STRATOVARIUS – “Cuando llegamos a las oficinas de Sanctuary Records tuvieron que ir a buscar nuestro contrato para saber quienes eramos”.
La historia de STRATOVARIUS es, si más no, atípica. Una banda que practicaba un género de heavy metal por el que nadie habría apostado nada a finales de los ’90, explotó y ellos se convirtieron en el principal estandarte del mismo. El metal melódico no se puede entender sin hablar de STRATOVARIUS y ahora que la banda se ha reencontrado a sí misma, tras múltiples y tempestuosas situaciones a lo largo de los últimos siete años, Jens Johansson nos habla de muchas cosas tanto del presente como del pasado reciente de la banda. Sergi Ramos se encierra con él en el backstage de la sala Razzmatazz de Barcelona un domingo por Barcelona poco antes de que salgan a tocar como teloneros de HELLOWEEN. Aunque, mientras se va a buscar un pase y deja a Jens con su portátil para grabar entrevistas, Jens decide ponerse a emitir ladridos de perro ante el micro con el fin de probar si se graban bien. La cara de nuestro director al encontrarse la escena es…curiosa.
¿Ha sido más fácil o más difícil grabar un nuevo disco de STRATOVARIUS con la nueva formación?
“No ha sido más difícil de lo normal. Los dos discos que hemos hecho desde que hemos vuelto a la actividad, “Polaris” y “Elyisium”, no han sido más difíciles que cualquier otro disco anterior. “Polaris” fue complicado porque había que volver a juntar a los miembros de la banda y comenzar a funcionar de nuevo. Una vez superamos ese obstáculo, todo fue como la seda. Somos una banda que trabaja muy bien, y todo el mundo tiene muy claro lo que tiene que hacer.”
Y a nivel profesional ¿ha sido complicado conseguir que promotores y discográficas respeten a la banda como un grupo profesional y serio, después de todo lo acaecido con Timo Tolkki y sus problemas mentales?
“No ha sido más difícil que hacer nueva música. En cuanto nos pusimos a hacer nueva música y la gente la escuchó, quedó claro que íbamos en serio. No creo que fuera demasiado difícil. Al principio, en el 2008, tuvimos algunas dudas sobre si podríamos tirar esto hacia delante, pero a medida que fuimos haciendo nueva música y conseguimos un contrato discográfico, todo fue poniéndose en su sitio”.
En los viejos tiempos, con Timo Tolkki, había un reparto bastante equitativo de presencia musical entre tu y el. Quizá era un 60% para Tolkki y un 40% para ti, aproximadamente. Pero tanto en “Polaris” como en “Elysium”, me da la impresión de que tu has tomado más presencia en la música de la banda como teclista y conductor musical.
“No lo creo. Creo que STRATOVARIUS es metal melódico con teclados y una ligera influencia progresiva, de modo que no veo una diferencia muy clara entre lo que estamos haciendo ahora en el terreno instrumental respecto a lo que hacíamos hace diez años. Pero en la composición si que admito que Matias Kupiainen ha tomado mucha importancia y eso da lugar a algunos enfoques diferentes”.
Cuando buscasteis a una guitarrista nuevo para sustituir el vacío de Timo Tolkki ¿buscasteis específicamente una persona con talento para tomar las riendas de lo compositivo en la banda?
“Creo que lo sucedió fue, sencillamente, que encontramos a alguien interesante. Cuando comenzamos a tocar con Matias no estaba siquiera seguro de que fuéramos a continuar con STRATOVARIUS, o de si íbamos a tener que emplear un nombre distinto. Básicamente, fuimos haciéndolo todo pasito a pasito y tener un guitarrista era algo necesario para comenzar a hacer nueva música. Cuando encontramos a Matias nos pusimos a componer y eso fue todo. No buscábamos nada concreto. Tan solo a un guitarrista”.
¿Dirías que el sonido se ha vuelto más oscuro?
“Si, admito que en “Polaris” y “Elyisium” el sonido general de la banda se ha vuelto algo más duro y oscuro”.
El sonido de la época “happy” de “Infinite” o “Visions” ya no está tan presente…
“Creo que esto ya se vio venir en los dos “Elements” que editamos en el 2004. “Elements” también fue un trabajo bastante oscuro musical y letrísticamente. Era algo muy profundo y denso. No se. No creo que tampoco hayamos sido una banda muy “happy” jamás. “Destiny” es un disco muy duro en cuanto a letras, bastante oscuro”.
¿Estas contento de no tener que hacer temas ultra-positivos a lo “Eagleheart”? Recuerdo que en aquel momento, STRATOVARIUS se volvieron demasiado infantiles en algunos aspectos musicales.
“La gente siempre tiene distintas opiniones sobre la música, porque no puedes tener contento a todo el mundo. No me importa tocar happy metal si eso hace feliz a alguna gente. No hemos hecho un plan para ser más oscuros y menos positivos. Básicamente, quedamos en abril, pusimos el material sobre la mesa y decidimos qué canciones iban a formar parte del disco.”
¿Trabajasteis por separado?
“Si, básicamente. No creo que Matias hubiera hecho diez canciones de happy metal por su cuenta tampoco. Pero si hubiera sucedido, no habría tenido problema con ello”.
¿No te costaría tocar canciones sobre arco iris y águilas que cruzan el cielo a la edad de cuarenta y tantos años?
“Mira a Ronnie James Dio, cantando sobre arco iris en la oscuridad (“Rainbow in the Dark”) a los 65 años…!”
Pero debe ser duro…
“Pero hacia a la gente feliz! (Risas)”
Bien jugao…has encontrado el ejemplo adecuado (risas). Hablemos del disco negro de STRATOVARIUS, el que editásteis en el 2005. Es un disco que suena muy poco a STRATOVARIUS. ¿Cómo lo recuerdas a día de hoy? ¿Qué opinión te merece?
“Creo que no es un disco tan malo como la gente ha querido pensar que es. Creo que es el tipo de disco por el que siempre se ha conocido a esta banda, un disco de pop melódico muy heavy. Creo que el disco fue más en la dirección rockera que en la progresiva o sinfónica. Fue un disco más directo y más pensado para llegar a las masas. Creo que Timo Tolkki moldeó el disco en base al “Black álbum” de METALLICA y, si, podría haber funcionado. Pero el disco salió con un año de retraso, debido a todos sus problemas mentales, que nos obligaron a retrasar las grabaciones. Cuando el disco salió a la venta, el sello había entrado en bancarrota.”
“Si nos hubiéramos ceñido al plan original, probablemente las cosas habrían salido mejor. Quizá habríamos conquistado el mundo del todo. Nunca lo sabremos. Creo que es un disco muy distinto a “Visions” o “Elements” y podría haber funcionado. De algún modo, es lo que le gusta a Timo Tolkki: no le asusta arriesgarse a la hora de hacer las cosas. El problema no fue el disco, sino que durante el 2004 toda la banda se tambaleó debido a sus problemas mentales y nos llevó un año poner la situación en orden. Cuando todo estuvo en su sitio, el sello se había ido al cuerno económicamente. A saber que habría pasado si el año 2004 hubiera salido como estaba planeado para ésta banda”.
Recuerdo que justo en ese momento, entre el 2002 y el 2003 fue cuando STRATOVARIUS estaban a punto de llegar a lo más alto. Fue justo en la gira de “Elements” cuando los conciertos de Barcelona fueron pasados al Palau de la Vall d’Hebró, un recinto sensiblemente más grande que la sala Razzmatazz. Y finalmente, tuvisteis que tocar en la sala 1, igual que las anteriores veces. Ese momento podría haber sido el punto de inflexión.
“Es difícil decirlo. Hacer los dos “Elements” y editarlos en el mismo año…quizá fue demasiado para el público, aunque todo es fácil de analizar en perspectiva. Podría haber funcionado. Llevo el suficiente tiempo metido en esto como para saber que en ocasiones has de arriesgarte…pero nosotros nos arriesgamos y perdimos la apuesta. Mira, cosas que pasan (risas)”.
Bueno, hay bandas que se pasan 20 o 30 años tocando hasta que llegan al gran éxito.
“Exacto, nunca se sabe!”.
¿Cuál es la relación actual entre los exmiembros de STRATOVARIUS y Timo Tolkki, si es que existe?
“En la actualidad todo está bastante bien. De vez en cuando me llega un correo y le respondo. No hay malos sentimientos en este momento. En el pasado ha cambiado de opinión tantas veces que siempre estamos asustados, porque no sabemos cuando le dará por cambiar de opinión una vez más. Pero yo no tengo ningún problema con él. Ya ha pasado algo de tiempo y estamos un poco más calmados.”
Leí o escuché una entrevista en la que decía que todo el asunto de su locura y toda la debacle mediática del 2004 era algo preparado como esquema publicitario, donde toda la banda, management y sello estuvieron colaborando. ¿Cuánto de lo que pasó era una estratagema publicitaria y cuando de lo que pasó era atribuible a los problemas mentales de Tolkki y ciertas ganas de divertirse tontamente por parte del resto de la banda? Es como lo de aquel concierto en Granada donde te measte en la pierna de Tolkki mientras él tocaba la guitarra. Puedo imaginarte haciéndolo por diversión, porque esa clase de humor es el que siempre has tenido…
“Bueno, yo también pensaba que era divertido. Yo fui el que más culpable se sentía de todo lo que pasó, dejando de lado a Timo en sí, porque los otros no participaron tanto en la historia. Pero cuando nos dimos cuenta de que Timo realmente estaba enfermo nos quedamos parados y nos dimos cuenta de que lo que estábamos haciendo ya no era tan divertido.”
“También te diré que un desorden maniaco-depresivo es algo curioso. Cuando están en fase maníaco, estos tipos pueden llegar a ser muy divertidos. No tienen miedo a nada y tienen todo tipo de ideas alocadas y es fácil dejarse seducir por ellas. Pero yo no tengo excusa, no tenia diagnosticado ningún brote psicótico. No se cual es mi problema, realmente. Sencillamente jugaba al juego por inercia”.
“Al menos no matamos a nadie. Pero los otros tios de la banda estaban un poco hartos. Jari (Kainulainen, exbajista) pasaba de todo esto. Jörg estaba muy en contra de todo esto…yo soy el más culpable junto al propio Tolkki”.
En aquella época, recuerdo que cada mañana me levantaba e iba directo a encontrarme con el siguiente capítulo del culebrón de STRATOVARIUS. Las notas de prensa, los comunicados de Tolkki, toda la situación en si era absolutamente desternillante. Parecía una película de serie B.
“Cierto”.
Aunque luego te das cuenta de que te estás riendo de alguien que está enfermo y la cosa pierde gracia…
“Pero es que el propio Tolkki se estaba riendo de si mismo hasta abril de 2004 o así, cuando se suponía que debíamos comenzar a grabar el “black álbum”. Fue entonces cuando dijo “oh, quizá no va a ser como el ‘black album’ de METALLICA” y entonces dijo ”oh mierda, ¿qué he hecho?”. Se colapsó y no podía trabajar en nada. Le llevó un año volver a centrarse. No fue hasta enero o febrero de 2005 que volvimos a trabajar en ese disco”.
Fue cuando Jörg Michael comenzó a trabajar en unas pistas de batería que no sabía ni para que eran, a solas, mientras Tolkki estaba hospitalizado.
“Exacto, aunque mantuvimos esas pistas más tarde. Pero entre abril de 2004 y enero de 2005, no hubo nada. El estaba muy enfermo, depresivo, hecho polvo. Compró un montón de equipo para su estudio y luego no usó nada…y todas esas cosas”.
¿Qué decía la gente de vuestro nuevo sello por entonces, Sanctuary? Debían estar flipando. Ellos firmaron con vosotros aquel mítico contrato por tres millones de euros.
“La cuestión es que conseguimos un contrato muy bueno con Sanctuary, pero nos encontramos con problemas que no tenían nada que ver con nosotros como banda. Lo que hicieron fue empezar a buscar inversores en el mercado bursátil de Londres. Comenzaron a emitir títulos de la compañía en esa época, quizá un año antes o así, 2002 o 2003. Cuando hicieron eso, atrajeron mucho dinero de inversores, pero los prestamos que habían conseguido por parte de los bancos estaban asociados al precio del stock. Cuando la bolsa comenzó a hundirse, tuvieron problemas con los prestamos, porque no estaban garantizados los tipos. Con todo eso sucediendo, y los bancos pidiéndoles 150 millones de libras de vuelta, créeme que STRATOVARIUS era el menor de sus problemas” (Risas).
“Consiguieron joderse a sí mismos infinitamente y suicidarse económicamente al salir a bolsa. Cuando quedamos con los tipos de Sanctuary, ellos no sabían ni quienes éramos. Llegamos allí y nos dijeron “¿quiénes sois?”. Es más, tuvieron que ir a buscar nuestro contrato, se quedaron perplejos y nos dijeron “uhm, creo que os hemos pagado un montón de dinero”. Les respondimos “si, y nos tenéis que pagar incluso más” (risas). Fueron comprensivos, y tenían que editar el disco que habíamos entregado, porque ya habían pagado unos dos tercios de su compromiso con nosotros. Tenían que sacar el disco aunque solo fuera para recortar sus pérdidas”.
“También tenían que sacar el siguiente disco, pero esa es una historia incluso más larga…”
Ese fue el disco de STRATOVARIUS que nunca se editó…
“…y que salió bajo el título “New Era” y el nombre REVOLUTION RENAISSANCE por parte de Timo Tolkki.”
¿Hay alguna idea tuya en ese disco?
“Se suponía que iba a ser el siguiente disco de STRATOVARIUS después del disco negro…”
Pero Tolkki regrabó todo con otros músicos… ¿había alguna composición tuya?
“Las composiciones eran todas de Tolkki, y las interpretaciones de cada músico se cambiaron por completo para no usar lo que habíamos creado los demás. Lo que si hay son demos de ese disco con STRATOVARIUS tocando, por ahí campando a sus anchas por internet”.
Es una historia de locos. Reconozco que mantuve la atención hasta el 2007 o así y luego comencé a perderme irremediablemente…
“Yo también! (Muchas risas) Es que todo esto es la mitad de la historia. El disco debía haberse llamado “Revolution Renaissance” y debería haber sido editado por la banda STRATOVARIUS, pero pasó lo que pasó.”
Recuerdo leer un comunicado de Tolkki en el que os cedía el nombre de la banda en perpetuidad. Y una semana o dos después, emitía un comunicado totalmente alucinado por el hecho de que quisierais llamaros STRATOVARIUS sin el en la banda o algo por el estilo. Impresionante.
“Eso fue en el 2008, acabas de avanzar la cinta hasta entonces. Hay otros diez millones de historias intercaladas en ese tiempo, más o menos”.
¿Harás un libro sobre ello?
“Espero no tener que hacerlo (risas). Son cosas muy deprimentes. Es más divertido seguir haciendo música. A fin de cuentas, es lo que la gente quiere. No quieren estas historias y locuras, quieren música. Quizá a ti te gusta escucharlas o a la gente de la industria, pero llegas a mucha más gente creando música.”
¿Vais a mantener el ritmo de edición de nuevos discos de la banda? “Elysium” llega apenas 18 meses después de “Polaris”.
“Eso espero!”.
¿Tenéis algo compuesto para el próximo?
“Tengo un montón de ideas preparadas. Veamos qué es lo que sucede después de la gira con HELLOWEEN!”.
Texto y fotos: Sergi Ramos
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