En Barcelona se espera prácticamente llenar el aforo de la sala Razzmatazz 2 el 2 de febrero. Previamente, el día 31 actuarán en la Penélope de Madrid y al día siguiente, 1 de febrero, en la Santana 27 de Bilbao.

Primal Fear son una de esas bandas consistentes y constantes. Desde 1998 han editado la nada despreciable cifra de diez discos de estudio, lo cual se traduce aproximadamente en un disco por cada año y medio de carrera. Ese ritmo, sumado a múltiples giras por todo el mundo, apariciones en festivales por doquier y unas saludables carreras paralelas por parte de la mayoría de sus miembros, confirma que los de Stuttgart son una de las bandas más trabajadoras del panorama del metal. Nunca han sido producto de masas, lo saben, y se apañan con contentar a su sector de fans acérrimos que jamás se pierden un show.

Ahora acaban de editar un nuevo trabajo, titulado “Delivering The Black”. Es seguramente su obra más madura en lo musical, aunque sigue en la linea que comenzaron con “Seven Seals” en el año 2005. Heavy metal puro, pero sin excesivos agudos chirriantes, con mejores arreglos y algunos devaneos con estilos más pesados que los mantiene vigentes y ágiles musicalmente.

“En aquel entonces” comenta su bajista y líder, Mat Sinner “nadie sabía cuál era el futuro de Primal Fear”. Habla de los inicios del grupo en 1998, cuando aterrizaron sobre una incipiente escena neo-metálica europea que cabalgaron exitosamente hasta nuestros días. “Nosotros estábamos experimentando como banda. Ahora sabemos lo que tenemos, y sabemos que tenemos que dar lo que la gente espera de nosotros.”

Aunque ha habido un salto cualitativo considerable, Sinner no considera que la banda haya cambiado demasiado desde sus inicios. “No creo que seamos tan diferentes” resume. “La diferencia es que hemos aprendido mucho durante este tiempo y que ahora somos mejores músicos. Creo que la formación actual es mucho más potente a nivel musical y personal, de hecho es la mejor que hemos tenido. Las canciones del primer disco como “Chainbreaker” o “Tears of Rage” no son tan distintas de lo que estamos haciendo ahora. Sencillamente, ahora tocamos mejor, hacemos arreglos más inteligentes y sabemos mejor como funcionan las cosas.”

El nuevo trabajo sale a la venta hoy, 24 de enero, y la banda se embarca en una gira por todo el mundo que visitará España a finales de la próxima semana, junto al ex- ACCEPT Udo Dirkschneider, los suecos Bullet y los recién incorporados Messenger. Un cartel cuadruple que está funcionando bastante bien a nivel de venta anticipada en la mayoría de ciudades. En Barcelona se espera prácticamente llenar el aforo de la sala Razzmatazz 2 el 2 de febrero. Previamente, el día 31 actuarán en la Penélope de Madrid y al día siguiente, 1 de febrero, en la Santana 27 de Bilbao.

“Estamos muy motivados con el nuevo disco y la reacción de los medios ha sido muy buena, como nunca antes” explica feliz Sinner. “Estamos poniendo en marcha la mayor gira que jamás hemos hecho. Primero hacemos Europa y luego nos pondremos con la gira Rock Meets Classic, que no se si conoces”. Se trata de un tour en el que varias estrellas del rock tocan junto a una orquesta sinfónica bajo la dirección de Mat y varias colaboraciones de miembros de Primal Fear. Una gira de grandes recintos en países centroeuropeos que lleva ya un lustro en marcha.

“En esta ocasión Alice Cooper es el cabeza de cartel y es un enorme curro para mí, porque soy el director musical del show” explica. “Son grandes arenas en Alemania y todos los miembros de PRIMAL FEAR están involucrados en un aspecto u otro. Tras eso nos iremos a Estados Unidos y Canadá durante cuatro semanas. En verano haremos los festivales europeos, luego nos marcharemos a Sudamérica, de ahí directos a Japón y de ahí a una gira completa por el Reino Unido. Finalmente haremos Escandinavia, Alemania y acabaremos en Australia. Serán más de cien shows.”

¿Como puede ser que en la coyuntura actual PRIMAL FEAR estén viviendo uno de sus mejores momentos y tengan una demanda tan grande?

“No hay crisis para PRIMAL FEAR” ríe. “Nuestra meta es vender más discos que con “Unbreakable”, que fue nuestro disco más exitoso a nivel de listas. En América dimos un paso adelante y lo queremos impulsar aun más con la gira americana que haremos. Esa es nuestra meta y dentro de doce meses te diré si lo hemos conseguido o no”.

Parece que la banda quiere abrir camino fuera de Europa y potenciar los mercados americanos, oceánicos y asiáticos. Aunque “no es que las cosas estén más difíciles en Europa” segun Sinner. “Las ventas del último disco fueron buenas y quedamos satisfechos”.

De hecho, las cosas van tan bien que la banda prosigue su relación profesional con el sello italiano Frontiers Records y ésta durará mucho tiempo más. “Hemos renovado el contrato con ellos para cuatro discos más, así que todo va bien de momento” dice Sinner. “Todo depende de si a los fans les gusta el nuevo disco. Creo que a los fans de verdad les gustará. Hemos trabajado muy duro y nos hemos gastado un montón de dinero en éste trabajo. Espero que tenga buen resultado”.

Primal Fear tienen una identidad muy marcada a nivel musical. Es fácil decir que este disco se parece al anterior, “Unbreakable”. Que a su vez se parece al anterior, “16:6 – Before the Devil Knows You’re Dead”. que a su vez…

“No queremos escapar de nada” asegura el bajista. “Si acabas de editar tu disco más exitoso en las listas no tiene sentido cambiar muchas cosas. Nuestro objetivo era componer un disco en la misma dirección pero con mejores canciones, mejores interpretaciones, mejores riffs, mejores melodías y mejor producción. Pero la música en si misma no la queremos cambiar. Si a los fans les gustaba el disco anterior ¿para qué cambiar nada?”

“Lo importante para nosotros es que todos los miembros de la banda toquen lo mejor que puedan y que el estilo compositivo sea bueno. La voz no debería ser peor que en el disco anterior y los solos de guitarra deberían ser más atractivos que en el anterior disco. Randy Black ha tocado el mejor disco de su carrera y esos fueron unos buenos cimientos sobre los que construir el disco”.

Ralf Scheepers, el vocalista de la banda, ha dejado de lado sus agudos estratosféricos en estos últimos tiempos, optando por un estilo vocal mucho más centrado en el rango medio de su voz, lo cual dota de más pesadez y potencia a las canciones. “Si chilla todo el tiempo, la gente no va a estar contenta” resume Mat. “Es un tipo que sabe lo que hace y sabe que diez canciones gritando como loco no tienen sentido para el público”.

Sinner compagina la actividad en Primal Fear con su labor como impulsor y director artístico de la gira Rock Meets Classic, sus colaboraciones como productor musical para distintos proyectos de Frontiers Records (como el disco de Michael Kiske junto a Amanda Sommerville), su otra banda Sinner y el proyecto Voodoo Circle junto a Alex Beyrodt, también guitarrista de Primal Fear. Todo conducido desde las oficinas de Level 10, desde las que también actúa como consultor para sellos discográficos y lleva el management de algunos artistas. Level 10 también es el nombre de la banda que acaba de poner en marcha junto a Russell Allen de Symphony X.

“Me encanta mi trabajo” dice con convicción. “Estoy muy agradecido de poder convertir mi pasión en un trabajo, porque no todo el mundo puede decir eso. Cuando comencé a hacer ‘Rock Meets Classic’ fue un test para mi. Todo el mundo quiere tocar con una orquesta clásica, cualquier músico que se precie. Estar sobre un escenario con 50 músicos tocando detrás de ti es una sensación indescriptible. La cuestión es cómo hacerlo exitoso. Poder tocar con Steve Lukather, Ian Gillan o Paul Rodgers es una experiencia irrepetible. Si hace cinco años me hubieras dicho esto mismo no te habría creído, pero hemos conseguido ponerlo en marcha y hacerlo exitoso.”

¿Hay espacio para que una gira como Rock Meets Classic llegue a pasar por España en algún momento?

“A nosotros nos gustaría explorar otros territorios con ‘Rock Meets Classic’ concede. “Alemania, Austria y Suiza son tres sitios que sabemos que funcionan, así que hemos construido allí nuestra base de seguidores. Movemos entre 3000 y 9000 personas en cada concierto. Hemos llegado a Dinamarca y Francia, pero ya tenemos ofertas de Escandinavia y otros países. Podría suceder que en el 2015 llevemos la gira un poco más  lejos. Si algún promotor está interesado en trabajar con nosotros en España, nosotros somos todo oídos. Pero todo depende de la gente”.

La logística no es simple. “Necesitamos un escenario muy grande, porque sobre el escenario hay sesenta personas trabajando” explica. “Es algo masivo. El asunto técnico es complejo también: las pantallas de video, la PA…es algo muy grande. No tiene sentido hacerlo si no vienen al menos 4000 o 5000 personas al concierto”. 

Y cuando se trata de prioridades ¿cuál es la principal?

“Dedico prácticamente el mismo tiempo al Rock Meets Classic que a Primal Fear. Para mi esto es mi dia desde que empieza hasta que acaba”.