Han venido desde Australia a llevarse por delante el mundo del metalcore y lo están consiguiendo. Con el segundo disco, titulado ‘The Death Of Me’, Polaris cogen todo lo que han aprendido en este último par de años y lo comparten con el mundo.

Salir de la misma tierra que Parkway Drive tiene más sentido para la generación de jóvenes músicos de metal que decir que vienen de la tierra de AC/DC. Un signo de los tiempos y una muestra indudable de la imparable renovación de lo que conocemos como música dura. Polaris son el ejemplo más reciente de cómo la música más bruta (Anthrax o Megadeth eran AOR a su lado) puede triunfar, llegar a grandes recintos y conquistar grandes masas de gente.

El ascenso de la banda en los últimos cuatro años ha sido increíbles. ¿Cuales crees que han sido las principales razones para ello?

Hemos tenido suerte de tener ese crecimiento. Tengo que decir que hemos tenido algunas grandes oportunidades por parte de bandas a las que respetábamos mucho, especialmente Architects y Parkway Drive. Ellos nos metieron en un par de giras realmente enormes en los últimos dos años y eso nos ha hecho alcanzar a mucha gente nueva. En general creo que tuvimos el disco idóneo como debut y simplemente hemos estado girando por todos los sitios que hemos podido y hemos vuelto a los sitios donde la gente tenía muchas ganas de volver a vernos. Intentamos darle a la gente algo que recordar y hacer el mejor show que sabemos hacer. Venir desde la escena Australiana y meternos en mercado internacional es un gran reto debido a la distancia pero también tiene sus ventajas. En Australia, el metalcore es un género muy respetado porque hemos exportado a algunas grandes bandas de ese estilo, pero al final es una comunidad muy pequeña así que en cuanto las bandas comienzan a crecer es fácil hacerse grandes en el propio país. Tuvimos suerte de crecer en una escena que tiene unos cimientos muy firmes en nuestro país y eso nos ha generado una serie de oportunidades. Ahora mismo, el mundo parece muy excitado acerca de la música que viene de Australia gracias a Parkway Drive, Northlane, The Amity Affliction y Thy Art is Murder y eso significa que hay una cierta apertura para bandas como nosotros. Es un buen momento para hacer lo que estamos haciendo, vaya.

¿Cuál es el mayor reto que habéis encontrado a la hora de innovar o renovar un género como el metalcore?

Es bueno escuchar que la gente ha encontrado algo distinto en nuestra música, sea lo que sea. El mayor reto viene dado porque todo aquello que crees que puedes hacer dentro del metalcore parece que ya se ha hecho antes. Una vez entiendes las líneas que definen el género es fácil componer otra canción de metalcore pero eso no quiere decir que sea excitante o interesante. Por otra parte puedes observar cómo ciertas bandas reciben presión de los fans por alejarse demasiado de lo que entienden que debe ser el metalcore. Siempre hemos intentado ignorar eso y no encasillarnos en un sonido determinado -aunque somos conscientes de ser una banda de metalcore. Creo que todas nuestras influencias externas brillan en este disco y en nuestra música.

«hemos intentado no encasillarnos en un sonido determinado»

¿Qué es lo más importante que aprendisteis de una gran gira como la que hicisteis con Architects?

Hemos podido observar de cerca todo lo que implica hacer un show a gran escala noche tras noche – la importancia de tener un buen crew y trabajar con una agenda muy ajustada. También hemos podido observar como una buena producción y un diseño de luces imaginativo puede mejorar un show. Architects es una banda muy humilde y trata a todas las bandas que giran con ellos con gran respeto y eso es algo a tener muy en cuenta cuando operas a ese nivel.

¿Cuál fue tu show favorito de la gira que hicisteis con ellos?

Hubo muchos shows especiales en esa gira pero el de Bilbao fue uno de los mejores: nunca he visto cantar a la gente con esa energía. No puedo obviar el show del Wembley Arena de Londres. Creo que sigue siendo el show más enorme que hemos tocado y, además, es un recinto absolutamente icónico. Creo que ese fue el único show de toda la gira en el que nos pusimos nerviosos. Es como si las dos primeras semanas de la gira hubiesen sido un ensayo para ese enorme concierto. Podíamos notar la electricidad entre el público antes de salir a tocar. Tal como salimos y empezamos a tocar “The Remedy” aquello explotó y no había quién lo parase. Nos mirábamos los unos a los otros como diciendo “¿está pasando esto de verdad?”. De golpe y porrazo se acabó y respiramos aliviados de no haberla cagado en todo el concierto (risas).

«el de Bilbao fue uno de los mejores conciertos de la gira»

polaris bilbao 2019

Polaris (Foto: Aritz Sola)

Una de las canciones que presentasteis en vuestros recientes shows australianos fue la nueva “Hypermania”. ¿Cómo reaccionó el público? ¿Ha tenido eso algo que ver en escogerla como single?

Supimos desde el principio que “Hypermania” iba a ser un tema divertido para el directo y uno que movería a la gente. Una vez la comenzamos a tocar en Australia fue cuestión de días que la gente empezase a pedir que la editásemos oficialmente, aunque aún faltaban algunos meses para la salida del disco. Viendo que la gente estaba a tope con la canción nos reafirmamos en que era el single ideal para el disco.

¿Qué es lo más difícil de grabar un disco de Polaris?

Este disco nos ha supuesto retos que no nos habíamos encontrado hasta ahora. El primero y el principal es trabajar alrededor de un ciclo de gira muy exigente como el que hemos tenido con el disco anterior. Había mucho por componer cuando llegamos al estudio y todavía estuvimos editando canciones hasta casi el final de la grabación. Lo más complicado suele ser que todo el mundo esté contento en la banda, ya que todos tenemos fuertes opiniones acerca de la dirección de las canciones y no siempre estamos de acuerdo en todo, lo que puede ralentizar los procesos. También hubo algunos duros períodos de bloqueo a la hora de componer, donde nadie tenía ideas o se sentía confiado sobre sus canciones. Llevó bastante trabajo y perseverancia ensamblar este disco y estoy orgulloso de que lo hayamos conseguido.

Sergi Ramos