La cancelación del Doctor Music Festival hizo que Opeth, que tenía previsto actuar en el festival catalán, tuviera unos días libres. Por este motivo y por la salida de su nuevo trabajo de estudio, 'In Cauda Venenum', nos fuimos a Alemania con Mikael Åkerfeldt y Martín Méndez y estuvimos hablando con ellos acerca de este nuevo lanzamiento y de la escena progresiva.

Lanzáis vuestro nuevo álbum ‘In Cauda Venenum’, un disco que tiene canciones muy diferentes entre ellas. ¿Qué es lo que habéis tratado de transmitir a vuestros aficionados con este trabajo compuesto por temas tan diversos?

Mikael: No te sabría decir. No podría calificarte cuál o cómo es el fan de Opeth a día de hoy, qué edad o qué aspecto tiene, no tengo ni idea. Siempre he creído en la diversidad en la música tanto para el crecimiento personal como músico como a la hora de escuchar distinta variedad. También creo que es una manera de llegar a más gente. Tenemos bastantes ejemplos a lo largo de nuestra carrera de gente que no nos escuchaba al principio porque tocábamos death metal y nos empezaron a seguir porque teníamos otro tipo de composiciones aparte. Para nosotros la opinión de los fans… a ver, es importante, no puedo decir que no lo es, pero no escribimos las canciones para los aficionados. Queremos a nuestros seguidores de manera incondicional, no obstante sería destructivo para nosotros crear nuestra música en función a lo que los fans quieren.

Mikael Åkerfeldt Opeth

¿Qué tipo de dirección musical habéis tratado de llevar con este trabajo? Porque si hacemos un repaso de vuestra trayectoria, no tiene nada que ver con respecto a vuestro debut.

Mikael: Las influencias que tuvimos al principio provenían del death metal, mientras que en este disco no ha tenido nada que ver. Me gusta decir que para responder una pregunta como esta tengo que simplificar la contestación, porque la correcta sería demasiado larga y compleja; cuando alguien me pregunta: “¿qué tipo de música tocas?”, mi respuesta es rock y nada más.

Martín: Es difícil decirlo, creo que nuestra música refleja lo que queremos hacer en cada momento. Catalogar lo que hacemos es complicado, simplemente mostramos lo que fluye entre nosotros.

En “Heart In Hand”, Martín, hubo alguna que otra “sorpresa” durante la grabación del bajo, ¿qué pasó exactamente?

Martín: Estaba en el estudio y el bajo no debía estar en las mejores condiciones posibles (risas). Entonces, mientras tocaba sonó un ruido raro y no sé qué pasó, pero está ahí.

Mikael: En cualquier situación eso sería algo por lo que lamentarse, pero cuando sucedió todos nos emocionamos al escucharlo ya que fue un momento de creación inesperado e irrepetible. No puedes llevar algo así preparado al estudio, y cuando ocurrió lo único que se podía decir era: “gracias” (risas). Fue perfecto, y no hubo dudas acerca de incluirlo en el álbum

El disco está para el mercado internacional pero también está en sueco, ¿cómo llegaste a la conclusión de hacerlo en ambos idiomas, Mikael?

Mikael: Voy a ser honesto. A la hora de componer un disco, suelo tener la idea previa de cómo va a ser, y en su momento pensé que estaría bien hacer un álbum en sueco y desde ahí salió hacia delante la idea. Este es el trabajo más largo que hemos hecho con 68 minutos de duración que es algo destacable, y el tema del idioma al fin y al cabo fue una decisión musical. El sueco es mi lengua natal, y eso se nota, para Martín (uruguayo) componer en español sería totalmente distinto a hacerlo en inglés, por lo que las letras son muy diferentes a lo que había realizado anteriormente en inglés. Creo que de esta manera es más divertido y se puede obtener un tono más sarcástico respecto a lo ya publicado.

“Me guío por las emociones. Si no siento algo de lo que compongo, es inútil”

Ahora que te has lanzado con el sueco, al tener un compañero hispanoparlante en la banda como es el caso de Martín, ¿te la jugarías con uno en español?

Mikael: Mi pronunciación no sería muy buena (risas).

A título personal, Mikael, ¿es más especial para ti en sueco o en inglés?

Mikael: En sueco. Fue la idea original además. El hecho de publicarlo también en inglés ha sido algo posterior, pero el concepto original con el que comenzó a gestarse este trabajo fue el de un disco en sueco.

¿Esto hará que en el futuro quieras lanzar un álbum en sueco en exclusiva? Porque en el mercado internacional eso puede quizás lastrar su difusión al no compartir una lengua que sea común en más sitios.

Mikael: No sé. Hemos abierto esa puerta. Somos una banda conocida en Suecia, pero tampoco tenemos un nombre de unas dimensiones extraordinarias. Al no ser un grupo tan grande eso no sería tampoco un problema tan remarcable El sueco no es como el francés o el español que se puede entender en otras partes del mundo, se habla en Suecia y nada más. No lo hemos hecho antes, pero nunca se sabe lo que puede pasar en el futuro.

Martín: El hecho de que haya sido compuesto en sueco este ‘In Cauda Venenum’ también le da un toque especial a este disco, y eso es importante también.

Martín Méndez Opeth

En declaraciones anteriores habías dicho que con este trabajo no querías hacer el álbum más duro de Opeth, sino simplemente un disco más…

Mikael: Ya no recuerdo ni lo que he dicho (risas). Depende lo que definas como duro, porque la mayoría de gente en el mundo del metal lo asocia a los guturales. Hemos hecho álbumes también de ese estilo. La dureza se puede relacionar no solo con eso, sino también con el concepto que puedan llevar detrás las letras, los arreglos instrumentales (pese a que no estén distorsionados)… aquí no predominan esos elementos clásicos por los cuales se supone que un disco es más heavy. No se puede comparar este álbum a uno de Meshuggah, por ponerte un ejemplo. Del mismo modo, puedo cambiar mi opinión sobre lo que es más duro porque la escena no se reduce a un espacio concreto, sino que se va redefiniendo con el tiempo.

Has definido antes la música que compones como rock, pero la gente, aunque depende de cada disco por sus influencias, os define como progresivo, ya sea más deathmetalero en algunos casos o más rockero en otros. En la escena del prog hay un público fiel pero no precisamente abrumador o cuantioso. ¿Creéis que eso se podría revertir y que se incrementara la cantidad de público de este estilo?

Mikael: Creo que siempre va a estar en un grado inferior porque no es fácil pillarle el rollo a este tipo de música. Lleva tiempo entender por qué escuchar esta música. A la gente de todo el mundo le gusta la música, pero el progresivo conlleva un trabajo de asimilación grande que no se puede llevar a cabo en una única escucha por todos los elementos que contiene. Solo hay unos pocos grupos que han logrado un nivel de popularidad superlativo dentro del prog como han sido Tool, Rush… y nuestro destino no es ser la banda más grande del mundo nunca.

Opeth Mikael Åkerfeldt Martín Méndez

“Puede haber alguien más grande que nosotros, pero nunca se nos podrá reemplazar”

Martín: Te digo una cosa: nuestros fans son muy entregados a nosotros, y prefiero algo así que por ejemplo tener seguidores más casuales como Metallica que a lo mejor solo se saben el “Nothing Else Matters”.

Mikael: Creo que nuestros aficionados están interesados por lo que es la música general, son “music lovers”… espero que ese sea el caso (risas). Sería el caso porque nuestra música no es fácil de asimilar y escuchar y para que te guste has de hacer ese esfuerzo. Si eres diferente, que es en lo que creo que podemos destacar respecto a otros grupos, el éxito va de una manera distinta. Puede haber alguien más grande que nosotros, pero nunca se nos podrá reemplazar.

A raíz de lo que has dicho Mikael, ¿crees el progresivo es un género destinado a un público más inteligente?

Mikael: No. Es algo que se dice muchas veces, pero no creo que sea así. No pienso que el nivel intelectual esté relacionado con la música de esa manera. Hay un coeficiente intelectual y uno emocional, y cada persona obtiene sus estímulos de una manera diferente. Nuestra música no pretende ir dedicada a un público inteligente. El hecho de hacer una música muy elaborada no quiere decir que su destinatario sea alguien intelectual. Veo estas conexiones porque no soy particularmente muy inteligente (risas). Me guío por las emociones. Si no siento algo de lo que compongo, es inútil.

Y, con este álbum, ¿cuáles son vuestros objetivos principales para el futuro? Girar, salas más grandes…

Mikael: No diría exactamente en salas más grandes, pero sí que nos gustaría presentarnos en recintos clásicos de cada lugar al que vayamos. No tienen por qué ser grandes, sino ser teatros o salas que estén bien. Hemos tocado ya en recintos de esta índole previamente como en el Olympia en París (Francia), el Teatro Apolo de Harlem (Nueva York), el Opera House de Sídney (Australia), el Royal Albert Hall de Londres (Inglaterra), el Massey Hall de Toronto (Canadá) y algunos de estos bonitos lugares. No es necesario que sean grandes sitios, de hecho hay otros más pequeños donde el público puede estar más compacto. No tenemos ningún plan en especial de dominación mundial en ese sentido, es algo más destinado a presentar nuestro disco para nuestros fans.

Dani Bueno