Allá por el año 1988, Metallica publicaban el que fue el cuarto álbum de su carrera y el más complejo: ‘...And Justice For All’. Este recibió una buena acogida por parte de la crítica y del público en general, siendo algunas de las pistas de sus composiciones más reconocidas.

Una de ellas es “One”, que se caracteriza por contar una dura y emocional historia dentro de un contexto de guerra a la que acompaña de manera excepcional la parte instrumental. Además, fue la canción que escogería Metallica para hacer su primer videoclip. Hasta entonces se oponían a la idea, alegando que en caso de grabar un vídeo debería ser algo creativo y con significado en lugar de algo aburrido y forzado.

Finalmente, consiguieron un resultado con detalles minuciosamente cuidados que combinaba planos de la banda tocando en blanco y negro con escenas de la película ‘Johnny Got His Gun’, que tuvo una gran importancia en el proceso de creación de “One”.

Inspiración literaria

Y es que para hablar de este proceso es necesario mencionar al co-mánager Cliff Burnstein, pues fue quien recomendó a James Hetfield leer el libro homónimo en el que se basa esta película como fuente de inspiración para desarrollar la idea principal de la canción. James, principal compositor de Metallica junto a Lars Ulrich, tenía una idea en mente para un tema sobre alguien que está atrapado en su cuerpo que se fue transformando en la dramática historia que cuenta “One”.

La protagoniza un soldado de guerra que, debido a la explosión de una mina en la I Guerra Mundial, pierde no sólo sus extremidades sino también la vista, el oído y el habla. Sin embargo, su cerebro sigue pensando y sufriendo, rezando por que llegue la muerte y suplicando por algún tipo de ayuda para dejar de agonizar encerrado en su propia cabeza.

Se trata de un relato antibélico lleno de frustración, dolor, sufrimiento y agonía que no sólo se transmite a través de los versos sino que la parte instrumental también se mete en el papel. Inolvidable es esa parte en la que Lars Ulrich y Kirk Hammett unen fuerzas con la batería y guitarra respectivamente para simular una ametralladora.

La época post-Burton

Grabado en One On One Studios (Los Angeles), ‘…And Justice For All’ cuenta una vez más con el productor que ya había estado al mando en sus anteriores discos ‘Ride The Lightning’ y ‘Master Of Puppets’, Flemming Rasmussen. Aunque en un principio el elegido era Mike Clink, quien había hecho un gran trabajo produciendo el disco ‘Appetite For Destruction’ de Guns N’ Roses pero finalmente su estilo no encajaba para este proyecto. Flemming se puso en marcha con la banda para dar forma a este trabajo, donde se conoció el lado más pulido de Metallica en cuanto a composición, letras y conceptos.

La situación de la banda en aquel momento era un tanto complicada puesto que todavía no habían pasado ni dos años desde la pérdida de Cliff Burton, anterior bajista al que rindieron homenaje con “To Live Is To Die” en este disco y quien hoy en día es recordado como una leyenda en el metal. Aquel accidente que acabó con su vida supuso un gran trauma para Metallica del que les costó recuperarse.

Eso sí, tenían un buen sucesor en sus filas: Jason Newsted. Ya había participado en el EP ‘The $5.98 E.P.: Garage Days Re-Revisited’, pero este fue su primer disco como bajista. Desgraciadamente, su instrumento tiene un volumen ridículo en la mezcla final y apenas se aprecia, decisión tomada por parte de James y Lars que fue la principal crítica de este trabajo. Justicia para todos… menos para Newsted.

Salto a la televisión musical

Meses después del lanzamiento de ‘…And Justice For All’ llegó ese deseado primer videoclip, dejando un impacto visual y destacando en medio de tantos vídeos de artistas más cercanos al hard rock y glam como Bon Jovi, Def Leppard o Guns N’ Roses que ponían una y otra vez en la MTV y demás canales musicales del momento.

El videoclip de “One” consiste en planos en blanco y negro de la banda interpretando la canción intercalándose con imágenes de la película de 1939 ‘Johnny Got His Gun’. Como se menciona al principio de este reportaje, tanto el libro original como la adaptación al cine, ambos del autor Dalton Trumbo, fueron la gran inspiración de James para darle forma a su historia. De modo que Metallica compraron los derechos de la película para poder incluirla y ganar así un mayor impacto visual

Como toque final, Metallica actuaron en la 31 edición de los premios Grammy siendo también uno de los nominados en la categoría de “Mejor interpretación de hard rock/metal vocal o instrumental”. Por desgracia para ellos, ese año la victoria fue para Jethro Tull. No obstante, un año después “One” fue ganadora de un Grammy en 1990, concretamente en la nueva categoría de “Mejor interpretación de metal”.

Iria López