Los problemas derivados de la meteorología han generado que gente como Sergio y Naiara hayan tenido que dar media vuelta y perderse una edición de Wacken que habían preparado con tiempo.

Naiara y Sergio tenían previsto pasar estos días en Wacken Open Air 2023, una edición cuyo protagonista principal es Iron Maiden secundado por otros artistas de la talla de Doro o Heaven Shall Burn entre muchísimos más presentes en su cartel. Pero no, finalmente, la mala suerte se ha cebado con ellos y así es como lo han vivido.

Frustración por Wacken 2023

La organización pidió a la gente que se dirigiera en su propio vehículo hasta Wacken que parara su viaje o que ni siquiera lo empezara, y desgraciadamente, en el caso de estos dos aficionados ya estaba en marcha. «Nosotros habíamos iniciado el viaje la semana anterior, ya que estuvimos alojados en casa de una amiga nuestra en Hamburgo desde el 27 de julio.

Teníamos pensado iniciar el viaje a Wacken el martes 1 de agosto (hay una hora de viaje en coche) y no llegamos a salir de Hamburgo. Si hubiéramos ido desde Bilbao hasta Wacken directamente, sí que nos hubiera tocado darnos la vuelta y acampar en la periferia», explican sobre sus planes que, definitivamente, se han visto truncados.

Además de esta información que ofreció Wacken Open Air a través de sus redes sociales, app oficial y web, la organización no se ha comunicado de otro modo con los compradores de las entradas como revelan Sergio y Naiara, simplemente a través de esos canales.

La sensación que han tenido tras esto es de «frustración y enfado» como indican, y es que con la coyuntura existente confiesan que «inicialmente pensábamos que la organización iba a ofrecer la manera de acudir vía transporte público o que iba a ofrecer medios adicionales para poder desplazarnos con todo nuestro equipamiento de camping. Pero estaban desbordados. Mucha gente buscó la manera de acudir a pesar de las restricciones y nosotros decidimos esperar y ver qué decidían… por ello nos hemos quedado fuera.

[…] Creemos que, evidentemente, el factor meteorológico no es culpa de la organización ya que ha sido una tempestad de agua muy importante. Aunque después de semanas lloviendo, mientras empezaban a montar el festival, les ha faltado quizá  algún medio extra para que no se les fuera de las manos desde el primer día ya que los problemas se vieron agravados desde el lunes al mediodía -cuando el acceso al camping comenzaba el mismo lunes a las 10:00h de la mañana-.

Entendemos que la cancelación total era inviable para ellos por motivos económicos. Aunque creemos que hubiera sido lo más justo para todos los que hemos pagado la entrada. Tenemos la sensación de que los primeros en viajar (que han estado varados en las autopistas durante muchas horas) y la gente que ha buscado la manera de acercarse al festival por otros medios han sido los «privilegiados» que han conseguido entrar finalmente.

Sin embargo, mucha otra gente como nosotros, que hemos seguido las indicaciones y recomendaciones de la organización, nos hemos quedado fuera. No les culpamos directamente, pero sí pensamos que estaban tan implicados intentando ayudar a todos los que se estaban quedando varados, que se les fue de las manos el mantener informados al resto que teníamos una planificación más concreta y determinada».

Otra vez será, o no…

Una vez la dirección explicó que no se podría acoger a más gente que fuera en su propio vehículo y que no podría entrar a la zona del festival nadie que no tuviera ya colocada su pulsera, con este viaje truncado, Sergio y Naiara recibirán el importe de su entrada (al igual que el resto de afectados por lo sucedido este W:O:A 2023), y ante un posible descuento por estas molestias en una próxima edición o similar, ambos señalan que «estaría bien algún detalle compensatorio».

No obstante, añaden también que «si ello va a consistir en algún descuento o ventaja para comprar una entrada para el año que viene, entiendo que habrá mucha gente que ya no esté interesada en volver». Sea como sea, desde aquí mandamos nuestro ánimo tanto a Naiara y Sergio como al resto de personas que, desgraciadamente, no podrán disfrutar de esta edición del festival de heavy metal más emblemático del mundo.