La participación de Jon Schaffer en el asalto al Capitolio el pasado mes de enero le está saliendo muy cara. El músico acaba de ser demandado por su participación.

Jon Schaffer tuvo una participación activa en el asalto al Capitolio, lo cual no pasó precisamente desapercibido ni para las autoridades ni para los relacionados con su carrera artística. Las consecuencias no se hicieron esperar. Se ha visto obligado a declararse culpable de 2 de los 6 delitos que se le implicaban y está colaborando con las autoridades. Además, en Oath Keepers tomaron distancia de Schaffer tras el ataque, así como sus compañeros de Iced Earth, con un comunicado donde muestran su retirada del proyecto. Hansi Kürsch también se retiró de su otra banda, Demons & Wizards, así como el sello Century Media, que trabajaba con ambas bandas de Schaffer.

Demanda contra los asaltantes

El guitarrista de Iced Earth, Jon Schaffer, fue uno de los participantes de Oath Keepers y Proud Boys, que están demandados por Karl Racine, del Distrito de Columbia, en un intento por recuperar los millones de dólares perdidos en la defensa del Capitolio durante el ataque del pasado 6 de enero. De acuerdo con la CNN, la demanda se presentó el pasado martes en las cortes de Whasington, en la que se acusa a 31 miembros de grupos extremistas de “conspiración para aterrorizar el Distrito”, y llaman a sus actos del 6 de enero “un coordinado acto de terrorismo doméstico”. Casi un año después del ataque al Capitolio, todavía se desconoce cómo finalizará la situación para sus participantes.

De acuerdo con Racine, la demanda se realiza para “proteger contra vigilantes e insurrectos”. Según Racine, los daños son sustanciales, tal y como confirmó a The Washington Post, por lo que “si esos individuos y entidades van a bancarrota, que así sea”. La queja se compone de 84 páginas, y describe a Schaffer como “un fundador y miembro de siempre de Oath Keepers. Schaffer está siendo acusado criminalmente por su participación en el ataque del 6 de enero”. A pesar de la colaboración de Jon Schaffer con las autoridades como parte de su pena a cumplir, su participación en el ataque al Capitolio puede acarrearle muchas consecuencias todavía desconocidas.

Dos delitos graves

A Jon Schaffer se le acusa de dos delitos graves, y su participación no va a solucionarlo, pero puede impedir que empeore. Racine continúa de la siguiente forma: “En conexión con la promesa de cooperar con las investigaciones y potencialmente testificar en el caso criminal relacionado con la conspiración en el ataque, Schaffer se declaró culpable en la acción criminal de la que fue acusado, que incluye dos delitos graves: traspaso del Capitolio armado con armas peligrosas y obstrucción a la autoridad”. Fue en abril cuando Jon comenzó el acuerdo de cooperación con el gobierno para facilitar su proceso.

Racine afirma que estos atacantes van “en contra de las libertades del país, una insurrección”. Schaffer fue inicialmente inculpado de seis crímenes, en los que se incluía un acto de violencia física contra un agente. Él se declaró culpable de dos cargos: obstrucción a la autoridad del Congreso y traspaso a zonas restringidas del Capitolio cargado con un arma peligrosa. Los dos suman penas de prisión de 30 años. El acuerdo de cooperación mejoró sus condiciones y le ofrecieron formar parte del programa de protección de testigos.