La Sala Bóveda de Barcelona cancela su programación de música en directo por orden administrativa. Conoce los detalles de esta decisión.

La noticia corrió como la pólvora a lo largo de la mañana de ayer martes: la emblemática Sala Bóveda de Barcelona, un referente en la música en directo durante más de tres décadas, se ha visto obligada a cancelar su programación de conciertos de forma inmediata y se juega un cierre total. Este duro golpe llega tras una orden administrativa derivada de conflictos con un vecino, y pone en peligro no solo la continuidad de la sala, sino también el tejido cultural y económico que la rodea en un momento especialmente delicado para la música en directo en salas de pequeño aforo.

Conflictos con un vecino

La noticia, confirmada a través de un comunicado oficial de la propia sala, ha generado consternación en la comunidad musical. La sala, que actualmente tenía 78 conciertos programados en los próximos meses, ha destacado que esta medida afecta tanto a los trabajadores de la sala como a músicos y promotores, quienes tendrán grandes dificultades para reubicar los eventos en otras fechas o espacios. Barcelona no es precisamente el lugar con más espacios destinados a los conciertos de pequeño aforo.

“El impacto económico y moral es enorme para todos los involucrados”, señala el comunicado. Desde Bóveda, también han querido agradecer el apoyo recibido por parte de músicos, promotores y asociaciones que defienden la cultura musical y un ocio nocturno justo.

Redshark actuando en sala Bóveda (Foto: Javier Puntas)

Más de 30 años de actividad

El cierre responde, según explica la sala, a las quejas de un vecino que llegó durante la pandemia y ha dificultado la convivencia desde su llegada. “En los más de 30 años que llevamos abiertos, primero como Mephisto y después como Bóveda, nunca habíamos tenido problemas con los vecinos”, aseguran desde la sala.

La Asociación de Salas de Conciertos de Cataluña (ASACC) emitirá en breve un comunicado técnico explicando más detalles sobre esta problemática y el impacto que puede tener en el sector cultural.

Evitar el cierre total

Aunque la prioridad actual de la Sala Bóveda es intentar salvar la continuidad de su sesión de noche,  el futuro del espacio se encuentra en una situación crítica con el cierre absoluto previsto para el próximo martes 26 de noviembre. La incertidumbre no solo afecta a los trabajadores, sino también al público y a la escena musical que ha tenido en Bóveda uno de sus pilares fundamentales en Barcelona.

 

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