Los años no pasan en vano para nadie, y quizás haber cumplido 75 años y empezar a ser consciente de que no eres inmortal y que una caída "tonta" puede arruinar gravemente tu salud e incluso tu carrera hayan sido la clave para que La Iguana del rock empiece a recular con respecto a algunas de sus actividades habituales en directo.

El mítico músico y rockero de 75 años Iggy Pop se hizo famoso hace más de 50 años gracias a su tiempo como líder y vocalista de The Stooges y por su actitud en los escenarios. El artista fue un pionero e icónico dentro del punk ya entrando en la década de los ’70, época en la que comenzó a dar shows en los que saltaba al público y se hacía heridas y lesiones frecuentemente asaltado por la locura.

Aunque en el ambiente tengamos -10ºC o 40ºC, el ya casi anciano Iggy sigue con sus costumbres de salir sin camiseta ante la audiencia y corretear de un lado para otro en sus conciertos arrastrando una de sus piernas debido a las secuelas de haber padecido la polio cuando era un niño. Pero todo esto parece que terminará de una vez por todas -si cumple sus palabras-: plantarse cara al público y tirarse por encima de éste ya tiene un fin claro y obvio.

Una tradición que estaba perjudicando su salud

Iggy Pop estuvo charlando recientemente con Billboard y confesó que ya no se encontraba en condiciones para hacer ciertas payasadas, principalmente porque había tenido algunas caídas y percances que le empezaban a pasar factura y desgastar más de la cuenta. «Ya no lo estoy haciendo. He llegado a mi límite. […] Me haría daño, así que ahora prefiero quedarme en el escenario. Hoy en día la gente ya hace estas cosas ella sola: saltan, se tiran del escenario, bailan… Y eso me mola».

El legendario cantante ya habló hace más de una década sobre su intención de dejar de lanzarse al público (acto conocido también por su connotación inglesa «crowd surfing») para no lastimarse, ya que en una de sus presentaciones de 2010 sufrió heridas y moretones bastante importantes cuando lo hizo y ninguno de los asistentes lo agarró. Aunque hasta junio de 2022 siguió con estas costumbres de forma más moderada, parece que la salud ya empieza a pesar más que la diversión y locura para el viejo Iggy.