Un nuevo estudio tira por alto todos los clásicos que afirmaban que era música de personas con tendencias agresivas y suicidas. Por una vez no salimos injustamente mal parados....

“Lo que está claro es que las apariencias engañan”. Así finaliza un artículo de Marisa Fernández, Neuropsicóloga Senior, publicado en la edición digital de la revista Muy Interesante, en el que se describe un nuevo estudio realizado por la Universidad de Warwick. En dicho estudio se ha comprobado una relación directa entre las preferencias musicales de rock y heavy metal, y la inteligencia.

En el trabajo presentado en la 18th Annual Conference of the Association for Psychological Science en Nueva York, tras preguntar a más de mil estudiantes con altas capacidades intelectuales, descubrieron en este estudio que el rock y el heavy metal era el estilo musical preferido por estos chavales de entre 11 y 18 años. Estos estudiantes comentaban que escuchaban esta música para alcanzar una catarsis, como una forma de superar sus emociones negativas y afrontar la presión académica a la que estaban sometidos.

Las personas que preferían la música alternativa, el rock y el heavy metal obtuvieron puntuaciones más altas en una medida objetiva de inteligencia. Su capacidad de abstracción era mejor, y los autores de este estudio lo asemejan a la mayor frecuencia de metáforas y lenguaje abstracto que existe en las canciones propias de este estilo, al que están expuestos de forma constante sus seguidores.

Según este estudio, la personalidad de las personas que eligen este tipo de música viene marcada por rasgos como estar abierto a experiencias nuevas, disfrutar con el riesgo y ser físicamente activo.

Por otro lado, no encontraron relación con el neuroticismo, como cabía esperar según los estereotipos que asocian este estilo musical con las emociones negativas. Amen, de los tradicionales estudios que asocian a los seguidores de este estilo musical con caracteres suicidas y agresivos.