Pese
a que cada año la cantidad de festivales Europeos proliferan de una manera imparable
y a ritmo alarmante (¡incluso en España!), el WACKEN
Open Air siempre perdurará entre las mentes de quienes hemos
podido acudir en alguna ocasión, siendo visto como el referente obligado en
cuanto a festivales se refiere y muy digno sucesor de aquellos lejanos y míticos
Monsters of Rock, celebrados en el circuito de Donington años atrás.

Digamos que el mismo año en el que Donington falleció, 1996
si no me falla la memoria, supuso el año de arranque de WACKEN
como festival europeo pese a que existía desde 1990, pero no fue hasta 5 o 6
años después que empezó a contar con diversas estrellas internacionales en su
cartel, compuesto en su mayoría hasta la fecha por bandas locales o a lo sumo
Alemanas.

Su más cercano perseguidor desde los últimos años siempre ha
sido el Dynamo Open Air de Eindhoven, quien a finales de los 80 y principios
de los 90 era el festival más importante de metal extremo (thrash/power/speed/death)
que existía y que, creo yo, cometió el error de abrirse a nuevas tendencias
como el Numetal por ejemplo. Este hecho junto con algunos problemas de carácter
legal han impedido que el Dynamo haya seguido existiendo, sin embargo, soy de
los que piensa que meter en un mismo escenario a MAYHEM, IRON MAIDEN y KORN
no es muy buena idea. Llegando a su cenit en la edición de 1995 donde PARADISE
LOST encabezaron el festival ante casi 120.000 personas, el Dynamo Open Air
se ha ido desinflando hasta el 2000, año en el que juraría celebró su última
edición.

Teniendo vía libre, el WACKEN
Open Air ha sabido captar la atención del público heavy mayoritario
centrándose quizá en las tendencias más extremas, las que casualmente siempre
han predominado por los países norteños, y más en concreto por Alemania.

WACKEN
– EL VIAJE

No quiero desmotivar a nadie, pero menos de 30 horas de autobús
no os las quita ni dios, y eso contando con que seáis de Barcelona. Los viajes
organizados suelen tener sus ventajas: te cogen en la puerta de tu casa y te
dejan en la puerta de tu casa, además, no te has de preocupar ni por gastos,
ni peajes, ni gasolina… simplemente entras en el autobús, duermes, bebes cerveza,
cantas, vuelves a beber cerveza y duermes. (Vamos, lo que vas a estar haciendo
los siguientes 4 días…). Por la contra, ir en vehículo particular pese a que
tiene la ventaja de ser tú quien pone la hora de salida y vuelta y la ruta a
hacer, suele ser bastante incómodo por el simple hecho de tener que “improvisar”
y estar siempre pendientes del pote monetario, precios de gasolina, quién paga
ahora el peaje… ahh, y paso de hablar del conductor que es quien más pringa,
hehehehe.

De
camino siempre es entrañable ver los paisajes que el suelo franco/germano nos
brinda, amén de sus bonitas y cuidadas áreas de servicio o sus curiosos y apaciguados
inquilinos, sin embargo, los momentos más emotivos se producen cuando ves pasar
por tu lado un autobús o coche a través de los cristales del cuál solo se divisan
pelos y más pelos, es en ese preciso momento cuando todos sacan a relucir el
orangután que llevan dentro en forma de gesto cornudo y grito de apareamiento
al son de “!!!Waaaackkeeeennn!!!”.

Clásico entre clásicos – Visita a las dependencias de Hellion,
una de las mejores tiendas de heavy metal de toda Europa. Desconozco la franquicia
situada en Hamburgo, pero la que se encuentra en Itzehoe, a 40 Km de WACKEN,
es una delicia para todo aquel que se regocije entre vinilos, cd’s de importación,
reediciones chungas, parches, camisetas, libros y demás fetiches. Ahh y atención
con su jefe/dependiente, el Sr. Lord Doom responsable de las reseñas que aparecen
en el catálogo de la tienda y una de los mayores eminencias y freaks del metal
que he tenido la ocasión de conocer, a parte de ser un ferviente seguidor de
todo lo que huela a metal patrio, ya sean OBÚS, ÁNGELES DEL INFIRENO, PANZER,
MURO, BARÓN, AVALANCH, TIERRA SANTA… ( o para él, Muggghhoo, baghhoon ghoojjoo,
tieghha sannddaaa…hehehehe).

WACKEN – EL
CARTEL

Mucha gente siempre ha acusado a la organización, sus patrocinadores
y las entidades
más “cercanas” al festival como la Rock Hard Alemana o la todopoderosa Nuclear
Blast, de pecar de cierto “corporativismo”, en otras palabras, que año sí año
también siempre acabas viendo a las mismas bandas y eso a la larga puede hacerse
cansino. RAGE, SAXON, GRAVE DIGGER, GAMMA RAY, HELLOWEEN, KREATOR, DORO, AMON
AMARTH…Elijas la edición que elijas para estrenarte en la Meca, ten por seguro
que ahí estarán y podrás “disfrutar” de ellas por enésima vez.

Pese a este “inconveniente”, el cartel suele rondar casi siempre
sobre las 90 y pico bandas por lo que siempre habrán una docena, lo menos, que
sean de tu interés o nunca hayas visto en directo.

Es innegable que WACKEN
siempre, o en los últimos años, ha optado por el metal extremo antes que por
otros estilos sin embargo,
los fans del buen hard/heavy siempre han tenido su regalito en forma de banda
nueva o clásica, como VICTORY, PRETTY MAIDS, DOKKEN, ROSE TATOO, SOUL DOCTOR,
PINK CREAM 69… Vamos, que en WACKEN
llueve a gusto de todos.

Otra de las grandes bazas del festival reside en el hecho de
que cada año la organización consigue reunir a bandas míticas, ya sean conocidas
o simplemente pertenezcan al underground tan presente y amado entre los metalheads
alemanes. Entre sus grandes hazañas se encuentran los citados VICTORY, EXUMER,
BLITZKRIEG, SWEET SAVAGE, WARRIOR, JAGUAR, PARIAH, RAZOR, SAVAGE, WHIPLASH,
TYGERS OF PANG TANG, LIEGE LORD, GRIM REPAER, LIZZY BORDEN, ROSE TATOO, SAMSON,
ASSASSIN, CANDLEMASS, HEATHEN, NUCLEAR ASSAULT, WARLORD… Como veis, la lista
es interminable y convierte la labor de los señores Holger Hubner y Thomas Jensen
en algo infinitamente loable y digna de mil y un elogios. Sus conocimientos
de heavy metal son lo suficientemente amplios como para saber qué tipo de música
han de traer y qué tipo de música han de evitar a toda costa si no quieren hundir
la reputación del festival. Saben cómo complacer a los fans más jóvenes y a
los más veteranos, tirando de una propuesta plagada de formaciones actuales
y de sobras conocidas por todos hasta bandas de auténtico culto conocidas por
muy pocos, pero que siempre consiguen llamar la atención de fanáticos de todas
partes del mundo que se desplazan hasta WACKEN
solo para verlos a ellos (quien viera a SABBAT en el 2002 sabrá a lo que me
refiero).

Las bandas se reparten entre 4 escenarios:

True
Metal Stage – Lo nunca visto, un escenario enorme con una parrilla
de luces impresionante y una PA que asusta de lo grande que es. MOTORHEAD trajeron
su bombardero, SAXON su águila, THERION su orquesta y VENOM su borrachera…Recuerdos
imborrables en la mente de un servidor…

Black Metal Stage – Pese
a su nombre, en él no solo actúan bandas de black metal, sino de metal oscuro
y extremo en general. Está situado a la izquierda del True Metal Stage y le
separa del mismo una enorme calavera de cabra (logotipo del festival) que por
las noches se ilumina con varias llamaradas de fuego, simplemente espectacular.

Party Stage – supongo
que debe su nombre a las juergas que suelen montarse en el mismo. Al ser muy
pequeño hace que todo quede como “en familia”. Al principio recuerdo que era
una carpa tapada pero desde la edición del 2001 se convirtió en escenario reducido,
pero al aire libre.

Wet Stage – Siempre ha
sido la carpa. Durante el día suelen tocar las bandas más pequeñas, por la noche…Bueno,
ya hablaremos acerca de lo que sucede allí por la noche, hehehe.

WACKEN – ¿LEYENDA,
MITO O REALIDAD?

Cuando mucha gente se refiere a WACKEN,
suelen sacar a relucir mil y una anécdotas a cuál más disparatada, sonada y
pintoresca.
Pues sí señores, todo esto y más sucede en WACKEN,
un recinto de unas cuantas hectáreas donde el alcohol, la locura desenfrenada
y el heavy metal se funden de manera "magistral" e irrepetible dando
lugar a todo tipo de aberraciones y demás actos espeluznantes y grotescos más
propios de una novela del Marqués De Sade que de la propia realidad.

Demos paso a la cara oculta de WACKEN
o como diría el Dr. Feelgood, a la fauna y flora del festival:

Un
servidor ha tenido que presenciar en repetidas ocasiones hasta donde es capaz
de degradarse la dignidad de ciertos individuos y es que no iba muy desencaminado
aquel ser que en su día me dijo lo siguente: "No creas que todos los alemanes
somos así, simplemente venimos a WACKEN,
desfasamos infrahumanamente durante 3 días y luego volvemos a nuestras calmadas
y sosegadas vidas…". Estas frases tendrían validez de no ser porque es
imposible asociar semejante desenfreno etílico a un acto esporádico o espontáneo.

No me creo que todos esos cadáveres que uno ve por la zona
de conciertos y de acampada a todas horas, y sobretodo de madrugada sean jóvenes
correctos e inmaculados que se "desvirgan" en WACKEN
ante el poder pecaminoso del alcohol caliente y barato, NO me lo creo. De la
misma forma que no me creo que un tipo sea capaz de dejarse envolver todo el
cuerpo con precinto industrial en pelotas con todo el pegamento enganchado al
cuerpo y a los pelos simplemente por haberse tomado
"3 cervezas", no cuela.

Un fotógrafo, consciente de los excesos de los asiduos al festival,
armado con cámara en mano se dedicó en el 2002 a recoger preciosas instantáneas
de seres en posiciones imposibles tirados en el suelo cubiertos de barro y mugre,
pero eso sí, con el fiel vaso de cerveza (o en su defecto cuerno vikingo…)
enganchado a la mano. Una bonita estampa que todas las madres desearían tener
en el recibidor de sus hogares…

Alguien
se preguntará, ¿cuernos vikingos en el recinto del festival? Pues sí, es curioso
como a veces no te dejan entrar un cinturón de balas o un simple ¡mechero! Sin
embargo una vez dentro, puedes adquirir en cualquier tenderete una espada, un
hacha, dagas, cuchillos y si buscas, bien seguro que hasta un Panzer de la 2ª
guerra mundial… Esto me hace recordar al primer engendro que vi en mis primeros
segundos allá por el 99 en el recinto alemán; un tipo poco agraciado facialmente
armado con su martillo de Thor
de 30 toneladas y media, el gorro a lo Viki el Vikingo, la malla de hierro y
la eterna sonrisa producida por ¿Hidromiel? Nada de eso, cerveza de la barata
y además caliente. El tipo en cuestión se agachó y empezó a hacerle lo que parecía
una felatio a un buen “amigo”, sin embargo al pasar por su lado comprobamos
que íbamos algo desencaminados, el gran Vikingo se estaba bebiendo la orina
de su "otro yo" (igual de feo y borracho que él…).

No
me extrañaría nada que en la entrada al recinto hubiese una paradita o unas
taquillas donde rezase en alemán, "Por favor, depositen aquí su dignidad,
son 2 €, perdonen las molestias, gracias". De otra manera no se explica
que alguien pueda dormir a la intemperie sobre una montaña de latas de cerveza
(¿100?, ¿200?) O simplemente en el suelo, en medio del concierto de unos VENOM
por ejemplo rodeado de miles de personas que no dudarán ni un instante en pisarle
si se da la ocasión y es necesario.

Todo esto me lleva a pensar, ¿Padecen los alemanes de insomnio?
¿Cómo puede ser que no se despierten de sus sueños ni a patadas? ¿Todavía seguirá
el hombre de los parches apoyado en su taburete sobando delante de los lavabos
por los tiempos de los tiempos hasta que algún otro bienaventurado lo cambie
de lugar cuál florero?
Preguntas sin respuesta…

WACKEN – ESTEREOTIPO
DE METALHEAD

Bien,
vamos a intentar definir lo más fidedignamente posible a los seres asiduos a
WACKEN, generalmente alemanes, holandeses,
suecos o noruegos, todos ellos de similares rasgos tanto genéticos como etílicos.

Por lo general, los que vienen en vehículo propio suelen cargar
el maletero única y exclusivamente de cerveza de tal forma que todo lo que no
tenga gradación etílica no entra por la puerta. Suelen ir con lo puesto y no
se cambian de ropa (interior tampoco, me refiero a ellas..) en 4 o 5 días. Tampoco
reparan en higiene, las colas de las duchas
curiosamente suelen estar plagadas de españoles quienes supongo, tenemos mejores
costumbres en ese aspecto en detrimento de los germanos, quienes no se quitan
esa aureola de mugre, sudor y mierda durante todo el festival (evidentemente
habrán excepciones…).

Más
de una vez me he preguntado si los atuendos que llevan no forman parte ya de
su cuerpo. Esos pantalones de cuero desgastados y cubiertos de barro, los chalecos
tejanos recubiertos de parches y todo aquello que se pueda pegar en un chaleco,
chapas, tachuelas, tapones de cerveza, imperdibles, chupetes (!verídico!), cadenas,
balas…

Desconozco el nivel intelectual de la masa heavy germana, sin
embargo me cuesta mucho asimilar la manera tan curiosa que tienen de comunicarse;
a gritos cuál hombre de Cromagnon (a eso hay que sumarle que el alemán ya de
por sí parece una lengua prehistórica…)

Los hábitos de esta gente suelen centrarse en la masiva ingestión
de alcohol a todas horas y en todo lugar, toque quien toque. Su único propósito
es acabar por los suelos y esperara que algún amigo se apiade de él y se lo
lleve para la tumba en forma de tienda.

WACKEN – METALMARKET
/ TENDERETES

Como era de esperar en un festival de estas características,
no podía faltar el bazar donde reunir a todos los freaks del metal en busca
de los más preciados y codiciados tesoros.

En
el Metalmarket todo vale, empujones, despistes, robos a mano armada, trampas,
trueques, regateos… Es la ley de la jungla, el más fuerte vence y se lleva
el vinilo de turno.

Todas las grandes tiendas de Europa, sellos discográficos potentes,
distribuidoras, tiendas cibernéticas, vendedores itinerantes, particulares…
Suelen montar la paradita para exponer su mercancía.

Comúnmente se suele decir que si algo no está en el MetalMarket
de WACKEN, es que realmente no existe,
lo que yo corroboro al 98 %.

El peligro de este tipo de sitios es que uno sabe con cuanto
dinero entra, pero NO con cuanto sale. Sin ir más lejos un servidor desembolsó
en una tarde 125 mil de las antiguas pesetas en cuestión de 4 horas. Me juré
no volver a cometer semejante atrocidad económica pero como ser humano que soy
al año siguiente piqué de nuevo y 150 mil pesetas más…

Con los Euros parece que la cosa se ha calmado (mentira, lo
que pasa es que yo iba sin un duro, hahaha), veremos que sucede en el 2004…
A diferencia de los mercadillos de cuarta regional que se suelen ver tanto en
España como en otras partes de Europa, el Metal Market de WACKEN
posee una gama de artículos relacionados con el heavy metal de todo tipo, desde
vinilos descatalogados, rarezas, cd’s inencontrables, camisetas, videos, parches,
complementos, revistas… En fin, todo lo que uno se pueda imaginar. El problema
reside en intentar compatibilizar los conciertos con las horas que supone ver
la carpa del Metal Market entera. Por poner un claro ejemplo, solo mirando vinilos
y

esporádicamente algún que otro Cd me tiré unas 4 horas un año
y no vi si quiera ni la mitad de lo que había, háganse a la idea de la magnitud
del asunto.

Como
complemento al desenfreno económico se suele situar un escenario dentro del
mismo Metal Market donde renombrados artistas suelen hacer clinics y demostraciones
con sus respectivos instrumentos. Por las tablas han pasado gente como Kai HAnsen,
Victor Smolsky, Henjo Richter, Alex Beyrodt, Mike Terrana, Matt Sinner…

Mucha gente suele criticar el hecho de que se cobre entrada
para acceder al Metal Market, algo a priori descarado. Lo que la gente no se
para a pensar es la cantidad de dinero que los tenderos pierden a causa de los
robos, y es que recordemos que allá ni hay fundas protectoras de discos ni sistemas
de alarma, y más de un@ espabilad@ que yo me sé, se sacó varios Cd’s sin abonar
un solo Marco.

En definitiva, si os gusta comprar (o coleccionar) cualquier
cosa relacionada con el heavy metal y tenéis en mente acudir un año a WACKEN,
sed prudentes y ahorrar, de lo contrario no asoméis la cabeza dentro del Metal
Market, el que avisa no es traidor.

WACKEN – ORGANIZACIÓN
/ PERSONAL / INFRASTRUCTURAS

WACKEN puede tener
muchas pegas, como todos los grandes festivales europeos sin embargo, la organización
año tras año lucha por añadir mejoras notorias de cara a pulir aquellos aspectos
donde más tiende a fallar.

En
su página web suelen añadir un formulario donde te hacen dar tu opinión sobre
todos los puntos tanto positivos como negativos de WACKEN
de cara a ser subsanados. Lejos de ser un mero formalismo, las propuestas tienden
a cumplirse y año tras año todo lo referente a duchas, lavabos y demás mejora.
¿Pagar 1 euro por ducharse es excesivo? Bien, si preferís las duchas gratis
del Metal Mania o del Machina allá vosotros… yo prefiero pagar un Euro por
utilizar unos lavabos SIEMPRE limpios y unas duchas con agua caliente y en condiciones
a ahorrármelo y pillar el tifus cuanto menos.

Salvo
casos aislados, tanto la gente de seguridad como el personal de la organización
son profesionales y saben llevar a cabo su labor de una manera eficiente, lo
que no quita que esporádicamente, tal o cual gorila liara una con alguien, pero
por lo general yo nunca he presenciado nada similar. Por el backstage, el ambiente
que se respiraba era de cordialidad y saber estar en todo momento, de hecho
tampoco me consta que nadie tuviera problemas para recoger acreditaciones, pases
de fotógrafo y demás.

Otro
de los puntos fuertes de WACKEN reside
en la cercanía entre zona de acampada y zona de conciertos, pegándose una con
otra (como en el Machina vamos…), aunque eso no quita que año tras año se
les recrimine la estrechez de la entrada a la zona de conciertos, lo que provoca
que a las horas punta, uno pueda llegar a estar 1 hora en la cola para poder
entrar (eso sin contar que llueva y se monte el barrizal…). Supongo que lo
tienen todo bien pensado, poniendo dificultades a la gente para acceder a la
zona de conciertos, estos se lo pensarán dos veces a la hora de salir y así
se quedan ahí dentro con todo lo que ello supone; asistencia de público, venta
de merchandising, consumo de alcohol… A parte del Metal Market, dentro de
la zona de conciertos también hay muchísimos tenderetes, sobretodo de ropa y
accesorios donde uno puede encontrar todo lo que se proponga, es cuestión de
horas de búsqueda.

Finalmente,
si alguien está agobiado y quiere abandonar la zona de conciertos, puede irse
a la zona de acampada donde se habilitan cada año carpas a modo de terrazas,
con sus bancos de madera y mesas y tomar cerveza de la marca en particular que
patrocina la carpa, la inmensa mayoría marcas de cerveza alemanas.

Sobre
la zona de acampada, pues es probablemente la mejor que he visto en mi vida,
y de lejos. Vale que el clima allí acompaña, y es más fácil encontrar césped
que aquí en España sin embargo, si la gente del Dr. Music Festival logró crear
una zona de acampada "muy decente" años atrás, ¿porque los organizadores
del Metal Mania o Machina se empeñan en llevarnos a patatales desérticos? Será
que por el norte de España no hay preciosas y espléndidas zonas verdes donde
poder montar un festival… ¿Que les cae muy lejos a los del sur? Bueno, el
que decide hacer 1000 km para ir a un festival no creo que le vaya de 500 más…

La zona de acampada de WACKEN
cuenta con un suelo de césped bastante destrozado, pero a fin de cuentas es
césped y no arena que a la mínima que corre un poco de aire se levanta toda.
El único problema viene cuando llueve que el suelo de tierra se convierte en
barro. Si bien en la zona de tiendas no es tan pronunciado el barrizal, en las
zonas cercanas a los lavabos, duchas y fuentes se producen auténticas arenas
movedizas. Si a eso le sumamos que unos 15 orangutanes de aspecto nórdico año
tras año suelen colocarse cerca para tirar a la gente al barro… hacen de estas
zonas áreas peligrosas por donde, en caso de lluvia, se recomienda no pasar.

WACKEN – HEADBANGER’S
BALLROOM

Como
bien reza su nombre, el Headbanger’s Ballroom es una carpa donde se reúne toda
la fauna wackeniana al acabar los conciertos con ganas de seguir la fiesta hasta
altas horas de la madrugada, o bien hasta el día siguiente.

De un tamaño considerable e imponente, la carpa ofrece a los
metalheads todo aquello que les ha hecho venir a WACKEN:
cerveza y heavy metal por un tubo. Los más espabilados (ejem) obtan por comprar
cajas de latas de

medio litro en el pueblo y entrarlas a la carpa en vez de consumir
dentro, sale sustancialmente más barato, aunque eso sí, se recomienda no alejarse
mucho de las municiones, los embriagados alemanes acechan y un solo despiste
puede propiciar un saqueo cervecil y el posterior trauma.

El
contacto con todo tipo de individuos ayuda a la hora de practica idiomas y hace
que en menos que canta un gallo estés metido de pleno en una conversa con un
alemán, un belga y un peruano acerca de cualquier chorrada relacionada con el
metal o la cerveza.

A
medida que empiezan a transcurrir las horas, empiezan a producirse las primeras
bajas de la noche; cualquier sitio es bueno para ponerse a dormir, un rincón
de la carpa con 120 decibelios de presión sonora, las cercanías de la carpa
donde todo el mundo suele mear o  desahogarse estomacalmente o sin ir más lejos
en medio de la carpa, es tan sencillo como dejarse caer, si tienes suerte aún
vendrán tus amigos y te recogerán para apartarte a un lado, de lo contrario
es probable que te levantes al día siguiente completamente pisoteado o sin dinero
en los bolsillos (esto me suena…).

La música no suele ser nada del otro mundo, está hecha a imagen
y semejanza de los alemanes, me explico. Ya pueden llevar una camiseta de DARKTHRONE,
POSSESSED o EXORCIST que cuando les ponen el "rock & roll all nite"
de los KISS, el "Princess of the night" de SAXON, el "Fast as
a shark" de ACCEPT o el "We’re not gonna take it" de los TWISTED
SISTER se vuelven completamente locos y desfasan como si les fuera la vida en
ello,
hasta aquí todo normal. Lo curioso es que cuando son las 6 de la mañana, cada
uno de esos temas ha sonado 24 veces y uno empieza a estar hasta la coronilla
sin embargo los alemanes (los que quedan vivos, claro) siguen ahí como si fuera
la primera de toda la noche, encomiable cuanto menos.

Luego está el tema del Metal Karaoke. Para todos aquellos que
no quieran irse de WACKEN sin haber
aportado su grano de mediocridad e innobleza al asunto, la carpa ofrece un preciso
escenario donde, con unas guitarras de plástico en mano, puedes pedir tu himno
metálico favorito y berrearlo hasta la muerte con 1000 personas mirándote y
desencajándose la mandíbula a tu costa. Como veis hay muchas maneras de perder
la dignidad en WACKEN, ésta es una
de ellas. De paso puedes asegurarte que algún “amigo” tuyo inmortalice el momento
con su cámara fotográfica, consiguiendo así otra preciosa instantánea para el
recibidor de tu casa y conseguir de nuevo que tu madre se sienta orgullosa de
ti…

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