'Atomic Playboys', el caro pasatiempo de Steve Stevens

El conocido guitarrista, también compositor de grandes bandas sonoras, puso en marcha un proyecto que se llevaba gran parte de sus ganancias pero que se disfruta a lo grande.

Steve Stevens es un músico que no necesita presentación alguna. Lleva acompañando al bueno de Billy Idol desde que éste decidiese establecerse por su cuenta en 1981 y desde entonces ha grabado la friolera de cinco discos con el vocalista británico así como el reciente EP ‘The Roadside’, publicado hace tres meses aproximadamente. Su particular técnica y su personal sello hacen de sus composiciones algunas de las más destacables de esa mezcla de géneros entre punk rock, hard rock y glam rock a la que muchos denominan dance-punk y que nos ha dejado grandísimas joyas como “Rebel Yell”, “Dancing With Myself”, “White Wedding”, “Mony Mony”, “Hot In The City” o “Eyes Without A Face”.

Igual de interesante es el proyecto de Dan Huff conocido como Giant, del que me gustaría hablar largo y tendido en otro momento tras el fiasco que supuso el lanzamiento de su último álbum no hace tanto a través del sello Frontiers Records, aunque tan interesante como ese es el caso de Steve Stevens en solitario. El guitarrista ha trabajado con algunos de los más grandes, entre las que destacan algunas colaboraciones con Michael Jackson, Vince Neil, Sebastian Bach, Peter Criss, Robert Palmer, Kyosuke Himuro o Gregg Bissonette, entre muchos otros.

Steve Stevens, el fuera de serie

Aunque Stevens es conocido por su trabajo con Billy Idol, el productor y compositor originario de Nueva York ha contribuido a la creación de algunas de las melodías más recordadas del cine de acción como es el caso del tema principal de “Top Gun” (Tony Scott, 1986) o el tema principal de “Speed” (Jan de Bont, 1994). Pero por si eso fuera poco, en 1989 decidía dar vida a su primer álbum en solitario bautizándolo con el mismo nombre con el que se conocía a su formación en solitario, ‘Atomic Playboys’. Así es como se rodea de un buen puñado de músicos como el vocalista Perry McCarty, el teclista Phil Ashley (Kiss) y el baterista Thommy Price (Joan Jett, Billy Idol) para publicar su ópera prima bajo el sello de Warner Bros Inc.

Haciéndose cargo de la composición de diez de las once canciones que componen ‘Atomic Playboys’, encargándose de las guitarras y el bajo de todo el álbum, de la producción e incluso de ser el vocalista principal en “Woman Of 1000 Years”, el guitarrista de Nueva York decide unir sus fuerzas a los productores Beau Hill (Stevie Nicks, Warrant, Alice Cooper, Kix, Winger) y Ted Templeman (Van Halen, Honeymoon Suite) para acabar de perfeccionar un álbum totalmente redondo que al parecer se ha perdido con el paso del tiempo y que conviene reivindicar más a menudo.

Un buen puñado de grandes canconiones como la que da título al propio álbum, cargados de un hard rock con tintes glam de carácter enérgico y desenfrenado, se combinan con cortes de sonido más ochentero como “Power Of Suggestion” o “Crackdown” haciendo de esta mezcla un dulce y apetitoso álbum con el sello de un Steve Stevens en su mejor momento. Desde la mimada producción hasta las trabajadas composiciones junto a un sonido de guitarra de lo más electrizante y unos teclados de infarto a cargo de Phil Ashley, este ‘Atomic Playboy’s es una de esas joyas ocultas que se deberían escuchar más de lo que se suele hacer.

Steve Stevens y Billy Idol (circa 1980).

Una formación de lujo

No solo de la grandeza de Steve Stevens vive este álbum pues es un auténtico homenaje al género que interpreta en el que además hay cabida a otros músicos como Paul y Nate Winger, hermanos de Kip Winger, así como una breve aparición de Fiona, conocida vocalista y actriz que también ha trabajado con Kip Winger, como corista en “Desperate Heart”. El reputado baterista Anton Fig (Bob Dylan, Kiss, Cyndi Lauper, Ace Frehley, Madonna, Joe Satriani) también participa en ‘Atomic Plaboys’ en canciones como “Desperate” Heart y “Evening Eye”, aportando su característico sonido a un álbum de lo más variado.

‘Atomic Playboys’ sería el primero de los tres álbumes que Steve Stevens lanzaría en solitario, admitiendo en 2001 que esta es una de las aficiones más caras del guitarrista cuando en una entrevista le preguntaron si en algún momento se podría mostrar interesado en reunir a la banda. Paradójicamente, acabó lanzando el tercer álbum como Steve Stevens en 2008, siete años después de estas declaraciones, aunque esta vez no se rodearía de la misma cantidad de músicos de renombre y donde además adoptaría un sonido mucho más rock y no tan glam como en sus anteriores trabajos.

La portada merece una mención especial pues es obra del fallecido artista suizo Hans Ruedi Giger, autor al que ya hemos rendido especial homenaje en anteriores ocasiones y que además sería el encargado de dar vida a uno de los extraterrestres más terroríficos de la historia del cine: el ‘Alien’ (Ridley Scott, 1979). ‘Atomic Playboys’ fue reeditado en 2013 por Rock Candy en una cuidada edición que cuenta con un nuevo máster que, además, suena de lujo.