El Evening Times ha publicado una crónica del show de IRON
MAIDEN en Glasgow el pasado Lunes, explicando que el sistema de sonido no pudo
soportarlo más y dejo de funcionar en un momento del concierto.

La audiencia estaba tan empeñada en estar lo mas cerca posible
de sus héroes que Bruce Dickinson tuvo que parar el concierto para frenar un
inicio de aplastamiento que se estaba produciendo en las primeras filas. Dickinson
pidió al público que diera dos pasos atrás para que la gente que había caido
pudiera levantarse de nuevo.

“Queremos que la gente salga hoy de aquí contenta – no queremos
sacarlos en bolsas térmicas” advirtió. El concierto casi llegó a su fin prematuro
cuando después de la intro de “Paschendale” , con todas sus bombas y sonidos,
el sonido se cortó. Por fortuna, poco después se recuperó y el concierto siguió
adelante.