Tras tres años de sequía, Tolmin volverá a rugir con fuerza. La calma de sus bosques y ríos cristalinos desaparecerá al ritmo de metal extremo, folk y heavy clásico. MetalDays celebrará su primera edición pospandemia con todas las de la ley y una gran incógnita futura por resolver, su ubicación futura.

Ya son 18 años desde que MetalDays echara a andar en Tolmin, localidad eslovena poblada por apenas 3.000 habitantes y ubicada al oeste del país, a escasos 30 kilómetros de la frontera con Italia.

Historia y ubicación de MetalDays

Uno de los mayores valores del festival es el propio lugar donde se celebra. Desde su fundación en 2004 bajo el nombre de Metalcamp, el evento se ha realizado en Sotočje, un entorno natural sin parangón.

Arcanus (Foto: Elena Marco)

El festival se celebra entre dos ríos de montaña y cuenta con dos playas reservadas para los asistentes. Por si esto fuera poco, los organizadores ofrecen espacios para realizar actividades paralelas tales como yoga, masajes, bailes y artes marciales.

Fuera del recinto del festival también existe una gran variedad oportunidades como la escalada, el canotaje o el ciclismo de montaña. Con el paso del tiempo, la asistencia del MetalDays ha crecido exponencialmente y el festival decidió limitarla en 2010. Desde entonces, el aforo máximo del evento es de 12.000 personas, una cifra muy lejana a la de los macrofestivales europeos y que invita a disfrutar de una experiencia festivalera mucho más calmada.

Cartel del MetalDays 2022

La primera edición del festival bajo el nombre MetalDays fue en 2013, un año transformador para el evento. En aquella edición cambiaron de organizadores y rumbo, no hay más que mirar los números. En 2012 los programadores diseñaron un cartel de 55 bandas, en 2013 la cifra ascendió hasta a 109.

Durante su historia, el festival ha tenido una distribución de días irregular, pero en 2007 apadrinó el concepto de “vacaciones metálicas”. Se trata de un evento de lunes a viernes, una cita musical que abarca toda la semana y no solo el fin de semana, como la gran mayoría de festivales.

Los cabezas de cartel de esta edición son Meshuggah, Testament, Jinjer, Skindred, Mercyful Fate. La presencia en el cartel del quintento danés es la que más expectativas ha suscitado. Los pioneros del black metal están de vuelta de forma definitiva, con King Diamond a la cabeza, y renovarán su repertorio de grandes clásicos con canciones que pasarán a formar parte de su primer disco de estudio en más de veinte años.

Brutal Assault cuenta solamente con tres escenarios. El principal (Lemmy Stage), el del bosque (Bosko Bursac Stage) y el de la playa (Newcomers Stage). Por el principal pasarán nombres destacados como Moonspell, Amenra, Decapitated, Rotting Christ, Napalm Death, Suffocation y Sick Of It All. Otra de las actuaciones más señaladas la ofrecerá The Halo Effect, la superbanda formada en 2021 por miembros de In Flames y Dark Tranquility.

En el bosque podrá escucharse entre otros a Celeste, Ghostkid, Saor, Incantation y Uada. Además, en este escenario habrá dos bandas procedentes del Estado español. Angelus Apatrida e Incursed. Para los vizcaínos será la segunda vez en Tolmin, ya que se estrenaron en 2019 en el Newcomers Stage, tras haber sido seleccionados por los programadores gracias a una iniciativa impulsada por el propio festival. Los asistentes al evento que toquen en una banda tienen la opción de entregar un disco suyo y ser seleccionados para tocar en futuras ediciones.

Instalaciones, servicios y organización de MetalDays

Una de las señas de identidad de MetalDays es la conciencia ecológica como motor de cambio. El festival lleva cinco años trabajando en un programa que marca metas anuales con el fin de ser sostenibles y cuidar el ecosistema. Entre los retos establecidos están la prohibición de generadores de combustibles fósiles, la oferta de tiendas de campaña hechas con materiales biodegradables, la disminución de baños químicos y la transición a un menú 100% vegetal.

Además, la organización cuenta con un sólido equipo de limpieza para que, seis horas después de la finalización del festival, el entorno natural esté completamente limpio. Los responsables del evento colaboran activamente con Sea Sheperd, organización sin ánimo de lucro por la conservación de la fauna marina, e impulsan el visionado de los documentales ‘Cowspiracy’ y ‘Earthlings’, convertidos ya en iconos de la lucha ecologista y antiespecista.

El viaje a Tolmin puede realizarse de muchas maneras. Para quien se traslade en avión, el aeropuerto de la capital Ljubljana está situado a 100 kilómetros de distancia. Los espectadores que se decanten por esta opción podrán contar con buses lanzadera que los transporte hasta el festival. Para los metaleros de la Europa central, el tren es uno de los grandes reclamos. La estación de Ljubljana está conectada con Trieste, Frankfurt, Munich, Zurich, Praga, Viena, Budapest, Graz, Zagreb y Belgrado. Otra opción es la de viajar en coche, un viaje de largo recorrido para los asistentes españoles, pero que abre la oportunidad de aprovechar la ruta y visitar los lugares de alrededor.

Precisamente, unas obras de carretera qué están en marcha y los asistentes podrán ver este año con sus propios ojos, son las que han puesto al MetalDays en la encrucijada. Los representantes públicos de Tolmin han presentado un plan para renovar el entorno natural de Sotočje y, una vez reconstruido, no permitirán festivales de más de 5.000 asistentes. Desde la organización mantienen la esperanza de que en 2023 el festival se pueda celebrar en Tolmin, pero en el futuro el evento tendrá que trasladarse a otro lugar y esto traerá consigo grandes reajustes económicos. Un futuro todavía sin escribir.

Mikel Yarza