SAXON (8/10)
SAXON (8/10)
Existen pocas bandas hoy en día capaces de levantar el ánimo
metálico en cualquier evento, y SAXON son una de esas instituciones tan
olvidadas como emblemáticas en el panorama actual. Es cierto, que estos
británicos son una de los grupos más habituales en cualquier evento
relacionado mínimamente con el heavy metal.
No obstante, una actuación de SAXON es siempre un sinónimo de
efectividad, tanto a nivel escénico como en lo que se refiere al glamour
que desprenden tales leyendas de la elogiada NWOBHM. Una efusiva "Heavy
metal thunder" servía de introducción a la linealidad que
transmitirían los británicos en su actuación, abogando
por lo conocido, pero insistiendo en el hecho de que la veteranía es
un grado demasiado importante. Biff Byford aparecía en escena con su
inmortal gabardina, de la cual se desprendería instantes después
con una atronadora "Dogs of war", uno de sus minoritarios temas de
los 90 que han tomado el calificativo de clásico. Ahora bien, no todo
podía ser tan bonito en una actuación de SAXON y, así fue,
como en el epicentro de ·"Dragon´s lair" el hasta ese momento muy
reseñable sonido falleció repentinamente cortando la canción
en su epicentro. Dicho sonido pareció recuperarse tímidamente
y, aunque la guitarra de Paul Quinn gozara de muchos inconvenientes, "Solid
ball of rock" consiguió recuperar el ánimo de un respetable
plenamente ochentero y veterano. Demás arrolladores himnos como "Motorcycle
man" y "Denim and leather" siguen despuntando habiendo transcurrido
ya más de 20 años desde su composición y, es que, hoy por
hoy, SAXON son una de las pocas bandas emblemáticas que se resisten a
arrastrarse por el escenario y, todavía, logran editar discos meritorios.
Temas de su último época como la hispánica "Conquistador",
donde previsiblemente tuvo lugar el discreto solo de batería de Fritz
Randow, y demás cortes más longevos como "Strong arm of the
law" y una siempre impresionante "Princess of the night" lograban
convivir con aparente naturalidad.
Obviamente, hoy por hoy, SAXON no son ningún fenómeno de masas
y su actuación sirvió de poco más que de preludio para
la aparición de sus compatriotas IRON MAIDEN. La fenomenal "Crusader"
y la inolvidable "Wheels of steel" cerraron un set list muy corto
y también muy discutible para cualquier fan del grupo.
Qué se le va a hacer, dicen que lo bueno y breve dos veces bueno, así
que…
Texto : Manu Estrada
Fotos : Sergi Ramos
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