Leaves’ Eyes: lo que sucede cuando confinas a vikingos

Si tu disco se queda encerrado en las tiendas, pues lo vuelves a editar al año siguiente y aquí no pasa nada. La solución de Leaves’ Eyes a la mala suerte pandémica.

El último año y medio ha sido rocambolesco, pero nunca tan rocambolesco como editar tu nuevo disco cuando abren las tiendas, que se vuelva a confinar a todo el mundo y tus discos queden atrapados en las tiendas y no puedas obtener tu preciado Top 10 en las listas alemanas. Eso es lo que le pasó a Leaves’ Eyes con la edición de ‘The Last Viking’, un trabajo que ha sido muy celebrado por los fans y que reafirma la capacidad de la banda de Alex Krull y Elena Siirala para anteponerse a los problemas.

Para darle nueva vida a aquel trabajo mientras terminan de volver los conciertos, la banda pone ahora en circulación una edición ‘Midsummer’ que contiene el disco junto al documental “Viking Spirit” en Blu-Ray traducido a varios idiomas -entre ellos el español-. El documental, asimismo, añade un nuevo capítulo sobre armas vikingas, uno de los fetiches de Krull sobre el que posee enorme conocimiento.

¿Cómo habéis vivido los acontecimientos del último año en Leaves’ Eyes?

Como banda nunca hemos tenido tendencia a rendirnos, pero la situación es alarmante para todas las bandas, no solamente Leaves’ Eyes. Recuerdo bien cómo empezó la situación. Empezamos el 2020 con el 70.000 Tons of Metal y pensamos “qué gran manera de empezar el año”. Teníamos un montón de planes para ir al estudio y grabar y muchos conciertos… pero arrancó la pandemia y nos encerramos en el estudio durante el confinamiento para grabar ‘The Last Viking’. Podemos decir que sacamos lo mejor de la situación. Teníamos que mantenernos juntos para mantener el espíritu positivo y eso fue muy bueno para la armonía interna de la banda. Al menos pudimos pasar un momento tan duro juntos y volcarlo en música. 

“Podríamos haber llegado a un Top 5 en Alemania de no haber sido por todo esto. Fue muy frustrante. Llamamos a la autoridad que gestiona las listas de ventas y nos decían que, aunque se hayan vendido, si no se entregan no cuentan como vendidos. Fue terrible”

Lo malo han sido los retrasos, las cancelaciones y los aplazamientos. No podíamos ver a nuestros fans y teníamos un nuevo disco en la calle. Era descorazonador. De hecho, el primer show que hemos hecho después del 70.000 Tons of Metal fue el fin de semana pasado. Pudimos hacer un concierto de presentación de la versión ‘Midsummer’ de ‘The Last Viking’ y fue un subidón. Aun así, la situación sigue siendo muy variable con la música en directo. Tocamos ante unas mil personas acompañados por Orden Ogan y nos supuso la vuelta a la vida sobre las tablas. Sobre el escenario estaba preguntándome “¿está pasado esto de verdad?”. 

El mismo día supimos que vuelve a haber problemas de entrega con los discos en Europa debido a las restricciones y problemas en las fábricas. No sé si habías escuchado hablar de los problemas que hay con los vinilos y todo eso. 

Sí, estaba al tanto.

Ahora está comenzando a pasar con los CDs y los blu-ray. Comienza a ser un deja-vu del año pasado, cuando editamos la primera versión del disco y comenzó a haber problemas de suministro. Eso causó muchos retrasos sumado a que muchas tiendas estaban cerradas. Pese a ello, solo con la preventa el disco llegó al número 6 en Alemania -aunque no se pudo entregar en las tiendas debido a la problemática del coronavirus. Los almacenes no podían trabajar.

Leaves’ Eyes (Foto: Stefan Heilemann)

Podríamos haber llegado a un Top 5 en Alemania de no haber sido por todo esto. Fue muy frustrante. Llamamos a la autoridad que gestiona las listas de ventas y nos decían que, aunque se hayan vendido, si no se entregan no cuentan como vendidos. Fue terrible. Claro que si lo comparas con las situaciones de vida o muerte que se han vivido en este tiempo, lo nuestro es una chorrada. Pero como banda ha sido difícil de gestionar.

Las giras siguen sin acabar de arrancar. Tenemos fechas cerradas para España y te lo puedo confirmar ya, pero no las hemos anunciado todavía a la espera de ver qué pasa en tu país. Tenemos que ir con cautela. No todas las restricciones han sido eliminadas en los clubs. El show que hicimos en Alemania fue parte de un proyecto del estado de Renania-Westfalia para evaluar el efecto de los conciertos en la incidencia del virus. Venía apoyado por el Estado, vaya. Solo podíamos meter un tercio del aforo. En los clubs las restricciones siguen siendo potentes. Para una banda que debe ir conectando shows en la carretera, es muy complejo. 

Muchos discos del año pasado vendieron menos de lo previsto. ¿Es esta edición ‘Midsummer’ una manera de darle segunda vida a ‘The Last Viking’ y cubrir el desaguisado?

Uno de los principales motivos fue la inclusión del blu-ray “Viking Spirit”. Ahora lo tenemos traducido al alemán, al español, al francés y a otros idiomas. Ese fue uno de los principales motivos para hacer una edición extra. Y, como dices, para la discográfica esto es una nueva oportunidad para darle vida al disco. Cuando el disco salió, en esa misma semana, nos levantaron el confinamiento en Alemania. Y luego volvieron a cerrar. Nuestro álbum quedó confinado en las tiendas (risas). Todos los discos entregados quedaron bloqueados dentro de las tiendas cerradas.

La discográfica me comenta que, pese a todos los problemas, seguimos siendo una de las bandas que más venden para ellos, así que ha sido exitoso. La ‘Midsummer Edition’, como su propio nombre indica, estaba prevista para verano. Los retrasos nos han llevado hasta septiembre de este año y finalmente se editará a últimos de octubre. 

¿Cómo ha afectado todo esto a los cachés de Leaves’ Eyes? Al haber muchas bandas girando en 2022 hay mucha más competencia y, debido a la incerteza de las restricciones, muchos promotores intentan bajar lo que le pagan a los artistas. ¿Cómo está afectando esto al grupo?

Nuestros contratos y cachés se han mantenido tal y como estaban. Pero a la hora de hacer nuevos shows todo recae en manos del agente. Si algo es muy arriesgado o hay muchas restricciones, hemos de valorarlo. No podemos hacer una gira ahora. Podemos hacer un fin de semana con dos o tres shows. Salir un mes de gira con todas las restricciones que hay es una locura ahora. Los costes se mantienen igual: bus, crew, etc. Tenemos que tener cierta confianza para que una gira pueda salir adelante.

Nuestro bajista es italiano, tenemos a miembros holandeses, otros son alemanes y viven a cinco horas de nosotros, nuestra crew tiene miembros de Ucrania… si tenemos que movilizar a esa gente desde todo el continente no podemos jugárnosla. Una banda podría quedar en bancarrota por una mala gira. 

¿Estáis preparando el nuevo disco ya?

Estamos componiendo de manera constante. Ahora estamos trabajando en el nuevo disco de Atrocity, pues el equipo es el mismo. Acabaremos pronto y lo intentaremos editar cuanto antes. Leaves’ Eyes está dando los toques a la gira. Si el tour se cancelase o hubiese menos shows, tenemos muchos compromisos pendientes de ejecutar: Rusia estaba aplazada, México estaba aplazado, USA estaba en los planes… otros países como Japón o Australia también quieren que vayamos, aunque no creo que podamos hacerlo ahora. Nos pondríamos a grabar un nuevo álbum si la cosa se pusiese fea.

Leaves’ Eyes (Foto: Stefan Heilemann)

¿Ha habido un gran crecimiento del streaming para Leaves Eyes’ durante la pandemia?

Sí, lo ha habido. El sello me lo estuvo explicando. La gente que estaba acostumbrada a ir a la tienda y comprar un CD se ha terminado pasando al streaming para consumir música. Ha sido un gran cambio para todo el mundo. Lo que no sé es cómo se está gestionando para que los sellos y los artistas queden beneficiados de este crecimiento. Los que más ganan con todo esto al final son los grandes jugadores, YouTube y compañía. El artista no ve demasiado.

Para nosotros lo ideal es que la gente entre en contacto con nuestra música, pero veo complicado que las cosas mejoren para los músicos si no hay un movimiento de tipo sindical o un lobby que apoye nuestros derechos y reclame lo que merecemos. Somos músicos, queremos hacer nuestro arte y si no hay un lobby que proteja nuestros intereses de las dinámicas del mercado, estamos en mala posición. Cuando eres una artista, estás en esto porque es tu vida, tu pasión. Nunca he comenzado una banda por el dinero, nunca he pensado en términos económicos. Compongo con el corazón. Soy un artista. Es lo que hago.