Para muchos tenían toda la pinta de ser un “one hit wonder” versión rock and roll. Pero con el paso de los años y tras su propia implosión, le han probado a los incrédulos que eran una banda de verdad.

La vehemencia con la que The Darkness pusieron patas arriba el mundo del rock en 2003 no es fácilmente olvidable. Con una mezcla de estribillos, ego, falsete y una arrolladora maquinaria promocional, los británicos se colaron en todas partes con su primer disco, ‘Permission To Land’. Tanto aterrizaron que con el segundo disco, ‘One Way Ticket’, se habían estampado contra el aeropuerto. La banda desapareció momentáneamente y sus miembros montaron Stone Gods (los que no se llamaban Justin Hawkins) y Hot Leg (los que se llamaban Justin Hawkins).

El mundo ganó dos buenas bandas de rock, pero difícilmente podían reproducir el éxito que les dio The Darkness. Los tratamientos de rehabilitación para la cocaína hicieron su trabajo y en 2011 la banda se reunió incluyendo nuevamente al bajista clásico Frankie Poullain. Desde entonces, el grupo ha editado una ristra de buenos trabajos de estudio que nunca tendrán tantos oyentes como el primero pero que mantienen vivo aquello que crearon: una banda de hard rock cachondo y desenfadado capaz de llenar estadios aunque no lo hagan. El nuevo disco, ‘Motorheart’ sube de nivel y ofrece a un grupo luchando contra la frustración de la pandemia a base de creatividad y riffs. Hablamos con Frankie Poullain al respecto. 

Vuestro disco anterior, editado en 2019, se titulaba ‘Easter Is Cancelled’. Vuestro concierto fue uno de los últimos que vi justo antes de que nos confinasen, en febrero de 2020. Y de hecho, la pascua se canceló. Vaya si se canceló.

De hecho, uno de los titulares que puso “The Sun” cuando pasó todo esto fue justamente ese: “Easter is Cancelled”. 

Profético.

Eso es. Fuimos proféticos. La canción en sí, “Easter Is Cancelled”, habla sobre el colapso de la civilización occidental. A Justin Hawkins le gusta mucho usar la palabra ‘arseclown’ (ndr: algo así como “payaso del culo” en castellano). Sus palabras pueden parecer un poco infantiles pero me encanta que llame a Donald Trump con esa palabra. Es que es peor si lo intelectualizas. No merece ni eso. Es un ‘arseclown’, sin más. Y en esa canción, “Easter Is Cancelled”, Justin usa esa expresión: “the rise of the arseclowns” (ndr: “el ascenso de los payasos del culo” en español).

The Darkness Barcelona

The Darkness (Foto: Sergi Ramos)

¿Teníais el disco listo antes de la pandemia u os habéis pasado todo este tiempo trabajando en él?

El disco sale de la energía y la frustración de todo este tiempo y creo que se puede escuchar en la música. Empezamos a trabajar en él a mitad del confinamiento y la mayor parte se hizo remotamente. No obstante, Rufus, Dan y yo tuvimos una sesión de composición de tres días en el suroeste de Inglaterra. Más de la mitad del disco salió de esa sesión y esas jams. Al final ha sido un álbum como los de la vieja escuela: rápido, conciso y fruto del trabajo conjunto. Todos estábamos frustrados y queríamos rockear. No activamos nuestro cerebro en esas sesiones: simplemente rockeamos. Hicimos lo contrario de lo que hicimos con ‘Easter Is Cancelled’. Ese es el disco donde más hemos pensado en la música y en el concepto. Este nuevo trabajo es justo lo contrario.

‘Pinwood Smile’ y ‘Easter Is Cancelled’ me parecen dos discos algo menos directos o menos inspirados, si me permites. ‘Motorheart’ es muy directo y entra con facilidad. ¿Os da esa sensación en la banda?

Justin dijo en alguna entrevista que no nos hemos comprometido. Cuando los cuatro estamos en una misma habitación componiendo ocasionalmente comprometemos cosas, porque queremos que a todo el mundo le guste el disco. Pero en esta ocasión todo el mundo ha hecho lo que ha querido. Dan se puso muy proggy, y ahí tenemos cosas como el tema título, “Nobody Can See Me Cry”, “Eastbound”… Yo me involucré mucho con “Speed Of The Nite Time” intentando hacer el primer tema goth de The Darkness.

“Los grandes filósofos, los grandes pensadores, nunca sostuvieron que tuviesen la razón absoluta en ninguno de sus planteamientos. Las grandes personalidades se cuestionan” (Frankie Poullain)

Justin hizo cosas como “Jussy’s Girl”. Cuando escuchó la base de ese tema le encantó porque es muy fan del sonido del rock de estadios de los ’80. Aprendimos mucho de Def Leppard cuando giramos con ellos durante un par de meses en 2003. La calidez de ese sonido producido por Mutt Lange les dio un sonido especial. No soy su mayor fan, pero el sonido y las texturas son muy original. 

The Darkness siempre ha sido una banda que te hace sentir bien. La música rock se ha vuelto complicada con el paso de los años (afinaciones, estructuras, etc). ¿Son The Darkness la única gran “nueva” banda que sigue haciendo canciones fáciles?

En parte. En ocasiones hemos caído en esa trampa nosotros también, pero hemos encontrado la manera de ir navegando hacia adelante y evitar eso, principalmente gracias a la energía de Justin. Eso nos permite que las cosas sigan frescas en la banda. Nunca hemos tenido miedo al mal gusto. El enemigo no es el mal gusto. El enemigo es ser respetable y hacerlo todo bien y adecuado. Es bueno ir contra lo esperado, contra lo que hace todo el mundo. El buen gusto es buen gusto ahora, pero quizá caduca en un par de años. 

The Darkness Murcia

The Darkness (Foto: Beatriz Seiquer)

La tensión entre los hermanos Hawkins siempre ha sido de gran ayuda para la música de la formación. ¿Cuál es tu rol en el grupo? ¿Te consideras el John Deacon de The Darkness?

Soy tu tío raro en la comida familiar. 

El bigote así lo confirma.

Podría hablar sobre esto durante horas y hablar de la psicología de la familia y todo eso, pero no creo que la gente quiera analizarlo demasiado. No creo en las personalidades fijas o los arquetipos. Tenemos una buena química, nos alimentamos el uno del otro y en ocasiones nos volvemos locos unos a otros. Yo sé que les vuelvo locos con frecuencia. Puedo ser un tío algo difícil. Pero todos los somos a nuestra manera. Te diría que Rufus es el más fácil de llevar porque tiene un buen corazón y es un tío muy relajado y tranquilo. Es sorprendentemente inteligente y divertido. Todos los miembros de la banda tenemos mucha historia conjunta, pero lo importante es respetarnos unos a otros. 

En cuanto volvamos a girar, vamos a divertirnos mucho. Somos una banda divertida. No nos importa ser un poco extraños en ocasiones, porque eso es lo que nos estimula como banda. Tenemos que darnos cosas nuevas y estimulantes de vez en cuando. 

El éxito llegó muy pronto para The Darkness. ¿Fue una suerte o una desgracia?

Creo que podría haber sido justo lo contrario. Podríamos haber firmado por un sello indie y tener un desarrollo muy lento y sostenido. Todo sucedió porque tuvimos una canción gigante. Hoy leí un artículo donde nos llamaban “la banda de ‘I Believe In a Thing Called Love’”, en lugar de The Darkness. Imagina eso (risas). Si quieres decir quiénes somos y que alguien lo reconozca es más fácil sacar el título de aquella canción que decir nuestro nombre. El tema es que podría haber ido todo de otra manera de no haber tenido esa canción. Podríamos haber sido una banda independiente que crece lentamente, orgánicamente y quizá se hace grande tras veinte años. Pero si eso hubiese sido así quizá no seguiríamos juntos. 

The Darkness Murcia

The Darkness (Foto: Jesús Martínez)

Nosotros exigíamos reconocimiento desde el principio y las cosas pasan por algún motivo. El motivo fue que estábamos tan hambrientos y nos esforzamos tanto en los diez años previos a The Darkness que lo manifestamos e hicimos que las cosas tomasen esa ruta. O quizá tan solo tuvimos suerte. No sabría decirte.

The Darkness fue la última gran banda de rock con mainstream, portadas, cobertura masiva y demás. La industria estaba en pleno cambio y poco después ya nada fue lo mismo. ¿Te sorprendió cuando gente como Brian May o Malcolm Young se declaraban seguidores de la banda al poco de editar vuestro primer disco? 

Era surrealista. Hubo momentos en los que sentía que estaba en un universo paralelo. Todo era muy extraño. Creo que nosotros mismos manifestamos esa realidad y por eso las cosas terminaron pasando. ¿Sabes aquello de “ten cuidado con lo que deseas porque se puede hacer realidad”? Pues eso. 

Justin solía bromear sobre la banda teniendo que tomar un helicóptero para llegar a un show y en 2003 lo estábamos teniendo que hacer para llegar al festival de Glastonbury. También hemos grabado videos en las montañas de Australia con helicópteros volando en círculos a nuestro alrededor -algo que ahora se podría solventar usando unos drones. El video de “Love Is Only A Feeling” costó una pasta. Si hubiésemos usado drones aquello habría costado una décima parte (risas). 

¿Qué te permitió el éxito de The Darkness? Hay bandas que toman decisiones nefastas cuando tienen éxito. ¿Puedes vivir cómodamente?

Tienes razón. Lo que nos permitió fue tener la capacidad de cometer errores y a la vez nos proporcionó una red de seguridad con la que poder cometer errores. Todos cometimos errores. Hicimos cosas mal. Perdimos el contacto unos con otros. Nos creímos más importantes unos que otros. A la vez, la industria discográfica estaba colapsando a nuestro alrededor. Fue bueno darnos unos años para poner nuestra cabeza en orden, reconsiderarlo todo y volver a la carga con absoluto control creativo. Y en esta ocasión como amigos.

The Darkness Madrid

The Darkness (Foto: Daniel Cruz)

¿Cómo veías a The Darkness desde fuera cuando saliste de la banda durante seis años? ¿Con nostalgia o con alivio?

Una mezcla de todo. Fue extraño. Yo no me fui de la banda. A mí me echaron. Pero los chicos quisieron decir que me había ido porque legalmente les ayudaba. En algunos momentos pienso que fue una bendición porque no era divertido estar alrededor nuestro cuando estuvimos girando para el segundo ábum. Por entonces me sentí herido pero, a la vez, reconocí que no me llevaba bien con el management y que no tenía mis cosas en orden. No tenía la confianza necesaria en mí. Creo que los chicos se cansaron de que yo siempre cuestionase todo. Pensaban que era cínico, pero cuestionaba todo creativamente y al final puedes hacerte un poco impertinente.

Al final eras el miembro más mayor de la banda. 

Eso es. Nuestras personalidades se vieron exageradas y amplificadas por nuestras fobias e inseguridades. Todo se magnifica en una situación como esa. Lo que necesitas en un caso así es un buen liderazgo. Nuestro management estaba desorganizado, nuestra discográfica estaba desorganizada, había cocaína por todas partes y, si piensas en ello, es casi como un experimento de química. Pon todos esos elementos a cocinarse y habría sido una sorpresa que no nos explotase todo en la cara como hizo. No tiene mucho misterio lo que pasó. Que nos tomásemos algo de tiempo para lamernos las heridas e hiciéramos proyectos en solitario vino muy bien para volver con ganas. Quizá el primer material que editamos no fue el mejor. El disco de reunión podría haber sido mejor. Tampoco teníamos un buen management en la época de ‘Hot Cakes’ y el disco no es el mejor que hemos hecho.

En aquel momento, en 2012, girasteis con Lady Gaga. Si una banda de rock podía girar con Lady Gaga y salir indemne, era The Darkness. ¿Cómo surgió esa gira?

Fue una gran experiencia. No fue algo desesperado, sino que nos pareció un buen principio para agrandar nuestro mercado e ir a algunos sitios por primera vez como Latinoamerica o algunas partes de África. Fue una gran oportunidad para mejorar nuestra habilidad como tenistas, ya que tuvimos muchos días de descanso entre conciertos y los dedicábamos a eso esencialmente. 

The Darkness Madrid

The Darkness (Foto: Daniel Cruz)

Algunos “little monsters” empezaron a seguirnos por entonces y nos siguen todavía a día de hoy. Alguien dijo cínicamente en aquel entonces que la gira con Lady Gaga era un gran anuncio en referencia a que como anuncio quedaba muy bien a efectos publicitarios. Y solo por aquel anuncio, solo por la prensa que generó, ya mereció la pena hacer la gira.

Yo lo vi como una oportunidad para salir de nuestra zona de confort. Grabamos un tema como “Rock And Roll Deserves To Die” precisamente sobre esto: si no sales de tu zona de confort no creces. No puedes seguir eternamente rehaciendo el pasado como género musical. La clave reside en salir de tu espacio, de tu zona de confort. Ningún gran arte se gestó en la zona de confort.

Predicar a los conversos no te hace crecer, evidentemente. Y es justo lo que hace el rock. The Darkness hicieron a mucha gente sumarse a la fiesta en 2003. Por el motivo que fuese, por la voz, por los estribillos, por lo que sea. ¿Qué bandas te motivan a ti a día de hoy? 

Wow… no suelo escuchar rock and roll en casa. Me gusta escucharlo en directo. Me gusta ir a clubs y escuchar a bandas. En casa escucho música clásica mayormente. Recientemente fui a ver a Massive Wagons, que es la banda que nos telonea en nuestra gira británica. Tenían que ser British Lion, pero tuvieron que descolgarse del tour. Massive Wagons es una banda inglesa de rock and roll setentero con grandes estribillos. Son buenos y tengo ganas de que toquen con nosotros en UK. 

La logística se ha convertido en una tocada de cojones. Estábamos en Australia cuando comenzó la pandemia y tuvimos que cortar la gira por la mitad porque teníamos que volver urgentemente a casa. Australia es el país donde menos dinero ganas -si ganas algo- por las distancias. Al final conseguimos recuperar algo de la aseguradora, pero es un proceso largo y complejo para conseguirlo. Gracias a nuestro fantástico management lo conseguimos.

“Nos esforzamos tanto en los diez años previos a The Darkness que lo manifestamos e hicimos que las cosas tomasen esa ruta. O quizá tan solo tuvimos suerte. No sabría decirte” (Frankie Poullain) 

En cuanto a Europa… es muy complicado trabajar en Europa ahora. Su trabajo es que nosotros no tengamos que lidiar con todos los problemas logísticos, pero habrá momentos en los que tengamos que salir del autobús a las 3:00h de la mañana porque estamos en la frontera con algún país y tenemos que presentar algún certificado. También creo que todo ahora será más caro y ganaremos menos dinero -aunque espero que ganemos algo. Tras Europa creo que anunciaremos una gira americana y espero que salga adelante. América también nos dará muchos problemas logísticos, pero nosotros somos músicos y tenemos que centrarnos en lo que pasa sobre el escenario.

The Darkness Barcelona

The Darkness (Foto: Sergi Ramos)

Haremos todo igual pero con menos contacto físico. Haremos subir a alguien al escenario para cantar un tema con nosotros y cosas así. No vamos a cambiar nada. 

¿Qué es lo que más te molesta en la vida?

Cuando alguien te pregunta algo así tienes que pensar en qué parte de tu público vas a incomodar. No puedo hablar ni de religión, ni la comunidad new-age ni las teorías de la conspiración. Pero lo que puedo decir es… “faux knowledge” (falso conocimiento). Hay mucho de eso actualmente. Las madrigueras de conejos y las cámaras de eco donde la gente se mete fomentan eso. Lo encuentro triste. Y encuentro triste que, debido a la pandemia, la gente haya ido a buscar cobijo en esas madrigueras de conejo para llenarse de falso conocimiento.

Está bien explorar y divertirse con el conocimiento. En los años ’70 había programas de debate en la televisión. Hoy en día es imposible pensar en ese formato porque la gente está tan llena de opiniones, se ofende tan rápido y tiene tanta ira y seguridad de que tiene la razón que es imposible debatir nada.

Los grandes filósofos, los grandes pensadores, nunca sostuvieron que tuviesen la razón absoluta en ninguno de sus planteamientos. Las grandes personalidades se cuestionan. Van Gogh se cuestionaba continuamente. Estaba lleno de preguntas, ansiedad por conocer… en las cartas a su hermano Phil se lo cuestiona todo, no intenta aplastar con sus dogmas a nadie. En cualquier caso, eso es lo que más me molesta. No me importa que la gente discuta y opine y cuestione. Me molesta que piensen que tienen siempre la razón.

Sergi Ramos