La relación musical entre el black metal y el country es inexistente. Pero un artita ha encontrado un nexo en común que ha reflejado en su último videoclip.

Cómo unir dos mundos opuestos

La mezclas de estilos dentro del rock y el metal es algo normal. Que si flamenco con heavy metal, que si rock con música clásica… Hay de todo y para todos. Pero a muy pocos se les ha ocurrido interpretar una canción de un estilo con una indumentaria de otro estilo que poco o nada tiene que ver. Eso es lo que ha creado el artista country Jason Hawk Harris. Para el vídeo clip de la canción «Cussing at the Sun», le cedió el protagonismo a unos jóvenes pintados al estilo de black metal, que vagan por las calles totalmente borrachos y maldicen al Sol. Muy a su pesar, se encuentran muy lejos del deseado frío nórdico.

 

Los fans de ambos estilos tienen un punto en común

Musicalmente el country y el black metal tienen la misma relación que el tocino y la velocidad. Pero Jason Hawk Harris encontró una actividad que los seguidores de ambos estilos tienen en común: emborracharse.

«Siempre me han gustado las yuxtaposiciones extrañas», reconocía Harris en una entrevista para Rolling Stone. «El director del video, Stanley Sievers, vino y me dijo: ‘Tengo esta extraña idea de que, ya que es una canción de country, ¿por qué no hacemos que los actores se vistan con Corpse-paint?’ Inmediatamente me di cuenta que quería hacerlo».

El joven músico de country agrega: «Cuando bebo en exceso porque estoy triste, y lo he hecho bastante, siempre hago chistes. Siempre hay un momento de autocrítica. La embriaguez termina dándote a entender que estás siendo un poco ridículo».