Txus ha sacado un libro con la editorial Quarentena Ediciones. Un jugoso libro a todo color y en tapa dura en el que vemos un repaso a su vida y sus logros con el grupo. Es una obra sumamente completa en la que nuestro compañero Mariano Muniesa también ha estado involucrado y que será un regalo perfecto para estas navidades, siempre que seas fan del grupo… o no. Pero Txus da para mucho. Muchísimo. Hay un par de ejércitos enfrentados allí afuera: los que lo aman y los que lo detestan. Y es un tipo que siempre que habla sube el pan. El reconoce que peca de ser un poco bocazas, pero también ha sabido jugar con ello a lo largo de todos estos años. Jordi Tàrrega se reúne con él en el centro de Barcelona. Era nuestra primera entrevista en persona, pues hace años ya le hice una para Batería Total a la que no pude asistir. En esta nos pudimos conocer mejor, y os puedo asegurar que Txus es un tipo muy inteligente, alguien que ha tenido clarísimas las ideas desde el principio. Y todo lo que ha logrado no es fruto del azar. Pocas veces he disfrutado tanto con una entrevista. Creo que ambos disfrutamos de ella.

Bueno… la primera pregunta es más que obvia: Por qué un libro ahora? ¿Cierras una etapa, tenías tiempo…?

Tocaba. Pues mira… primero porque el año que viene hacemos 25 años . El grupo lo monté en 1988. Y luego por otra razón bastante estúpida… En nuestra web nuestra biografía no estaba terminada. Era algo que me daba mucha pereza. Aunque la gente no se lo crea, escribir a mi me da mucha pereza (risas).

Es verdad que cerramos una etapa con la marcha de José… Así que venía todo de puta madre. También te digo que el libro estaba pensado desde ya hace tiempo, mucho antes de que José dejara la banda, pero ya te digo que no es porque Jose ya no esté con nosotros. También había mucha gente que me preguntaba por los inicios de Mägo, y creo que era una buena opción ponerlo en un libro.

Yo creo que Txus ha sabido crear un personaje y este libro nos permite un poco conocerte un poquito más. No sé hasta que punto existe el Txus Di Fellatio y el Txus que está en su casa…

El otro día hubo una persona que me dijo, yo creo que muy acertadamente, que yo era un poco el Mourinho del heavy en España (risas). Porque Mourinho es amado  por los madridistas y es odiado por los que no son madridistas. Aunque también es cierto que hay algún fan que odia a Txus. Y la verdad es que ser fan de Mägo de Oz y odiar a Txus es una cosa un poco rara. No es que yo sea Mägo pero…

«Ser fan de Mägo de Oz y odiar a Txus es una cosa un poco rara. No es que yo sea Mägo pero…»

Pero se da, te lo puedo asegurar pues yo he conocido casos…

Sí que se da… ¡y ahora con más razón! “Txus se está cargando la banda…” ¿Tú eres gilipollas o qué? Tú crees que yo me voy a cargar la banda? Yo tomo decisiones. A veces acertadas a veces menos. Pero joder, mi intención no es cargarme la banda, al revés, mi intención es el disco que tenéis ahora en vuestras manos. Y creo que he acertado, aunque suene un poco sobrado.

Entonces cuando yo empecé con la banda quería llamar mucho la atención. Yo quería que Mägo de Oz se abriera paso, aparte de musicalmente Que ya era toda una novedad. Flautas, violines, óperas rock, Jesús en Chamberí… Aparte de todo eso quería abrirme paso a codazos y llamando mucho, mucho, mucho la atención. Porque creo sinceramente que mi alma es más rockera que heavy. Y el rock and roll es rebeldía, es mala educación. O sea, Keith Richards es más chulo y más bocazas que Steve Vai.

Vai es un músico de heavy, y Richards es más chulo y más callejero. Yo tengo más esa parte. Y entonces creé un personaje, porque yo soy mucho más sensible de lo que la gente se cree. Muchísimo más… A mi las cosas me duelen mucho. Así que me hice una coraza, ese personaje, Txus Di Fellatio, el cual no es impermeable. Hay muchos momentos, muchas noches, que uno se pregunta… ¿vale la pena todo esto? Porque a mi las críticas musicales nunca me han hecho daño. “El disco es una mierda, Mägo de Oz no me gusta…” Estupendo. Pero las críticas personales que la toman contigo…

Es que realmente ha habido momentos muy duros. Recuerdo años en los que en los foros de Internet y tal la gente soltaba mucha mierda…

Pero bueno… también es bueno….

Sí, eso es como la frase de Dalí: “que hablen de ti aunque sea para bien”…

Y también es bueno porque hay mucha gente desocupada… Si yo hago un bien social para que la gente gaste su tiempo… A ver: esto es música, y yo le quito la importancia que muchos le dan. A mi cuando no me gusta un músico, no gasto mi tiempo en foros criticando a X músico. No me gusta este músico… ¿Por qué hablan tanto de mi? Pues debo ser muy importante en sus vidas. Es algo que no me entra mucho en la cabeza.

Es toda una contradicción.

Sí. Soy un personaje atípico en el rock. Soy un chollo para muchos periodistas. También soy muy bocas, y me encanta…

Si es que la comparación de Mourinho… me ha gustado mucho.

Yo estoy convencido que me parezco bastante a él. Tengo amigos periodistas que le conocen y ya te dicen que no tiene nada que ver en persona. Es un poco trasladándolo al culé, un Stoichkov. Había el Stoichkov que pisaba al árbitro y que se cagaba en la madre de todos, y luego el Stoichkov padre de familia.

Bueno, es que hay este tipo de jugadores. Es un poco lo que hablas en tu libro sobre Cristiano Ronaldo. Hay jugadores que tienen un poco de Rockstar. Stoichkov, lo tenía, Guti lo tenía, Gerge Best… A quienes nos gusta el rock este tipo de jugadores nos gustan.

Bueno a ver… A mi Cristiano me gusta el rollito que tiene. Pero la verdad es que es muy tonto…”.

Es que yo soy de Messi.

¡Yo también soy de Messi! Para mi Messi está a años luz de Cristiano Ronaldo. De Ronaldo me gusta un poco el que le chillan y tal y de vez en cuando saca la chulería y dice: “Ahora os calláis”. Eso está bien. Pero la prepotencia fuera del campo que tiene este chaval no me gusta. Cuando suelta eso de que “la gente me envidia porque soy guapo, bueno y rico”… Oye chaval, vete a la mierda. Otra cosa era Beckham. Él era una estrella. Pero combinaba un poco de estrellita y un poco de humildad. Tienes que tener ese equilibrio. Messi es un grandísimo jugador, pero es un poquito Del Bosque. Es un poco gris…

Un poco seta (como dicen en Euskadi)

Sí, es un poco Iniesta. Pero escúchame, eso no es malo. Carlitos y Mohammed son de ese perfil. Cualquier grupo musical es como un equipo de futbol. Hay que gestionar los egos, los caracteres. Si todos fueran como Txus esto sería como Mötley Crüe o Twisted Sister.

Curiosamente mi próxima pregunta hace referencia a Mötley Crüe. Cuando supe que Txus sacaba un libro, enseguida pensé en que podía ser tipo “Los trapos sucios” de Mötley Crüe. Así que supongo que va a haber otro libro en un futuro.

Exacto, esta será la biografía sin censurar. Cuando quise empezar con el libro, Pere, el editor de Quarentena, me preguntó qué perfil íbamos a utilizar. Y yo sabía perfectamente a lo que él y muchos esperaban. Txus, una biografía: no va a dejar títere con cabeza. Pero es que esta biografía no es de Txus Di Fellatio, es de Jesús María Hernández. Y Jesús María no es tan provocador. Es más conciliador, más sensato… un poco bocazas también. Y no tengo ese filtro que tenéis algunas personas. A mi me sale del corazón. Y a veces cuando sale una palabra de mi boca pienso… ¡Ups! Se me ha escapado… Pero soy así, y no lo puedo evitar.

El día que tenga 80 años, o el día que me desahucien los médicos y me quede un año de vida, contaré la verdad. No es que en este libro no haya contado la verdad, pero sí que he contado el aspecto amable social. Aquí no he querido incidir en Jose, ni en nombres de famosas que han pasado por mi cama… Para empezar esto me parecería querer vender el libro por la polémica. Y Mägo de Oz es mucho más que polémica. He intentado poner la versión del Mägo de Oz musical.

Pero si en España hay una banda capaz de sacar un libro como el de Mötley Crüe, sois vosotros y pocos más.

Sí. Te aseguro que hemos hecho muchas. Te aseguro que hemos ido de Madrid a Alicante, en Heredades, jugándonos gramos de cocaína en la mano. Toda la banda y el conductor. Jugando como a los chinos. Éramos siete. Y cuando llegamos a Alicante ya no quedaba nada. Tuvimos que seguir jugando con monedas. Nos echaron del hotel. Rompimos unos lavabos y todo el pasillo del hotel estaba lleno de agua. Intentamos tocar cuatro o cinco años después y no nos dejaron.

Esa gira fue en los tiempos de “La Leyenda de la Mancha”. Entre ese disco y “Finisterra” éramos un grupo muy destroyer. Nos gustaba jugar. Nos sudaba la polla si tocábamos bien, si salíamos borrachos. Teníamos la posibilidad de responder a la pregunta: “¿Quieres vivir como Paul Stanley? ¡Sí!”. Lo que pasó luego es que con “Finisterra” vendimos  muchísimos discos, empezamos a salir en los 40 Principales, Cadena 100, discos multiplatino y entonces ya se acabó la diversión y empezó lo aburrido. Que es lo profesional.

Ahora de fiesta ya no somos ni la mitad de lo que fuimos. Primero por la edad, ya no nos aguanta el cuerpo. Y luego, porque si estás tocando, por ejemplo, en Las Ventas de Madrid… tienes que salir bien. Por eso Jose ya no está en la banda. No llegó a entender que había que parar. Y después del concierto… venga, lo que tú quieras. Pero antes  y durante el concierto hay que cuidarse.

Jordi Tárrega