Greg Mackintosh es una persona ocupada. Por si no fuera poco el trabajo que tiene con su banda madre, los británicos Paradise Lost, desde 2010 cuenta con una superbanda de death metal en la que el resto de miembros son ni más ni menos que Hamish Hamilton (My Dying Bride), Adrian Erlandsson (At the Gates) y Scoot (Doom). El próximo 12 de mayo sale a la venta su segundo trabajo con este proyecto, «Splinters», de modo que le pedimos que nos explique qué nos van a ofrecer en esta entrega. «Cuando decidimos hacer un segundo álbum, un par de nosotros hicimos la sugerencia de crear algo más extremo en todas las direcciones. Lo rápido más rápido, lo lento más lento, lo enfadado más enfadado. Por otro lado también queríamos desarrollar más un sonido propio, ya que considero que nuestro debut fue un disco de death metal bastante estándar. Aquí hemos intentado sonar más personales, la intención es que si te pones el álbum a los 20 segundos puedas decir Esto es Vallenfyre y no cualquier otra banda de death. La portada refleja esta dirección más extrema, hay una diferencia notable entre ambas.»

Precisamente este desarrollo de la personalidad viene ligado con cómo las nuevas canciones han sido trabajadas. «El timón compositivo lo llevo yo. De hecho, nuestro primer álbum fueron temas que compuse por mi cuenta, mucho antes de que decidiéramos montar esta banda. En este segundo trabajo todos han colaborado para mejorar mis ideas principales, me dicen qué les gusta y qué no, de modo que desarrollamos el estilo de Vallenfyre en conjunto.» Proviniendo todos de bandas exitosas, encajar el puzzle para grabar se presenta como un verdadero rompecabezas. «Es extremadamente difícil cuadrar el calendario para poder hacer algo juntos. Comparamos el de cada uno y rezamos por que haya suerte y encontremos un agujero en el mismo lugar para los cuatro (risas).»

Le preguntamos a Greg por el tipo de expresión artística que supone cada una de sus dos bandas para él. «Vallenfyre me lleva por un camino de mi personalidad muy distinto al que recorro con Paradise Lost. Con los segundos tenemos… cómo decirlo, tristeza con clase. La música que hago con los primeros sin embargo es muy desordenada y caótica, no hacemos muchos planes. Me gusta trabajar de ambas maneras y hacer metal de dos modos tan distintos, porque cada uno hace que aprecies mejor el otro.» Y estrictamente vinculadas con las diferencias musicales vienen las líricas… «Las letras de Paradise Lost son sutiles, y hablan de sentimientos. En cambio en Vallenfyre son viscerales y agresivas, muy exageradas. » 

De cara a la presentación de «Splinters» en directo, declara: «Nuestras expectativas son hacer un par de giras pequeñas a finales de año. La otra vez participamos en varios festivales de verano, pero en esta ocasión no va a poder ser porque vamos un poco tarde para esa temporada. Intentaremos dar al menos una o dos fechas en la mayoría de países europeos, esta vez en salas.» Un concierto muy distinto, sin embargo, será el que dé en las filas de Paradise Lost con la orquesta de Plovdiv el 20 de setiembre. «Fue idea de Nick, y a todos nos pareció muy interesante. No creo que elegir las canciones para este concierto sea una tarea difícil, considero que con escuchar un tema ya puedes determinar fácilmente si quedaría bien con orquesta. No quiero tocar una canción de metal a la que se le ha endosado una orquesta encima, ya sabes lo que digo. Eso lo vemos a menudo. Suena falso y extraño. Todavía no hemos hecho la selección, pero no tengo dudas de que podremos hacer un repertorio que suene natural. Volaremos a la ciudad una o dos semanas antes del concierto para poder ensayar lo suficiente con ellos. Evidentemente, antes el director recibirá las partituras y cada parte practicará por su cuenta, pero para asegurarnos tenemos mucho tiempo para tocar con ellos en vivo antes del gran día.»

Por otro lado, no dejamos pasar la oportunidad de preguntar por cuándo podremos escuchar un nuevo álbum de Paradise Lost… «Ahora mismo estoy trabajando en ello. Tengo compuesta aproximadamente la mitad de la música que formará parte de ello. Con suerte podría estar fuera a finales de año.» ¿Qué nos deparará esta nueva entrega? «Nos gustan los desafíos y nos aburrimos rápidamente. No podemos grabar el mismo disco una y otra vez, porque se convertiría en algo tedioso: no sería divertido para nosotros y tampoco para la gente que lo escucha. ¿Por qué vivir copiando tu mejor disco? Preferimos probar cosas distintas. Del nuevo álbum todavía no puedo decir demasiado, porque como he dicho sólo tengo la mitad compuesta… pero sí os puedo adelantar que hay varios elementos que van a sorprender a los fans de Paradise Lost. «

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