EPICA: “Me compro un montón de mierda en internet que no me hace ninguna falta. Estamos obsesionados con consumir”.

EPICA son consistentes y un valor seguro y fiable. Si alguien hubiera invertido en EPICA en el año 2003, probablemente ahora tendría unos buenos dividendos. Desde los tiempos de “The Phantom Agony” la banda se ha convertido en una de las bandas más respetadas de la escena metal europea, gracias a una ristra de discos cuidados y repletos de grandes composiciones. Ya con “Deisgn Your Universe” dieron muestras de estar avanzando y eliminando las barreras de un estilo como el metal sinfónico más típico y tópico. Con “Requiem for the Indifferent” confirman su huida hacia delante, aunque sin perder sus elementos identificativos más claros. Simone Simons habla telefónicamente con Sergi Ramos.

¿Qué temas os han inspirado para componer en “Requiem for the Indifferent”?

“En cuanto a las letras, la inspiración siempre sale de nuestras propias vidas y de las situaciones que nos encontramos en el mundo actual. La crisis económica que tenemos, la religión (que siempre tocamos en alguna canción), los desastres naturales… Son los temas clave en muchas de nuestras letras, aunque siempre hay algún aspecto más personal infiltrado en lo que componemos. Llevábamos una buena temporada buscando un título adecuado para el disco y originalmente “Requiem for the Indifferent” era solo una canción en el disco que habla esencialmente sobre la crisis financiera. Tenía un título distinto en su primera encarnación y Mark fue quien lo decidió cambiar a “Requiem for the Indifferent” para que casara con el título del disco. Siempre es el quien se encarga de bautizar el disco en última instancia.”

“No se debería ver el título o la temática como algo negativo por nuestra parte. Más bien al contrario. Intentamos estimular positivamente a la gente que no presta atención a lo que está pasando en el mundo para que se involucre y consigamos marcar alguna diferencia o realizar algún cambio. Todos vivimos juntos en el planeta, pero la gente se ha vuelto muy egoísta y solo piensa en sus propias vidas y fines. Los privilegiados que tenemos salud, riqueza, una familia alrededor y un techo sobre nuestras cabezas tenemos que mostrar nuestra apreciación por nuestra suerte e intentar reequilibrar las cosas, pues se nos ha ido de las manos.”

¿Es la situación muy distinta en Holanda? Si comparamos con España, la crisis financiera tiene unos efectos mucho más devastadores en mi país que en el tuyo. ¿Consideras que la gente de tu país vive en una situación económica que los hace mucho más ignorantes de la verdadera dimensión de lo que está sucediendo hoy en día?

“Pienso que en Holanda las cosas son más fáciles que en tu país. No hay una pobreza real en Holanda. Lo que nosotros consideramos pobreza es alguien que gana menos de 500 Euros al mes. Pero para mi la pobreza es alguien que no tiene una casa. Cuando giro con EPICA por todo el mundo, veo muchas situaciones y áreas en ciudades que son un auténtico desastre. Cosas que no verías jamás en Alemania ni Holanda (de hecho, ahora estoy viviendo en Alemania). Esa es la pobreza real, bajo mi punto de vista: la de la gente que no puede pagarse una atención médica y mueren por una enfermedad porque no tienen recursos. Eso no sucedería jamás en Holanda.”

“La riqueza tampoco solo es económica. Muchos países tienen dictadores y la gente ha comenzado una revolución contra muchos de ellos para conseguir otro tipo de mejora en sus vidas, la que proporciona la libertad. Cada país del mundo tiene un nivel distinto, por eso es tan complejo conseguir cambiar las cosas. Nosotros tampoco sabemos como cambiarlas. Lo que se nos dice a través de los medios no siempre es cierto, en ocasiones se selecciona lo que conviene transmitir a la gente. Tenemos políticos, pero los políticos nos cuentan una historia que muchas veces no tiene nada que ver con la realidad. Pero al menos tenemos una voz y podemos votar, que en otros países es algo imposible. Y tenemos dinero, lo que nos lleva a poder gastarlo en aquello que consideramos ético o adecuado, y ese es un poder que debemos tener en cuenta y que no ejercemos como deberíamos. Podemos cambiar pequeñas cosas, como reciclar nuestros residuos, cooperar con quienes lo necesitan…son pequeñas diferencias que podemos realizar y que no cuestan nada. Pero poco a poco las cosas están cambiando: están llegando los coches eléctricos y otros avances que nos harán mejorar lentamente. Es un tema muy amplio sobre el que podría estar horas hablando, pero en esencia, la intención es equilibrar las cosas de nuevo para que deje de haber tantas diferencias políticas, financieras y sociales. Deberíamos ponernos en pie todos y hacer algo que sirva de verdad, de una vez por todas”.

Tocáis en lugares complicados económicamente como Sudamérica, donde es fácil salir de una moderna gran ciudad y encontrarte la pobreza más extrema a escasos metros. ¿Volvéis al hotel y os liais a componer letras frenéticamente?

“Nosotros vemos el mundo desde perspectivas muy distintas respecto a otras personas, que trabajan y viven siempre en la misma ciudad y no salen de ahí. Viajamos mucho y vemos lo que hay en otros lugares. Obviamente, nunca tenemos los hoteles en las partes pobres de las ciudades e intentamos no acercarnos, porque puede ser ciertamente peligroso. Pero te fijas en ello, aunque no te mezcles con ello. Y en ocasiones te das cuenta de que gente que debería estar desesperada puede que esté más feliz que tu. Sencillamente, porque no están consumidos por nuestra cultura materialista, donde el dinero juego un rol muy importante. Creo que estamos obsesionados con consumir, yo incluida. Me compro un montón de mierda en internet que no necesito. Tengo dinero para comprar comida y vivir pero quiero más, necesito más. Y la gente que vive en los países pobres apenas necesita lo justo para sus necesidades básicas. Todo esto es una de nuestras inspiraciones para las letras, aunque sea triste tener que corroborar como existen diferencias tan grandes entre la vida de unos y de otros”.

¿De qué habla la letra de “Monopoly on Truth”?

“La letra habla de la gente que no escucha a nadie y siempre piensa que tiene razón. Hay gente que tiene el monopolio de la verdad porque considera que todo lo que dice es verdad y lo que el resto de gente dice no lo es. Es una letra de Mark y fue el quien me dio esa descripción exacta (risas)”.

Este año se cumplen diez años desde la primera demo de EPICA. ¿Consideráis la opción de hacer algo distinto en la gira de primavera que realizaréis por Europa para celebrar la efeméride?

“Queremos ofrecer algo especial, porque ya tenemos cinco discos en nuestro haber, pero claro, tampoco podemos tocar seis horas. Queremos hacer una buena mezcla entre viejos y nuevos temas. Ya sabemos cuales son las que mejor funcionan de nuestras antiguas canciones, y en breve haremos una presentación del CD y nos haremos una idea de cuales son las nuevas canciones que mejor enganchan al público. Incluiremos esas en el futuro set”.

Cuando miras atrás y valoras esos cinco discos ¿crees que EPICA ha tocado techo musicalmente? Discos como “The Divine Conspiracy” o “Consign to Oblivion” son los más venerados por los fans. ¿Creéis que fueron vuestro zénit musical particular?

“Pienso que a partir de “Design Your Universe” hemos dado un paso de gigante. La entrada de Isaac y Ariën en la banda nos ha completado totalmente, aunque ya llevan más de tres años en la banda. EPICA se han reinventado de algún modo. Nuestros tres primeros discos formaban parte de nuestra búsqueda artística personal, nuestra búsqueda de identidad. El nuevo disco es otro paso adelante. Isaac, de hecho, ha compuesto dos canciones que están un poco más allá de lo que son EPICA y eso ha generado un cambio en la banda también. Estamos en el camino adecuado con estos últimos dos discos y el sonido está cambiando ligeramente. Estamos comenzando a mostrar de lo que somos capaces realmente y vamos a seguir así”.

La banda siempre ha tenido una relación estrecha con KAMELOT. Tu les has ayudado a menudo con colaboraciones vocales y ahora también en la época en que más lo necesitaban, tras la marcha del grupo de su vocalista Roy Khan. ¿Qué opinión te merece su salida de la banda por motivos religiosos?

“Se la parte de la historia que me ha contado la banda. No he hablado con Roy desde que se fue de la banda. Es su vida y el sabrá porqué lo ha hecho. En una banda, estás tocando con más gente y si no te sientes cómodo y necesitas cambiar tu vida, debes hacerlo. Es desafortunado para la banda, porque la banda desea continuar. Cuando me lo pidan, siempre les ayudaré”.

¿Fue un problema girar con KAMELOT y cuadrar los compromisos con EPICA?

“Oliver Palotai, su teclista, es mi novio desde hace casi siete años, de manera que para mi no es un problema ayudarles. Además, cuando trabajo con ellos como vocalista, puedo salir a la carretera de gira con Oliver y estar juntos.”

Girar con tu pareja da lugar a divertidas discusiones, me imagino.

“Sabemos como llevar el asunto. Ambos entendemos este tipo de vida, aunque es muy difícil estar el uno sin el otro. La tecnología te permite estar más en contacto que hace años, lógicamente, pero sigue siendo un poco duro llevarlo. No obstante, que dos músicos salgan juntos es la situación ideal, porque ambos saben lo que hay y como funciona este mundillo. Cuando una de las dos partes es músico y la otra tiene un trabajo normal, el conflicto está asegurado. No saber de tu pareja cada pocas horas es duro para mucha gente. Yo en ocasiones no se nada de Oliver en uno o dos días, pero también se que en ocasiones es difícil establecer comunicación cuando estás yendo de país en país. Hay que confiar mutuamente también.”

Las bandas de nivel medio como EPICA ¿cómo sobreviven? Los costes de girar son enormes y los discos ya no venden. ¿Cuál es vuestra fórmula para lograr vivir de esto?

“En EPICA todos vivimos de la banda. No necesitamos un segundo trabajo para salir adelante. Entre los shows en directo, las ventas de discos, los avances que recibimos para grabar discos y el mechandise podemos funcionar bien. Esta banda ha sido una inversión constante durante años y ahora podemos pedir una buena cantidad por tocar en directo, aunque claro, es el merchandise lo que realmente funciona. No solo vendemos camisetas, sino que vendemos CD’s también, que nosotros mismos le compramos a la discográfica. Siempre hemos vendido muchas camisetas en los shows y eso nos ha ayudado mucho”.

¿Lleváis el management de la banda vosotros mismos?

“Tenemos un asesor financiero que nos aconseja sobre nuestro dinero y un buen mánager que nos echa una mano. No es un mánager total como en el caso de otras bandas, pero puede que eso cambie en breve, porque la banda se está haciendo cada vez más grande y es difícil estar en todo.”

“No obstante, aún no somos una banda lo suficientemente comercial para los “grandes” managers. Somos esencialmente una banda de metal, pero no somos IRON MAIDEN, tenemos ciertas limitaciones. Los “grandes tiburones” saben que no vendemos millones, así que aun no nos acechan…”.