Kevin Eck ha pagado la friolera de 1000 dólares americanos por lo que ya se conoce como el ticket “Kiss Platinum Package”. El ticket en cuestión da derecho a ocupar asiento entre las cinco primeras filas de un concierto de KISS, además de conocer al grupo y poder sacarse fotos con ellos. Una camiseta de la banda, un libro autografiado, unas cuantas púas y un cupón de 50 dólares para gastar en merchandising del grupo por Internet son otros de los incentivos que complementan tan ruin estrategia.