10 cosas que NUNCA debes hacer si tienes una banda

Una de las cosas más irritantes que solemos ver son esas bandas que hablan de si mismas en tercera persona como si ya fuesen absolutas leyendas del Heavy Metal. Nunca comencéis un post de Facebook diciendo "Hola fans". No son vuestros fans: son vuestros amigos, familiares y algún sudamericano despistado que les "dio like" sin más.

Tener una banda de heavy metal es un asunto muy serio. El futuro del género depende de ti y de lo que tus colegas de instituto (ahora compañeros de banda) decidáis en vuestro local de ensayo mientras bebéis cerveza de 0,19€ comprada en el Lidl de la esquina. No solo eso: hay un montón de gente ahí fuera que necesita que seáis los próximos Iron Maiden o los próximos Barón Rojo para poder saquearos correspondientemente y llevarse todo vuestro dinero en cuanto logréis, obviamente, el Gran Éxito. No solo eso: la industria de la música lo está pasando muy mal y solo vosotros podéis salvarla. Como en esta web somos muy conscientes de vuestras responsabilidades y de lo serio que es todo esto tan serio, os vamos a dar diez rápidos consejos para que vuestra banda logre ser algo más que una demo sobre una pila de demos en nuestra oficina.

1. La novia del cantante NO puede ser vuestro mánager

Os sorprenderíais de en cuantas reuniones nos hemos encontrado donde no habla el guitarrista, el cantante o el batería (a veces estos últimos hablan, aunque con dificultad). No. Habla la novia de turno, en la cual el resto de miembros han confiado el porvenir de la banda, porque resulta que trabaja en una empresa de seguros y es delegada de zona, por tanto Sabe De Lo Que Habla. Bien: llevar una banda es algo muy distinto, que tiene más que ver con cuidar niños pequeños con serios problemas de autoestima que con equilibrar balances. Además, que Yoko Ono hable en las reuniones os desautoriza inmediatamente ante cualquier profesional del mundillo. Si es absolutamente necesario que forme parte de vuestro entorno, ponedla a vender camisetas después de los conciertos.

2. No hables de tu banda como si ya fuese famosa.

Una de las cosas más irritantes que solemos ver son esas bandas que hablan de si mismas en tercera persona como si ya fuesen absolutas leyendas del Heavy Metal. Nunca comencéis un post de Facebook diciendo «Hola fans». No son vuestros fans: son vuestros amigos, familiares y algún sudamericano despistado que les «dio like» sin más. Es como entrar en vuestra casa y hablarle a vuestro padre y hermano como si fuesen vuestros seguidores. «Gente, ya estamos en casa, que hay para comer?».

3. No pidáis votos para concursos a través de redes sociales

En España hay aproximadamente como diez mil bandas de metal y muchos dueños de locales de ensayo con segundas y terceras residencias en la costa. La cuestión es que, a quien le gusta esta música, tiene a muchos músicos en su lista de amigos de las redes sociales. Ya sabéis aquello de «todos los heavies tienen o han tenido grupo». Ergo, las posibilidades de que cada día tengas aproximadamente 10 o 15 notificaciones de presuntos amigos (porque no son amigos, sino no te harían eso) pidiendo que les votes para tocar en el Sweden Rock, en el Requeson Open Air, en el Villa de la Puñalada 2015 o en el concurso de maquetas de la Asociación Vecinal de Santa Quiteria del Mojón  son tremendamente altas. El consejo real vendría a ser «no hagas lo que todo el mundo hace, o jamás destacarás», pero realmente nos da igual que termines siendo un fracasado: lo que queremos es que no nos envíes las malditas notificaciones. Y no, no sabemos como se bloquean. Bueno, si: borrando a todos los amigos que sean músicos metaleros.

4. No pidáis votos para concursos a través de redes sociales

Nada nuevo, pero es para enfatizar. Nos da mucha, mucha rabia y nos causa gran malestar.

5. No queráis ser sólo los más grandes de vuestra ciudad o jamás saldréis de vuestro vecindario

Es el año 2015: hay que pensar y actuar en global. Cierto es que hay que ir paso a paso, pero es recomendable tener un plan de actuación a lo grande. Cada vez más y más bandas de nuestro país consiguen marcharse de gira por Europa. Puestos a tirar dinero en vicios, mejor hacerlo allí donde al menos valoran la música y el trabajo de las bandas. Nos encontramos muy a menudo con bandas que piensan que son muy grandes en su ciudad (esto pasa mucho en Madrid, casualmente, no sabemos porqué) pero que cuando salen de sus límites geográficos no son absolutamente nadie, con la consiguiente fragmentación del ego y las peleas en la furgoneta volviendo de Almería con 15 euros limpios a repartir entre todos. Lo mejor es hacer cuatro conciertos en tu país, como mucho, y luego largarte de Francia para arriba. Es la UE. No necesitáis visados. Y puestos a tocar para 20 personas en un antro, hacedlo donde al menos el público lo valore.

6. No hagáis una biografía muy detallada para vuestra web y redes

A nadie le importan los nombres de todos los bajistas que han pasado por vuestra banda. Ni que Nicolás el agricultor tuvo que dejar de ser vuestro batería para ocuparse de unos terrenos de su difunto abuelito. A nadie le importa si antes os llamabais Dark Shit y ahora os llamáis Darkest Shit. A nadie le importan los concursos que habéis ganado a nivel local (quien suscribe estas líneas una vez ganó un concurso de historias cortas en el instituto y ya veis el resultado). A nadie le importa si habéis fichado por una de esas compañías que os cobran por editar el disco. Eso no es fichar: es contratar un servicio y todos lo sabemos. Id al grano: que hacéis, quienes sois, vuestras influencias, vuestra discografía y un par de hechos curiosos para completar (vuestro cantante se cortó el pene con una motosierra una vez y por eso os llamáis Bloody Penis of Hell, etc.). Todo lo demás no le importa a nadie, excepto a vosotros.

7. No fichéis a cualquier mánager

Fichar a un mánager que se ocupe de mover a la banda y buscarle oportunidades es un tema delicado. En éste país hay apenas un docena de personas que realmente tienen influencia y consiguen cosas de verdad. Todo lo demás lo podéis conseguir vosotros mismos: desde montar un bolo compartido con una banda de Segovia hasta enviar un email a los Finnvox Studios para que os masterizen el disco. Estamos en los tiempos de las redes sociales, los e-mails y el contacto directo. La única labor para contratar a un manager es que os lleve a un nivel superior y los que pueden hacerlo de verdad no son tipos a los que se pueda contratar: son ellos quienes se interesan. Todo lo demás es tener a una empleada del hogar que os saque las castañas del fuego que sois demasiado vagos para sacar vosotros mismos.

8. No os quejéis del mucho dinero que cuesta sacar adelante una banda

Tener un grupo no es una cuestión inevitable y absolutamente necesaria para vivir. Es un vehículo de expresión artística, si, pero no algo impepinable. Por tanto, podríamos encuadrarlo bajo el epígrafe de «Hobbies y Caprichos». Esas cosas valen dinero, tanto si te dedicas a construir miniaturas de barcos, a coleccionar sellos o a tunear tu coche. Vale pasta y nadie te la debe: te la gastas porque quieres. Si queréis hacer bien las cosas, tenéis que invertir pasta: para grabar, para girar, para promocionaros, para tocar, para vestir adecuadamente, para tener un buen logo y una buena portada… si en algún momento gastos e ingresos se equilibran, dad gracias al altísimo. Bandas que están en grandes compañías discográficas y que han hecho giras internacionales, siguen estando en deuda.

9. No firméis las cosas sin leerlas

Uno de los mayores motivos por los cuales los grupos han sido saqueados durante toda su historia es porque sus miembros eran incultos absolutos y no leían o no sabían interpretar los papeles que les ponían por delante (hoy en día el conocimiento de todo el mundo está a vuestra disposición en internet, gran ventaja sobre Kiss y Def Leppard, para empezar). Que tu grupo sea desconocido ahora mismo no quiere decir que un día no pegue un petardazo por motivos X. Entonces odiarás más haber firmado aquel contrato de management que te obliga a no hacer nada durante dos años que no haber consultado lo de la cláusula suelo para tu hipoteca. Y hablando de Def Leppard, ahí andan regrabando sus discos clásicos para poder recuperar los derechos que posee Universal Music. Todo por una pequeña cláusula en un contrato de hace veinte o treinta años. Si tenéis que gastaros el dinero en alguien que os asesore, que sea en un abogado que os explique lo que no sabéis, no en el locutor de un programa local de radio que os va a hacer de manager.

10. No te pongas un caché si no generas dinero

Ponerse un caché cuando lo máximo que has metido por tu cuenta en una sala son 100 personas es la manera más rápida de ahuyentar posibles ofertas para tocar en sitios que te pueden interesar. Ten siempre las opciones abiertas: ir a taquilla, a comisión de barra, cubrir gastos…y que el caché sea la última opción para aquel momento en que sepas que mueves con seguridad cierta cantidad de gente. No os llegáis a imaginar la cantidad de fantoches que vienen pidiendo 600 Euros para tocar cuando no generan ni 200 entre taquilla y barra. Puedes hacer perder dinero a alguien una vez, pero no dos.