Igual que Manowar ponen el aviso de que su concierto puede dañarte los oídos debería ser obligado que los grupos te avisaran cuando tocan con coros sampleados. Basta ya de mover la boca como un pez, ponerse un dedo en la oreja para hacer ver que afinas o poner caritas de sufrimiento y entrega cuando es el sampler el que tapa tu voz real.

Hoy en día encontrar una banda de heavy metal capaz de cantar sus propios coros en directo es toda una rareza. Evidentemente que la tecnología de apoyo facilita las cosas, pero sólo hay una cosa que me cabree más que un grupo tire de los coros de estudio… ¡que intente engañarnos acercándose a los micros para hacer ver que cantan! Y es que son centenares las bandas consagradas que intentan darnos gato por liebre.

Un buen ejemplo de ello son los Mötley Crüe, pero a diferencia de la mayoría de grupos, ellos no intentan acercarse al micro para crearnos la falsa sensación de que cantan los coros perfectos. Sabes a lo que vas, no engañan a nadie.

La primera vez que viví esta sensación fue en un Wacken de principios de los 2000 cuando Royal Hunt presentaban “The Mission”. Me sentí estafado y decepcionado pues era la primera vez que les veía. A favor de ellos cabe decir que en sus últimas giras llevan a dos coristas capaces de recrear los maravillosos coros del grupo, que al fin y al cabo son el santo y seña de su brillante sonido propio. Otros que se han adaptado a los tiempos son los Rhapsody de Luca Turilli. Evidentemente su música es compleja y necesitan de tecnología, pero a día de hoy cuentan con un par de coristas (masculino y femenino) para apoyar sus directos. Y es que hay que ponerle remedio de algún modo. ¿Os imagináis a Therion con las voces sampleadas? ¿Valdría la pena irles a ver?

Últimamente uno empieza a valorar muchísimo el que un combo sea capaz de recrear en directo lo que ofrece en disco. Me parece bien que suene distinto, o que haya errores… o que se tire de samplers si se quiere… pero por lo menos anunciarlo y no tratar de confundir al personal.

En el último show de Primal Fear y Brainstorm los de Ralph Scheepers tiraron de coros reales, apoyados por todo un Matt Sinner. No fueron perfectos, pero eran reales. No fue el caso de Brainstorm, precisamente. El problema se acentúa cuando un grupo está haciendo un gran concierto y llegas a creer que lo están bordando en los coros. Es un enorme trabajo el tener que aparentarlo durante más de hora y media, y claro, si metes la pata, se descubre el pastel. Fue el caso de Iced Earth con todo un Jon Schaffer bordándolo. Realmente te creías que el hombre sentaba cátedra como vocalista… hasta que no movió la boca cuando tocaba. Triste que el gran Jon Schaffer tenga que samplearse la voz en temas en los que tiene que tirar de voz principal. No es el caso de “Stormrider”, pues allí cambia de micro y la voz es real, pero cuando apoyaba la voz principal de Stu Block, hace unos años, fue todo enlatado.

El caso más triste de todos es el de Wasp. Uno ya no sabe a ciencia cierta qué partes reales Blackie Lawless llega a cantar. Pero no es nada nuevo, llevan desde la gira de “Helldorado” con esta tónica. Por otro lado cuando ves a bandas como Cheap Trick, Transatlantic, Savatage o Def Leppard tirando de coros, puedes entender la enorme complejidad y trabajo que le añaden a su directo. Y eso tiene que quedar subrayado.

Igual que Manowar ponen el aviso de que su concierto puede dañarte los oídos debería ser obligado que los grupos te avisaran cuando tocan con coros sampleados. Basta ya de mover la boca como un pez, ponerse un dedo en la oreja para hacer ver que afinas o poner caritas de sufrimiento y entrega cuando es el sampler el que tapa tu voz real.