Max Cavalera quiere metal, más metal y nada más que el metal.

Cada año Max Cavalera saca un disco: a veces lo hace con Soulfly, a veces lo hace con Cavalera Conspiracy y a veces lo hace con Killer Be Killed. Y gira con cualquiera de las dos primeras bandas por todo el mundo de manera continua.

Cada año Max Cavalera saca un disco: a veces lo hace con Soulfly, a veces lo hace con Cavalera Conspiracy y a veces lo hace con Killer Be Killed. Y gira con cualquiera de las dos primeras bandas por todo el mundo de manera continua. Es uno de los tipos más prolíficos del metal extremo más masivo y no parece estar necesitado de una reunión con su antigua banda para nada. Soulfly acaban de editar “Archangel” y vuelve a ser una buena oportunidad para hablar con el viejo Max, que quiere metal, todo el metal y nada más que el metal.

«Archangel» es un disco más místico que los últimos trabajos de Soulfly, algo que no sucedía desde la época de «Prophecy». ¿Porqué?

«En primer lugar, era mi décimo disco y quería hacer algo especial y distinto. Las ideas comenzaron a flotar en mi cabeza y pensé en usar algunos temas bíblicos en el disco, algo que nunca he explorado demasiado en el pasado y que me da inspiración para hacer un buen disco. Cuando fuimos al estudio las canciones comenzaron a salir de nosotros con mucha fluidez. Temas como «Archangel», «Sodomites» o “Bethlehem’s Blood» comenzaron a tomar forma con mucha rapidez y decidimos equilibrarlos con otros no tan bíblicos como «We Sold Our Souls to Metal» o «Live Life Hard», que tienen otro toque.»

«Es un disco con mucho que ofrecer. Musicalmente es muy brutal nuevamente y tiene muchas influencias de lo que suelo escuchar. Líricamente es medio bíblico y medio metálico. Es un trabajo variado e interesante. Seguramente es mi disco más raro desde ‘Prophecy'».

¿Porqué has vuelto a recuperar el componente místico/exótico? Hay incluso pasajes psicodélicos como el final de «We Sold Our Souls to Metal».

«Han sido varias cosas. Quiero explorar cosas distintas y nunca he hecho canciones referidas a la temática bíblica. Estaba leyendo el Viejo Testamento y me sorprendía lo brutal que es ese libro, las imágenes que describe y sugiere. La cantidad de sangre y violencia que contiene. De la Biblia puedes hacer diez discos si quieres. Las historias son tremendas, son poderosas. Yo simplemente escogí un par y las adapté.»

«Prophecy» salió de la nada y supuso un renacimiento para Soulfly, con nuevos miembros y más energía. Creo que necesitaba estar en una situación similar de nuevo. Después de ‘Savages’ necesitaba explorar otros aspectos. Es un disco más groove metal que otra cosa y quería algo más básico y exótico. Creo que simplemente he sustituido el toque tribal de los primeros Soulfly por las referencias bíblicas. Hay mucho ruido apocalíptico, cánticos y mística en este disco. Creo que la música debe ser así. No siempre debes entenderla. Hay cosas que no puedes entender pero que debes sentir. El sentimiento es lo importante.»

¿La brutalidad de la música también viene dada por la extrema violencia de las imagenes bíblicas?

«Bueno, no somos una banda religiosa ni estoy aquí para enseñar nada a nadie. No estoy aqui para convertir a nadie al cristianismo. Para mi lo importante es que la música de Soulfly mantenga la brutalidad y la influencia de otras bandas de metal, como Melechesch, Behemoth, Wormed o Hour of Penance.. Tenemos la influencia de todas esas bandas y me gustan explorar distintas temáticas que sean excitantes para mi. Hablar sobre lo que hablamos en «Sodomites» o «Archangel» es arriesgado, es un reto.»

«Ha sido un disco interesante que crear. Nos adentramos en lo desconocido y eso siempre es entretenido. Cuando acabé el disco y lo escuché entero de nuevo, me sorprendió lo excitante que era. Además, es muy corto: son solo 36 minutos de música. Un disco corto que puedes escuchar del tirón sin aburrirte es una rareza hoy en día.»

«Me gusta mucho este disco. Creo que va a ser uno de los discos más importantes de la carrera de la banda».

También el último disco de Cavalera Conspiracy era bastante extremo y casi grindcore por momentos. ¿Es la dirección en la que estás conduciendo tus gustos musicales?

«Escucho muchas cosas. Entre lo más nuevo estoy escuchando mucho a Suburban Scum, Cold Orange, Full of Hell y cosas así. También escucho mucho death metal como el de Benighted, Hour of Penance, Belphegor y cosas así. Los Wormed que te comentaba antes son españoles y son tremendos. Septic Flesh también me encantan. Me gustan muchas bandas, sigo escuchando mucho metal y todo eso condiciona la música que hago en la actualidad. Buscar nuevas bandas es una pasión y me paso la vida descubriendo nuevos grupos. Me gusta ponerme en contacto con ellos y trabar una amistad.»

«Me alegra que en este disco haya podido contar con Todd Jones de Nails cantando en «Sodomites» y a Matt Young de King Parrot cantando en «Live Life Hard». Son dos de mis nuevas bandas favoritas.»

El primer tema, «We Sold Our Souls to Metal», es muy descriptivo. Puedo pensar en muchos artistas de tu misma era que se han acomodado y ya no sienten este rollo de la misma manera. Pero tu sigues ahí, entregado a la causa, buscando nuevas bandas, girando y editando discos cada año, etc.

«Nunca he querido que eso me suceda y he estado muy atento justamente a eso. Incluso en la época de Sepultura escuchaba mucho metal y punk y cosas underground. Me gusta absorber toda la música que hay a mi alrededor, soy como una esponja. Cualquier cosa puede ser una influencia, cualquier cosa puede transformarse en una canción. Yo decidí enamorarme del metal y ser parte del underground, desde el principio.»

«Cuando descubrimos esta música éramos nosotros contra el mundo y eran los inicios de todo: Venom, Hellhammer, Discharge… Yo me enamoré de todo eso. Ahora me hago más mayor y me pasan a gustar cosas aún más heavies. No se porqué. Mi cuerpo reacciona. En lugar de hacerme viejo y aburrido escuchando jazz, yo simplemente quiero más metal. DAME MÁS METAL!» (Risas)!»

«Yo vendí mi alma al metal. Ni más ni menos».

Un año lo dedicas a Soulfly, el siguiente a Cavalera Conspiracy y en medio encuentras tiempo para otros proyectos como Killer Be Killed. ¿No te apetece pillarte seis meses de vacaciones?

«He estado pensando en ello. Creo que ahora ya puedo plantearme descansar un poquito. Soulfly, al menos, pueden parar. Lo próximo que hagamos será un disco en directo grabado en algun lugar, porque ya tenemos diez discos y un buen setlist en directo. Eso me permitirá desconectar una temporada de Soulfly y relajarme. No creo que grabe otro disco de Killer Be Killed pero si que editaremos dos nuevas canciones el año que viene. Además, pasaré la mayor parte de 2015 y 2016 en la carretera para promocionar «Archangel» en directo. Tras eso me tomaré un descanso. Seis meses sería demasiado, pero un mes para irme de vacaciones con mi familia estaría bien. Descansar un mes me iría bien, así luego puedo volver con toda la energía a mis proyectos. Me gustan todas mis bandas y quiero mantenerlas vivas y funcionando tanto como pueda».

Me he prometido a mi mismo no preguntarte nada sobre una reunión de Sepultura.

«Eres un buen hombre».

Tocas este fin de semana en el Resurrection Fest de Viveiro, Galícia.

«¿Quien más toca en el cartel?»

Tienes a Motorhead, Cannibal Corpse, In Flames, Black Label Society y un montón de metal más underground, así que te lo pasarás bien.

«Pues tengo ganas de ir por allí. Me han dicho que es en el norte de España en una zona preciosa. Espero que la gente responda como siempre!».