Efectos negativos en la voz de Ozzy por el Parkinson

Hace unos días el vocalista británico confesaba en una entrevista que le habían diagnosticado Parkinson. Expertos médicos aseguran que podría influir de forma negativa en su voz.

El Parkinson podría dañar la voz de Ozzy

Expertos médicos avisan que la voz cantante de Ozzy Osbourne podría verse afectada negativamente por su diagnóstico de enfermedad de Parkinson. Dicha enfermedad la desveló el propio vocalista británico en una entrevista en «Good Morning America», que reconocía que recibió la noticia en febrero del año pasado  después de varios problemas de salud, incluyendo una infección por estafilococo casi mortal y una caída que dañó su sistema nervioso. Ozzy Osbourne está tratando su enfermedad con medicamentos en la actualidad.

La Dra. Rachel Dolhun, vicepresidenta de Comunicaciones Médicas de la Fundación Michael J. Fox para la Investigación del Parkinson, le contaba a Forbes que los pacientes a menudo experimentan dificultades con el habla y la deglución mientras luchan contra la enfermedad. «Afectan en que las cuerdas vocales y en los músculos para tragar. En las personas con Parkinson, a menudo la voz se vuelve mucho más silenciosa. La emoción o el tono se eliminan. Esto es realmente una parte fundamental del Parkinson para muchas personas y se convierte en un síntoma muy difícil de controlar», informaba la doctora.

Por otra parte, John Lehr, jefe de la Fundación sin fines de lucro Parkinson, dijo que el 89 por ciento de las personas con Parkinson experimentan trastornos del habla o la voz: «Hace que tener una conversación normal, no solo cantar, sea muy difícil».

Otros ejemplos

Haya varios precedentes de contantes que han sido diagnosticados con Parkison. La cantante Linda Ronstadt hizo su último show en 2009, pero no fue sino hasta 2013 cuando desveló que le habían diagnosticado esta enfermedad. Se había retirado antes de saber que sufría de Parkinson. «Oh, sí. Solo estaba gritando», reconocía en una entrevista con «CBS This Morning» el año pasado. «En lugar de cantar, solo estaba gritando. No quería cobrarle a la gente por eso».

Uno de los casos más conocidos es el del cantante y compositor Neil Diamond, que cuando anunció su diagnóstico de Parkinson hace dos años, inmediatamente dejó de girar.