Llevan desde el 2001 en marcha y han firmado algunos de los mejores discos de fuzz-stoner-rock de los últimos años, pero el etiquetaje se está quedando muy pequeño para la dimensión que está tomando la música de la banda, cada vez más metalera y con desarrollos incluso progresivos.

Llevan desde el 2001 en marcha y han firmado algunos de los mejores discos de fuzz-stoner-rock de los últimos años, pero el etiquetaje se está quedando muy pequeño para la dimensión que está tomando la música de la banda, cada vez más metalera y con desarrollos incluso progresivos. Tampoco es que fuesen nunca una banda común: se dieron a conocer a gran escala con el documental «Truckfighters: The Movie» que grabó Joerg Steineck en 2011. Hoy en día, sobreviven como soldados de fortuna y vienen de gira por España en noviembre. Si usted se los encuentra, quizá podría verlos en directo. Y sino, su último trabajo «V» llega a las tiendas el 30 de septiembre. En ambos casos, no le dejarán indiferente.

Sergi Ramos habla con Oskar «Ozo» Cedermalm por teléfono en una larga tarde de julio.

¿Te sorprende que Truckfighters estén recibiendo tanta atención del público más metalero?

«Creo que tenemos muchas influencias del metal y no nos consideramos estrictamente una banda de stoner rock o de fuzz rock. Pienso que tenemos unas raíces muy fuertes en el heavy metal pero tocamos con un pedal de fuzz y eso es lo que hace ser stoner/fuzz. Pero tenemos muchos elementos y queremos llegar a mucha gente, no solo a los seguidores de un genero concreto más minoritario.»

¿Ves que la gente está más abierta a géneros como el de Truckfighters? Especialmente después del auge de bandas más experimentales como Mastodon o Red Fang?

«Muchos de los seguidores del heavy metal más clásico han aupado recientemente a grupos con sonidos más oscuros y fuzzy como los que mencionas. El metal tradicional de la vieja escuela es algo de lo que la gente está cansada. Quieren nuevas bandas y nuevos géneros que explorar».

Las cosas se están volviendo más progresivas en cada disco, algo que especialmente latente en «V». ¿Os preocupa vuestra evolución como banda? ¿No queréis estancaros?

«Como banda, no queremos estar sobre la misma pierna todo el rato. No queremos repetir el mismo disco y las mismas canciones en bucle. Creo que implementar elementos progresivos en nuestra música nos refuerza positivamente, mucho más que volver a hacer otro tema fuzz rock de tres minutos. Es una evolución natural y creo que es lo mejor para el futuro de la banda. ¿Quien sabe? Quizá en cinco años estamos cansados de eso y volvemos a hacer temas fuzz de tres minutos. Mientras nos divierta y nos motive, lo veo bien».

La película, «Truckfighters», os hizo llegar a un público distinto al habitual, gente que quizá nunca os había escuchado ni se había interesado pero que descubrió a la banda a través del documental sobre vuestra vida en la carretera. Cinco años después ¿fue inteligente hacer una película como esa tan al principio de la historia de la banda? ¿Ha repercutido positivamente en el grupo?

«No lo se seguro. Nosotros hacemos lo que hacemos y es genial que haya más gente escuchándonos y que más gente nos conozca. Pero al final, la esencial de la banda es hacer canciones que nos gusten y que quizá también le gusten a la gente. No tenemos planes específicos, no tenemos una gran idea detrás. Hacemos esto porque nos gusta y porque por el camino conocemos a gente a la que también le gusta».

«La película no fue nuestra idea, sino que fue idea de Joerg Steineck. Inicialmente nos iban a hacer una entrevista para un documental sobre la escena fuzz y todo eso pero al final vinieron y grabaron uno de nuestros shows completos. Tras eso nos dijeron que querían hacer una película entera sobre nosotros. Estuvimos de acuerdo y ellos vinieron a Suecia a filmar más shows, entrevistarnos y todo eso. Cuando nos quisimos dar cuenta habían completado una película. PEro todo fue cosa de Joerg, nosotros simplemente pasábamos por ahí».

truckfightes

¿Crees que la película contribuye a desmontar esa idea del estilo de vida del rock como algo glamouroso? ¿Es la vida del rock lo que tu esperabas cuando te metiste en todo esto?

«Es mucho más trabajoso de lo que la gente ve o imagina, por supuesto. Pasas cientos de horas en el estudio y en la carretera pero la gente solo te ve una hora sobre el escenario e interpreta que tu vida es fantástica y que eres un elegido. No es nada glamouroso estar de gira. Hay mucho trabajo tras ello y nos gusta lo que hacemos. No nos metimos en esto para ser estrellas, sino para tocar en directo y componer canciones. El glamour no nos importa en absoluto».

El desierto californiano y Suecia están a cierta distancia. ¿De donde sacas la inspiración para las canciones de Truckfighters?

«Mucha inspiración la recibo por parte de la naturaleza. Personalmente me gusta mucho estar en la naturaleza y en invierno suelo hacer mucho snowboarding. Somos un país pequeño pero tampoco tenemos demasiada población así que puedes encontrar montones de espacios en Suecia donde perderte en medio de la naturaleza. No me inspiro demasiado con otras bandas, sino con la propia vida».

¿Te pierdes por el bosque para componer o todo el proceso de composición sucede en el local de Truckfighters?

«No, yo y Dango nos ponemos de acuerdo en ciertas fechas para quedar y componer. Son días para crear, sin más. No cojo una guitarra y me pierdo en el bosque. Si me voy al bosque, dejo la guitarra en casa y me relajo».

Los temas del disco, en general, son muy potentes. ¿Tenéis planes para tocar «V» íntegramente en los directos?

«Por primera vez me siento así, siento que quiero que toquemos todas las canciones. En casos anteriores siempre hemos tocado tres o cuatro canciones de las nuevas pero ahora me siento muy confiado con este disco y realmente me apetece tocarlas todas. Es difícil escoger, así que las ensayaremos todas para poder tocarlas.»

¿Tenéis ganas de que llegue vuestra gira española? ¿Que tal han sido vuestras experiencias hasta la fecha en nuestro país?

«Claro que tenemos muchas ganas de llegar a España y tocar las nuevas canciones allí. Han pasado ya tres años desde la última vez que estuvimos y disfrutamos mucho. Los españoles siempre están un poco fuera de si en los conciertos y eso nos hace disfrutar más desde el escenario».