¿Cuál es la historia detrás de los álbumes de Gloryhammer?
Para el oyente casual, es muy posible que Gloryhhamer no sean más que otra estúpida banda de power metal, quizás la mayoría sepan que son una parodia, pero ignoran el trasfondo que hay detrás de la música, creyendo equívocamente que la banda hace un braistorming de cosas absurdas antes de cada sesión de composición. Nada más lejos de la realidad, el proyecto de Bowes cuenta una historia distinta en cada trabajo protagonizada por los miembros de la banda, en una dinámica que supone un giro hilarante a la fórmula de la ‘Emerald Sword Saga’.
Cuándo uno piensa en Gloryhammer, enseguida le vienen a la mente varias cosas: canciones sobre los tropos más absurdos de la fantasía, videoclips que parecen una partida de rol ida de madre y a los miembros de la banda vestidos como si fueran a ir a la Blizzcon. A nadie se le ocurre pensar que las canciones pueden guardar alguna relación entre sí, menos aún dar continuidad a la historia de un disco al siguiente, pero tal es el caso.
Es algo común en el power metal el lanzar discos temáticos, ya sea decidiendo que el trabajo hablará sobre un solo tema, como suele hacer Sabaton, o contando una historia, como ha hecho Blind Guardian con ‘Beyond the Red Mirror’ o ‘Legacy of the Dark Lands’. Como no podía ser menos, una banda llamada a parodiar los topicazos no podía resistirse a hilvanar una historia a través de su música, y de hecho logran hacerlo con bastante más eficacia que bandas más “serias”.
No olvidemos que el sentido del humor no aparece como menoscabo de la calidad, y que la mejor obra literaria en nuestra lengua, Don Quijote, no es sino una parodia desternillante de las obras medievales de caballería, por lo que no es ningún despropósito decir que Gloryhammer hacen mejor power metal y cuentan una mejor historia parodiando que cientos de bandas que no se toman una décima parte de en serio su música de lo que lo hacen de sí mismas.
Tales From The Kingdom of Fife
El primer trabajo de Gloryhammer es el único que es auto conclusivo, probablemente porqué nadie esperaba que este extravagante proyecto fuera a ser un éxito, y nos sirve para presentar a los personajes que nos acompañarán en la aventura, que son los siguientes:
-Angus Mc Fife, príncipe de Fife y heredero al trono de Dundee, un paladín del bien que lucha sin descanso contra el mal.
-Zargothrax el Mago, el principal antagonista de la historia, que usará sus poderes para imponer su oscura voluntad y para dominar a la humanidad.
-Proletius, archimaestre de los caballeros de Crail, una orden de nobles guerreros que no descansarán hasta haber derrotado a la oscuridad.
-Hootsman, el guerrero bárbaro de Unst, un hombre cuyo poder solo se ve sobrepasado por su virilidad y su amor por la cerveza.
-Ralathor, el misterioso ermitaño de Cowdeanbeath, un sabio que siempre ayuda a nuestros héroes de formas muy misteriosas y convenientes para el guion.
El álbum comienza con la oscura profecía de Anstruther, que augura la caída de Dundee, tal y como termina ocurriendo cuándo Zargothrax masacra a todos los unicornios para revivirlos como una letal horda no muerta que le permite asumir el control del reino y secuestrar a la princesa Iona Mc Dougall (The Unicorn Invasion of Dundee). Nuestro héroe Angus McFife jura venganza en la canción homónima, y en un sueño se le revela que para derrotar al malvado mago, deberá reunir 3 objetos de gran poder, siendo el primero de ellos el Martillo de la Gloria (Quest for the Hammer of Glory).
A continuación viaja hasta Strathclyde para hacerse con un dragón dorado que le servirá de montura (Magic Dragon), y tras acceder a los recuerdos de su amada princesa McDougall (Silent Tears of Frozen Princess), decide viajar hasta el lago Rannoch, en cuyas profundidades yace el último objeto que necesita, el Amuleto de la Justicia (Amulet of Justice). Una vez reunidos todos los artefactos, Angus rinde sus respetos a los poderosos caballeros de Crail, que, liderados por el archimaestre Proletius, le ayudarán a derrotar a Zargothrax en la batalla final contra las fuerzas del mal (Hail to Crail).
Mientras las fuerzas de los caballeros de Crail distraen al ejército del mal, Angus, ayudado por Hootsman y guiado por Ralathor el ermitaño, logra colarse en la fortaleza de Zargothrax a través de las cavernas de Cowdeanbeath (Beneath Cowdeanbeath). Así nuestro héroe logra enfrentarse al malvado mago en combate singular, derrotándolo y arrojándolo en un lago de hielo líquido. Con el poder del Amuleto de la Justicia logra liberar a su amada princesa McDougall, y así el reino es finalmente liberado.
Space 1992: Rise of the Chaos Wizards
Mil años han pasado desde los acontecimientos del primer disco, y en lejano año 1992, los restos criogenizados de Zargothrax están custodiados por los caballeros espaciales de Crail en el satélite de Tritón. Pero entonces, un culto de magos del caos ataca por sorpresa la remota fortaleza, derrotando a los caballeros y liberando así a su líder Zargothrax para que vuelva a aterrorizar a las fuerzas del bien (Rise of the Chaos Wizards). El descendiente de Angus McFife, Angus McFife XIII, blandiendo aún el Martillo de la Gloria que ha heredado de sus ancestros, jura derrotar al mago e impedir que siembre el caos por la galaxia (“Legend of the Astral Hammer”).
Mientras tanto, Zargothrax se reúne con el Rey de los Goblins, que le probé con una llave de cristal capaz de abrir un portal al infierno que yace oculto en las profunidades de Dundee (“Goblin King of the Darkstorm Galaxy”), a la vez que nuestro héroe se reúne con una versión ciborg de Hootsman (“The Hollywood Hootsman”), con los remanentes de los caballeros de Crail (“Victorious Eagle Warfare”) y los Questlords de Iverness (“Questlords of Iverness, Ride to the Galactic Fortress”). Ambas fuerzas arengan a sus ejércitos con consignas muy distintas, pues el ejército del mal desea sumir al universo en llamas (“Universe on Fire”) mientras que las fuerzas de la luz desean salvar a los inocentes (“Heroes of Dundee).
Finalmente, ambos ejércitos se enfrentan en los cielos de Marte, pese a que la batalla en sí es solo una distracción para que Zargothrax pueda concluir el ritual que le permita liberar al dios antiguo Kor-Virliath a través del portal que hay bajo Dundee y destruir así toda la vida en el universo. Sin embargo, alertado en el último segundo por Ralathor, Hootsman cae sobre la tierra más rápido que una bala láser y colapsa su reactor de estrellas de neutrones, destruyendo la tierra y al malvado dios con su noble sacrificio. La implosión provoca una singularidad en el tejido de la realidad en la forma de un portal, en el que Zargothrax decide saltar para huir de la batalla. Angus McFife decide ir tras él para acabar con su mal para siempre, concluyendo así el segundo álbum (“Apocalypse: 1992”).
Legends From Beyond the Galactic Terrorvortex
Continuando justo dónde terminaba el disco anterior, la historia arranca con Angus persiguiendo a Zargothrax a través del agujero de gusano, siendo transportado así a una realidad alterna en la que el malvado mago ha podido entrar antes, de forma que ha doblegado dicha realidad a su antojo, masacrando a diario a campesinos inocentes, corrompiendo a los unicornios de Dundee y reconociendo que existen más de dos géneros en la constitución. Angus se enfrenta a él solo para darse cuenta de que en esta realidad su martillo astral no tiene poder, por lo que decide huir (The Siege of Dunkeld (In Hoots We Trust)).
Zargothrax planea aprovechar un alineamiento astral para convertirse en un dios, por lo que encomienda a su fiel lugarteniente, un Proletius corrompido por una daga del mal, que vele por que las fuerzas del bien no puedan interrumpirlo (Masters of the Galaxy). Angus se retira con la resistencia liderada por el almirante Ralathor (“The Land of Unicorns”), comandante de la flota de submarinos voladores, que le dice que para que su martillo tenga efecto debe cargarlo en el sol de esa realidad (“Laser Dragon Fire”). Para ello nuestro héroe inicia una misión para conseguir el Legendario Jetpack Encantando (“Legendary Enchanted Jetpack), que debe llevarlo volando hasta el interior del astro.
Así pues, Angus va volando hasta el sol y recarga su martillo, que recupera un poder suficiente como para someter al malvado hechicero y a sus huestes demoníacas (“Gloryhammer”). El Almirante Ralathor dispone a las fuerzas del bien en zafarrancho de combate para enfrentarse a las hordas demoníacas de Zargothrax alrededor del buque insignia de la flota, en SS Hootsforce (“Hootsforce”). Antes del ataque, Angus recuerda todas las aventuras que ha pasado y siente el peso de la responsabilidad que pende sobre su misión, y es que, si fracasa, toda esperanza morirá con él (“Battle for Eternity”).
Finalmente, las fuerzas del bien atacan Dunkeld mientras Zargothrax está completando el ritual que ha de convertirlo en un dios, y para evitar ser interrumpido, envía a los Caballeros de la Muerte de Crail liderados por Proletius a masacrar campesinos para distraer la atención del ejército la luz. Ralathor se enfrenta con ellos, y al verse abrumado por las hordas de águilas no muertas, decide activar su defensa final, un misil de justicia nuclear, vaporizándose así mismo y al mayor adalid de la oscuridad.
Con Proletius derrotado, Angus lidera el asalto final contra Zargothrax, pero llega demasiado tarde, y es que el malvado mago ha tenido tiempo de terminar el ritual y de convertirse en un dios. Sin embargo, justo cuándo toda esperanza parecía perdida, los cielos se abren, y Hootsman aparece para ayudar a nuestro héroe. La explosión de su núcleo no lo mató, sino que hizo que su ser se mezclara con el tejido de esta realidad alterna, convirtiéndose así en su dios, dejándole claro a Zargothrax que solo hay sitio para un dios todopoderoso en este panteón.
Y así, con el poder combinado del Martillo Astral y la fuerza divina de Hootsman, Zargothrax es finalmente derrotado, pero antes de caer convertido en un charco de polvo líquido, el vil hechicero logra clavar una daga del mal en el pecho de Angus, que es consciente de que no tardará en volverse malvado por los abyectos poderes de su hoja. Por ello, antes de convertirse en lo que siempre juró destruir, nuestro héroe decide arrojarse a las profundidades volcánicas de Schiehallion, acabando así con su vida. Todo esto ocurre en “The Fires of Ancient Cosmic Destiny”, que concluye con un misterioso mensaje en morse en que se dice que se ha enviado a un clon de Zargothrax al pasado.
Y está es la historia que hay detrás de Gloryhammer, dando un porqué a sus extravagantes letras y disfraces. No es la mejor historia del mundo, ni tampoco la más original, pero es sin duda tan cautivadora como hilarante, y logran desarrollarla a la perfección a través de su música. A la espera de un nuevo trabajo del grupo en unos años, uno no puede sino teorizar con qué locuras nos sorprenderá Bowes, pero sin duda son muchos los que esperan con ansia el próximo capítulo en las aventuras de Angus McFife.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.