Un departamento de policía emite una orden de arresto contra Brian Warner por dos cargos de delito menor de agresión sobre un cámara en un concierto en 2019.

Se le siguen acumulando los problemas judiciales a Marilyn Manson. Además de las diversas demandas presentadas por varias mujeres que acusan al artista estadounidense de agresión sexual o violación entre otros cargos, se ha dado a conocer que un departamento de policía tienen una orden de arresto para Brian Warner (nombre real de Marilyn Manson) por un par de delitos menores.

Orden de arresto para Marilyn Manson

Un departamento de policía de New Hampshire tiene una orden de arresto activa para Marilyn Manson. El pasado martes 25 de mayo, el Departamento de Policía de Gilford anunció que tienen una orden de arresto activa para Brian Warner por dos cargos de delito menor de agresión sobre un cámara en el Bank of New Hampshire Pavilion.

«El señor Warner, su agente y asesor legal han estado al tanto de la orden desde hace algún tiempo y no ha hecho ningún esfuerzo por regresar a New Hampshire para responder a los cargos pendientes», se lee en el comunicado publicado por el citado departamento de policía. «El señor Warner estaba realizando un concierto en el Bank of NH Pavilion el 18 de agosto de 2019, cuando ocurrieron las supuestas agresiones».

Se matiza en el comunicado que estas presuntas agresiones no son de naturaleza sexual. Marilyn Manson actuó en Gilford, New Hampshire, el 18 de agosto de 2019 como parte de la gira «Hell Never Dies» junto Rob Zombie. Si es declarado culpable de los cargos, Manson podría enfrentar a una sentencia de cárcel de hasta un año y una multa de hasta 2.000 dólares.

Defensa de su abogado

Los abogados de Marilyn Manson no se mantienen ajenos a esta orden de arresto, y recuerdan que «esta acusación de delito menor fue perseguida después de que recibimos una demanda de un cámara del recinto por más de 35.000 dólares porque una pequeña cantidad de saliva entró en contacto con su brazo. Después de que solicitamos evidencia de cualquier presunto daño, nunca recibimos una respuesta. Todo este reclamo es ridículo, pero seguimos comprometidos a cooperar con autoridades, como lo hemos hecho en todo momento».

Este comunicado de defensa entra en contradicción con las declaraciones a la revista People de al menos tres asistentes al concierto, incluido un guarda de seguridad, en las que aseguraban que escupió a propósito a su cámara.