En una reciente entrevista, la vocalista germana desvela las veces que ciertas personas y discográficas han querido cambiar su imagen.

La cantante alemana Doro Pesch puede presumir de tener una carrera musical acorde a su personalidad. A lo largo de las décadas no se ha dejado aconsejar por ciertas decisiones que dejarían el heavy metal que tanto amo en un segundo plano.

Doro Pesch es fiel a sus principios

No se puede negar que Doro Pesch siempre ha mantenido su atractivo físico natural de forma discreta. En una reciente entrevista con el podcast «Aftershocks», habla sobre su decisión de nunca hacer alarde de ello como lo han hecho muchas de sus compañeras de profesión en el transcurso de las últimas cuatro décadas.

«Siempre seguí mi corazón», declara la vocalista alemana de 56 años. «Siempre hice lo que sentí que estaba bien. Y nunca pensé que soy demasiado sexy. Me gusta lo natural, me gusta el heavy como un atractivo sexual más natural. Me gusta el cuero negro, que ahora ya no es cuero real porque me encantan los animales, así que todo es cuero falso, pero se ve bien. Y de hecho, un par de veces, tuve que luchar para quedarme con la apariencia que yo quiero».

Recuerda en esta entrevista que en su primera visita a Estados Unidos, la compañía discográfica le sugirió que tenía que mostrarse más sexy con el fin de llegar al mainstream y ser más comercial. «No deberías ser tan heavy; no deberías ser tan metal», rememora la Metal Queen.» No, no. Para mí, el metal era la libertad de hacer lo que sientes y ser tú mismo».

«Una vez a través de una agencia, hace años y cuando era más joven, Playboy llamó y me dijeron que querían hacer una buena sesión de fotos», revelaba Doro. «E inmediatamente dije que no. Todos se quedaron boquiabiertos porque pensaron que probablemente era mucho dinero y esas cosas, y todos siempre querían obtener su parte. Pero dije que no, nunca quería hacer eso. Otras personas lo hacen mucho mejor, y eso es genial, pero yo no soy ese tipo. Amo a los fans, amo el metal, amo la música y amo las cosas más reales».

A lo largo de la entrevista Doro pone más ejemplos de las veces que otras personas han tratado de cambiar su imagen. Cuando publicó ‘Love Me In Black’ en 1998 le sugirieron que se tiñera el pelo de negro para que el mercado percibiera que era algo nuevo. Ante su negativa, «este disco nunca vio la luz en los Estados Unidos, y estaba muy triste por ello, pero los fans más acérrimos lo consiguieron a través de importaciones caras».

«Pero, sí, a veces tienes que decidir lo que quieres hacer, pero también tienes que asumir las consecuencias. Y eso está bien», reflexiona la artista germana. «Así siempre siempre puedo decir que amo a los fans y nunca haría algo para poner en peligro esa gran y profunda conexión».