El vocalista de Mayhem recuerda la historia de como Varg Vikernes pudo matar a Euronymous en su treinta aniversario.

Hace tres décadas, la escena del black metal se sacudió con la noticia del asesinato de Øystein «Euronymous» Aarseth, la mente maestra detrás de la influyente banda noruega de black metal Mayhem. El trágico suceso ocurrió a manos de Kristian «Varg» Vikernes, conocido en el mundo del metal como Count Grishnackh y parte de la banda Burzum. Pese a colaborar en el álbum «De Mysteriis Dom Sathanas«, Vikernes y Euronymous habían experimentado un distanciamiento que culminó de la forma más trágica posible cuando Varg decidió matar a Euronymous.

En un diálogo reciente con Blabbermouth.net, Attila Csihar, quien fuera el vocalista de Mayhem durante ese período, habló sobre sus experiencias personales y profesionales con Euronymous, así como las circunstancias que rodearon su asesinato.

«Es una locura que haya pasado ya 30 años«, dijo Csihar en la entrevista. «La verdad es que estuve en Noruega apenas dos semanas. Vivía en la casa de Euronymous. Éramos amigos. Fue Euronymous quien me contactó e invitó a cantar para Mayhem. Conversamos sobre lo que deberíamos hacer, el futuro y también sobre las ideologías y la dirección de la música. Euronymous tenía muchas ideas; por ejemplo, me sorprendió mucho su colección de discos de Tangerine Dream. Ambos disfrutábamos de la música electrónica, al igual que Varg».

Una rivalidad creciente entre Varg y Euronymous

«Euronymous estaba muy interesado en que yo cantara en el disco de Mayhem», continuó Attila. «Pero su otro interés era lanzar mi banda de culto Tormentor. Pensaba que era importante lanzarlo ya que no podíamos hacerlo en la Hungría comunista. Le llevé la grabación maestra y el DAT. Entonces Varg se mostró súper interesado. No sé si ya existía alguna competencia entre ellos, pero él dijo, ‘Quiero Plasma Pool, amigo. Necesitas lanzarlo conmigo’. Yo estaba como, ‘Claro’. Estaba muy feliz de que mi material fuera editado. Estamos hablando de principios de los 90 cuando lanzar algo era importante. No había CDs. Bueno, aparecieron un par de años antes de todo esto. Era difícil conseguir un buen contrato o que algo se lanzara al mercado».

«Hablé con Varg y Euronymous. Te diré algo: Hablaban un poco en contra del otro cuando hablaban conmigo. Varg decía, ‘¿No te parece que el otro tipo es un poco extraño?’ Hice una broma sobre el otro tipo. Luego nos reímos. Al mismo tiempo, Euronymous decía, ‘¿No te parece que él es raro?’ Entonces hice otra broma» explica Attila entre risas. «Al final, pensé, ‘Chicos, no soy un sacerdote. Tal vez deberíais hablar entre vosotros’.

«No parecía tan malo. Había un poco de tensión, pero pensé que era normal. Venía de años atrás. El vocalista anterior de Mayhem, Dead, se suicidó. Todo el follón de los incendios de iglesias… Era una época diferente. Jodieron a grupos cristianos y, a cambio, jodieron la tienda de Euronymous, así que estaba llena de toda esta porquería de Jesús. Era otra época. Pusieron todo su esfuerzo; Euronymous pidió dinero prestado a su padre para pagar el estudio, Grieghallen, que era caro. Me asombró. Pero lo que pasó entre Euronymous y Varg… nunca pensé que llegaría tan lejos».

Nadie coge el teléfono

Csihar habló también  sobre el período después de la finalización de «De Mysteriis Dom Sathanas» y su incapacidad para ponerse en contacto con sus compañeros de banda de Mayhem durante el verano de 1993. «Siempre hablaba con Euronymous», dijo. «De repente, llegó el verano. Tenía el contacto de Euronymous, el guitarrista de Mayhem Blackthorn Snorre Ruch y Varg. El único teléfono que no tenía era el del baterista de Mayhem Jan Axel Blomberg. Hablaba de vez en cuando con Euronymous».

«De repente, no pude contactarlos. Estaba como, ‘Bueno, ya llamarán’. Me di cuenta de que no podía contactar a nadie, pero todavía era verano. Pensé que estaba bien, tal vez volverían en septiembre y veríamos qué pasaría. Ya era octubre fuecuando dije, ‘¿Qué demonios está pasando?’ No estaba demasiado nervioso. Pensé, ‘El álbum tiene que salir’.

«Era extraño que no habláramos. Luego un amigo mío vino a mi casa en Hungría. Dijo, ‘¿Tocaste en Mayhem?’ Dije, ‘Sí’. Dijo, ‘Acabo de leer las noticias en esta revista de metal de Hungría. Hay una noticia muy pequeña de que el bajista mató al guitarrista’. Yo dije algo así como, ‘Lo entendiste mal. No es el bajista. Fue el vocalista quien se suicidó’. Luego mi amigo dijo, ‘No sé. Esto es lo que leí’. No tenía la revista. Pensaba, ‘Vaya mierda. ¿Qué es esta tontería?’ Bajé y compré la revista. Cuando lo leí, no podía creer lo que veían mis ojos. Como, ‘¿Qué?’ Luego empecé a pensar, ‘Mierda. Tal vez por eso no tengo noticias de nadie» dijo entre risas.

Vikernes fue juzgado y condenado en 1994 a 21 años de prisión, la pena máxima en Noruega, tanto por el asesinato como por incendios premeditados en tres iglesias. Obtendría su libertad en 2009, tras 16 años tras las rejas.

Hace unos años, Jørn «Necrobutcher» Stubberud, bajista de Mayhem, causó revuelo al confesar que él mismo había considerado quitarle la vida a Euronymous antes de que Vikernes lo hiciera. «La policía estaba al tanto del plan de Vikernes para asesinar a Euronymous, y tengo una teoría de por qué permitieron que ocurriera», añadió Necrobutcher.

El próximo álbum en vivo de Mayhem, «Daemonic Rites», se lanzara el 15 de septiembre bajo el sello de Century Media Records.

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