de una banda que ha dado más sorpresas, innovación y juego musical que la mayoría de grupos aparecidos en los últimos veinte años.