El cantante de la banda estadounidense fue acusado de homicidio involuntario por la muerte de un fan días después de un concierto en Praga.

Como muchos fans de Lamb Of God recuerdan, el vocalista de banda, Randy Blythe, estuvo en la cárcel de la República Checa a la espera de que se le juzgase por la muerte de un fan que falleció días después de caerse del escenario durante un show del grupo en Praga. En una nueva entrevista, Blythe reconoce que fueron los peores días de su vida.

El arresto de Randy Blythe

Randy Blythe de Lamb Of God se abre en cuerpo y alma en una nueva entrevista con el medio The New York Hardcore Chronicles. El frontman de la banda estadounidense reflexionó sobre su terrible experiencia en una prisión de la República Checa y su posterior absolución después de ser acusado de causar la muerte de un fan al empujarlo fuera del escenario.

«Hubo un concierto que hicimos en Praga en 2010 y un joven resultó herido. O saltó o fue empujado desde el escenario, se golpeó la cabeza y murió un mes después», rememora el vocalista de la banda. «Fue un show de locos, y la seguridad no estaba haciendo su trabajo. Pero no sabíamos nada al respecto, mi banda no lo sabía. Así que volvimos a aparecer dos años después, llegamos al aeropuerto de Praga, y estaba emocionado al poder ir a tomar algunas fotos. Era un día libre y había como siete personas allí. Pensamos que estaban allí para atrapar a un terrorista, ya que estaban con ametralladoras y toda esa mierda. Y me entregan un trozo de papel diciendo que me acusan de homicidio involuntario. Nos quedamos con cara de ‘¿Qué mierda?’ No teníamos ni idea de que alguien hubiera resultado herido en ese concierto».

Más de un mes en prisión

«Así que fui a una cárcel de la República Checa durante 37 días, una prisión en Praga llamada Pankrác. Tenía como 123 años en ese momento. Era como estar en una canción de Misfits, básicamente», sigue contando Blythe. «Luego salí bajo fianza y estuve fuera unos ocho meses creo, luego regresé para el juicio y fui declarado inocente».

El vocalista lo explica de una forma resumida pero reconoce que «fue un momento realmente triste, y es muy trágico que este joven muriera. Pero me sentí obligado a regresar y enfrentarme a un juicio, porque su familia nunca me atacó en la prensa, solo querían saber qué le sucedió a su hijo y no puedo culparlos».