Hoy hace 30 años: Bon Jovi lanza ‘Keep The Faith’, un punto de inflexión tras ‘New Jersey’

Después de las agotables giras que supuso el éxito de 'New Jersey' y los desgastes extenuantes que vinieron tanto en lo musical como en lo personal, Bon Jovi se tomaron un descanso.

Se escucharon rumores de separación y llegaron a necesitar ayuda, porque se habían convertido en el cenit de las bandas exitosas en lo más alto de su carrera.

El éxito es caer nueve veces y levantarse diez

El 3 de noviembre de 1992 se lanzó el quinto álbum de Bon Jovi, ‘Keep The Faith’. Bon Jovi habían acabado exahustos y quemados después de ‘New Jersey’ por las titánicas giras y los shows interminables. Algunas de las grandes bandas del metal estaban cayendo, otras se perdieron en el limbo que les supuso la llegada de la década de los ’90. Se reagruparon, y se dieron cuenta de que la vida son fases, pero sino te reinventas, te mueres siendo una copia de ti mismo. Ellos se dieron cuenta de que simplemente, no eran eso.

Grupos como Guns N’ Roses tardaron más de quince años en sacar un nuevo disco y otros se perdieron en el camino. Un año después, Bruce Dickinson dejaba Iron Maiden diciendo algo parecido «toda esta configuración es una limitación, una jaula dorada que hace mucho dinero, pero no deja expresar tu identidad».

Se juntaron tras tomarse unos años de inflexión y nació ‘Keep The Faith’. Después de ‘New Jersey’ todos los miembros de la banda estaban alejados en diferentes áreas, Jon Bon Jovi sacaba su primer álbum ‘Blaze Of Glory’ (cuya canción fue un éxito masivo), Richie Sambora estaba grabando su primer álbum en solitario ‘Stranger In His Town’, y David Bryan estaba inmerso paralelamente en sus trabajos.

El álbum supuso un giro musical, y se alejaron del glam y el hard rock de los ’80 que empezaba a caer precipitadamente. ‘Keep The Faith’ ha vendido más de 12 millones de copias a nivel mundial, y es el quinto album más vendido de la historia de Bon Jovi y recibió la certificación de doble platino. En total ha recibido 21 discos de platino.

El disco abre con «I Believe» que es una potente apertura de rock que explica de una forma muy concisa hacia donde derivaba el sonido de los ’90 en ese momento. «Keep The Faith» empieza como una quimera de intenciones con esa línea de bajo inolvidable, y Tico Torres sumerge las percusiones con Jon, hacia una especie de orgasmo que supone la irrupción de la guitarra de Richie Sambora.

Más adelante, «Bed Of Roses» posiblemente una de las canciones más exitosas y más criticadas del álbum. El pastelón máximo. Pero no por eso deja de ser bueno, fue todo un éxito escrito por Jon Bon Jovi mientras estaba en el cuarto del hotel pasando una resaca.

Como contrapunto, «Dry County» la canción más larga de la banda con una duración de 9:52, posiblemente la mejor canción del disco y una de las mejores de la banda. Es una épica que posee una amalgama de cambios de ritmo monumentales, y uno de los mejores solos de Richie Sambora. Una pieza excepcional injustamente muy olvidada.

Richie esta pletórico, como también así lo demuestra en la potente «If I Was Your Mother», donde luce de manera pletórica. Un cañonazo duro en línea cercana al metal que se deja de sentimentalismos y habla de un tipo errante que está obsesionado con la relación con su novia (y vaya si lo adjudicó).

La fe es un respiro que permite apaciguar el dolor

No son aún los Bon Jovi más comerciales, pero sin duda este trabajo supuso una inflexión entre lo que es hacer un gran trabajo de rock, porque lo es, y dejar a un lado la tendencia, tener algo de fe en uno mismo, y por un momento, dejar de lado lo que está pasando alrededor. Bon Jovi ha declarado que ‘Keep the Faith’ es lo mejor que han hecho. «‘Blame It On The Love Of Rock N’ Roll’ es una mirada al pasado, cuando éramos jóvenes, y decíamos vamos a tocar un día en el Madison Square Garden, y tus amigos te decían: ‘sí, claro'».

El álbum suponía el reflejo de la decepción de la formación ante la indiferencia de los problemas, y tratar de dar un mensaje positivo a una generación que expresaba su descontento en los ’90, de destruir el mito de la idolatría del que tanto gozaron años atrás. En definitiva, de mantener la fe. Porque la fe es dar el primer paso, incluso cuando no ves la escalera completa.