Subimos a una montaña rusa emocional con Katatonia
¿Puede ser lo triste y lo doloroso, bello? Artísticamente sí. Y en según qué estilos musicales, estos momentos superan con creces a los golpes de luz y optimismo. KATATONIA son una banda que consigue sumergirnos en espectros oscuros, pero a la vez nos atrapa por sus pasajes melancólicos. Prácticamente han pasado cuatro años desde que pusieran a la venta “Dead End Kings”, y ya estábamos echando en falta esa brisa nórdica.
¿Puede ser lo triste y lo doloroso, bello? Artísticamente sí. Y en según qué estilos musicales, estos momentos superan con creces a los golpes de luz y optimismo. KATATONIA son una banda que consigue sumergirnos en espectros oscuros, pero a la vez nos atrapa por sus pasajes melancólicos. Prácticamente han pasado cuatro años desde que pusieran a la venta “Dead End Kings”, y ya estábamos echando en falta esa brisa nórdica. Su vocalista Jonas Renkse es el encargado de responder a las preguntas de Satur Romero, para ponernos en situación.
Ahora acaban de estrenar nuevo álbum, y toca nuevas rondas promocionales. Que a día de hoy, no tarda el vocalista en reconocer que son muy distintas que cuando querían presentar al mundo sus primeros “Dance of December Souls” o “Brave Murder Day”, además de su cambio de carácter. Sinceridad no le falta. “Si, las mismas diferencias en ambos casos. Quizás era mucho más ingenuo, pero es probable que también menos amargo.” Imaginamos que en aquella época, no pasaba por su mente hacer conciertos acústicos en iglesias, o con orquestas, o publicar shows en DVD … ¿Cuál es el secreto de estar activo 25 años? ¿Se siente orgulloso de su situación actual? “Sí, me siento orgulloso de lo que hemos hecho si nos miramos hacia atrás a lo largo de los años, pero creo que nuestra situación actual podría y debería ser aún mejor, pero algunas cosas están fuera de nuestro control y sólo nos queda lidiar con los golpes”.
Ahora es tiempo de mirar al presente y centrarnos en su nueva entrega “Fall Of Hearts”. Un disco que ha tardado en llegar, aunque la espera haya merecido la pena, y que tanto sus fans como la prensa especializada lo está recibiendo con los brazos abiertos. “Las reacciones han sido muy buenas. Nunca se sabe cómo un álbum va a ser recibido por la base de los fans y de la prensa, pero éste dio en el blanco con puntuaciones muy altas”. En los últimos meses se han unido a la banda un nuevo batería y un nuevo guitarrista, Daniel “Mojjo” Moilanen y Roger Ojersson. Queda por saber cómo se han adaptado a la formación sueca, y cuál ha sido su contribución en este nuevo trabajo. “No podríamos estar más contentos de haber metido a Daniel Moilanen como batería para este álbum, y no hace falta decir que tiene una gran capacidad para equilibrar la complejidad y el groove. No había compromisos para hacer ciertos beats ni arreglos. Todo lo que programamos en las demos de la preproducción fue capturado por Mojjo en directo en el estudio, por lo que nos dio una sensación de libertad total y nos animamos a seguir hasta el final y tomar las curvas más amplias en la composición del disco”.
“Roger, un multi-instrumentista, entró al final de las grabaciones, pero se las arregló para adornar el álbum con unos fogosos solos que pusieron la guinda del pastel, por así decirlo. Roger es un guitarrista muy hábil y tiene un impresionante control, tanto de su ejecución técnica como emocional. Sentíamos que en ciertas partes, el álbum tenía una razón y una sustancia para que esos licks estuvieran ahí, y eso destacó en el disco. En general, los solos de guitarra siguen siendo un elemento bastante nuevo en KATATONIA. Ahora es la primera vez que siguen una función adecuada y desempeñan su papel, y estoy seguro de que habrá más de esto en el futuro, pero siempre asegurándonos que la calidad esté sobre la cantidad. Esperamos involucrar a Roger más en el futuro”.
Lo que pocos cambios ha sufrido, son las portadas. Desde hace bastantes años, el encargado ha sido Travis Smith, que siempre ha conseguido un gran impacto visual con su artwork. Y en KATATONIA en concreto, las aves y las figuras aladas, siempre han estado presentes. “A menudo el ave se ha utilizado como símbolo del presagio de la muerte, así que ha sido una metáfora preferencial, tanto en nuestros temas y letras, como en la portada del álbum. En concreto, se optó por el cuervo, ya que tiene un significado muy interesante y fascinante de lo que nos rodea donde vivimos. Creo que en última instancia, las alas de pájaros en general son un símbolo que representa la libertad. La libertad en la vida, la libertad en la muerte …»
Y hablando de simbolismo … El lyric vídeo de «Old Heart Falls» no es el típico que podemos ver hoy en día en cualquier banda. Estamos seguros que hay una historia detrás … “Bueno, al principio ni siquiera queríamos hacer otro lyric vídeo, pero nuestro sello y nuestro manager insistieron para que lo hiciéramos, así que tuvimos que buscar algo un poco fuera de lo común para sentirnos emocionados y formar parte de ello. Como yo estaba pensando en nuevas ideas, sólo me llamó la atención lo modesto que solía ser en los primeros días, antes de que los ordenadores entraran en nuestras vidas, las horas y las tardes que he tenido que pasar detrás de una máquina de escribir, o escribir todas tus cartas a mano, por lo que la idea sólo se basa en ese escenario y se desarrolló en un guión detallado que compensa el equilibrio entre un lyric vídeo y un video promocional tradicional. Elegí al director danés Lasse Hoile a la hora de visualizarlo para nosotros, porque siempre sabemos qué tipo de resultado vamos a tener cuando cooperamos. Creo que resultó ser un video muy representativo de nosotros”.
Posiblemente, esa inspiración para seguir experimentando y probando cosas nuevas, es uno de los ingredientes para que la banda siga en pie de guerra varios años después. Una reflexión que nos llega a la mente mientras escuchamos “Pale Flag”, canción que llama la atención por esas pinceladas a la escena folk metal nórdica. “Tu propio corazón es la mejor voz que te guía al final. Supongo que nuestra meta esta vez, era hacer un álbum tan dinámico y diverso como fuera humanamente posible, dentro de los límites de lo que todavía se reconoce como un disco con la marca de Katatonia. Creo que hemos dejado que el elemento progresivo reclame aún más espacio. Creo que es bastante evidente en la mayoría de los temas, que son mucho más largas y no siguen las estructuras típicas o estándar de las canciones. Tenemos aquí un poco de material heavy como ‘Serac’, ‘Last Song Before The Fade’ y ‘Passer’. También fuimos muy lejos en el territorio del no metal con temas como ‘Shifts’, ‘Decima’ and ‘Pale Flag’. Es toda una montaña rusa emocional a través de un espectro de escala de grises, atravesando tanto la oscuridad como la luz”.
Ahora toca hablar de los conciertos, y el presente más inmediato pasa por los festivales veraniegos que tienen en agenda. Hace poco actuaron en el Hellfest francés, por poner un ejemplo. Y le quedan unos cuantos más. Pero nos surge la siguiente pregunta cuando vemos a bandas de música melancólica, como es el caso, actuando a las cinco de la tarde con todo el solano en nuestra sesera. ¿Es el marco ideal? “No, no en absoluto. No podría ser más ideal que actuar de noche, preferentemente alrededor de la media noche, al aire libre, y con la brisa nocturna soplando sobre nosotros.” Pero después de estos compromisos veraniegos, comenzarán a presentar este nuevo disco por Europa, y nuestro país está incluido en su itinerario. “Para serte sincero, tenemos un montón de canciones ensayadas que interpretaremos sobre el escenario. El público español se encargará del resto. ¡Os queremos!”.
Lo que llama la atención, si seguimos investigando en su agenda, es que, de momento, no tienen conciertos fijados para presentar “Fall Of Hearts” al público norteamericano. No sabemos si este mercado se les antoja difícil 25 años de carrera después, o las cosas han cambiado a mejor. “Los conciertos en Norteamérica llegarán en 2017. Las cosas por allí han cambiado a mejor para Katatonia. A pesar de que somos una banda bastante pequeña en comparación con las grandes bandas del mercado americano, vamos con más frecuencia ahora de lo que nunca estuvimos antes, al menos en nuestra propia escala”. Nos despedimos de Jonas, y le comunicamos nuestras ansias por su próxima gira por España. “¡Gracias! (en castellano). ¡Nos vemos pronto!”.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.