El proyecto “QuaranTake Over” que estamos llevando a cabo en Instagram The Metal Circus y Metal Hammer España está dando lugar a varias charlas muy interesantes, y esta con Javier Cardoso es probablemente la más profunda que se ha podido ver hasta el momento.

Javier Cardoso, líder de Drago, nuevo grupo que por fin ha podido sacar su álbum debut (‘Vórtice’) este año, habló en esta entrevista en directo a través del Instagram de @themetalcircus y su cuenta personal de cómo ha evolucionado la banda desde su origen, dio detalles sobre el concepto de su primer trabajo de estudio y también habló de sus sentimientos acerca de todo lo sucedido con Vita Imana.

En primer lugar, ¿cómo estás?

Estupendamente, mejor que nunca. He estado muchos años yendo y viniendo y ahora toca una etapa de estabilidad económica y laboral que ya he conseguido hace un tiempo y viene muy bien, es el fruto de muchos años.

Drago, el nuevo proyecto de Javier Cardoso

A Drago os ha pillado la pandemia justo después de publicar vuestro debut e imagino tendríais fechas ya cerradas. ¿Cómo os ha afectado la crisis del Covid-19?

Nos pilló al inicio de presentar ‘Vórtice’, dimos 4 conciertos y tuvimos que parar como todo el mundo. Nos repercute en que tenemos muchas ganas de tocar y defender el disco y nos hemos visto frenados de repente. Como se suele decir, no hay mal que por bien no venga y hemos aprovechado para componer. A día de hoy tenemos mucho material, algunos temas ya con letra, pero aún no hemos podido ensayar todos juntos por la situación que hay. En ese sentido nos ha venido bastante bien porque hemos estado muy creativos, pero nos quita el gusto de tocar el directo.

¿Gracias a esto es posible que haya otro disco este año o tendremos que esperar al que viene?

‘Vórtice’ es aún muy joven. Las bandas suelen sacar un disco cada dos años aproximadamente, esto va rápido. Pero aún vamos a darle más promoción a ‘Vórtice’. Hicimos un par de versiones, como una de Korn que nos quedó muy chula y vamos a hacer otra más. El año que viene lo vamos a dedicar a una sorpresa que todavía no podemos desvelar, una pequeña hora que vamos a organizar.

De momento está verde el tema pero es la intención que tenemos para 2021 si la situación lo permite y viendo como va el tema de la asistencia del público, que salir a tocar acarrea gastos y si se limita el aforo no tiene mucho sentido ni mucha gracia. El espectáculo lo ponen las bandas, pero tocar así es bastante chungo. El primer concierto lo tenemos el 3 de octubre en Madrid con Ktulu, a ver en qué condiciones, y el 31 del mismo mes viajamos al Halloween Metal Fest. Ya veremos cómo va la situación, de momento va todo hacia delante.

Drago Madrid

Drago (Foto: Álvaro Carlier)

Con todo el contacto que hay en los conciertos de metal y el tema de la propagación del virus, ¿cómo te imaginas estos conciertos?

Pues no tengo ni idea, es todo muy confuso y me deja muy descolocado este tema. Es evidente que hay un bicho ahí que mata, pero no está justificadas las maneras ni las formas. Yo he sido hostelero y entiendo que hay que subsistir pero no entiendo que se abran las terrazas con el riesgo que hay estando cerca de gente desprotegida. En un concierto, no vas a meter en una sala a 60 personas y decirles que estén a dos metros, porque no va a suceder. Se me escapa este tema y no veo coherencia de ningún tipo. Se abren primero los bares y no se puede ir al teatro, por ejemplo. Habrá que ver cómo se pronuncia el gobierno y como nos deja vivir.

Volviendo al disco, ahora que ya lleva dos meses fuera, ¿cómo ves el feedback del público con respecto a este lanzamiento?

De donde vengo yo es otra etapa, otra banda, y no sabía cómo iba a ir. Estoy muy agradecido porque la gente ha estado muy pendiente de mí y de qué iba a sacar y con quién. Nos ha asaltado la sorpresa, no esperábamos tantas buenas críticas. Aquí no pagamos ni hacemos la pelota a nadie, solo lanzamos un trabajo y quién se interesa lo hace solo.

La aceptación de ‘Vórtice’ ha sido de 10 y no podemos estar más orgullosos de esta nueva etapa. Te corta la ansia no poder salir a defender el disco porque aunque ya me conozcan, esto es una incógnita todavía. En 4 directos que hemos podido dar se han quedado encantados y hemos recibido muy buenas críticas. Las que no han sido tan buenas han sido al menos bien explicadas y objetivas. Estamos contentísimos realmente.

Desde que comenzó Drago ha habido algunos cambios en sus filas. ¿Qué nos puedes contar sobre eso?

Sí, Juan Manuel Viñas y yo somos los dos únicos que quedamos del inicio. Han pasado varios músicos a lo largo de esta pequeña etapa antes de entrar a grabar y entraron Carlos y Rodrigo. Prácticamente entraron un par de meses antes de entrar a grabar. Fue un momento confuso, incluso pensé abandonar el proyecto porque estaba cansado de no encontrar gente adecuada para este proyecto y al final salió y nos ha costado lo nuestro. La grabación y postproducción del disco ha ido apretada, no pudimos darle el par de vueltas que nos gustaría, pero ha sucedido así y estamos muy orgullosos. Esperamos dar un poco más en el segundo, probando algunas cositas nuevas. Hasta la fecha no nos esperábamos esto y es todo genial.

Drago

Drago (Foto: Daniel Claudin)

Tiene que ser raro adaptarse a cambiar de músicos justo antes de grabar, es frustrante una situación así. ¿Cómo has podido asentar las bases del grupo?

Hemos estado casi año y medio y hemos tenido problemas durante la creación del disco por los cambios en la banda, como en el artwork, las fotos de promo… Hemos visto problemas por cambiar de miembros, ya que repetir sesiones acarrea un coste y de ahí que haya costado un año y medio. Además, por como fue mi salida de mi anterior banda, mi estado anímico estaba bajo cero, si quedaba un rayo de esperanza de sacar algo yo lo tenía porque soy un melómano enfermizo. Pero empezaron los problemas por gente que se iba y yo con la edad que tengo no estoy para muchos trotes.

«por como fue mi salida de mi anterior banda, mi estado anímico estaba bajo cero»

Hubo un par de momentos que pensé que no aguantaba más la situación, lo que yo quería era más que ensayar y tocar. Esto es un proyecto de 5 personas, no de 1, y al final juntos hemos podido sacarlo a flote, pero ha costado un año y medio de mucha confusión y mucho agotamiento. Al final como soy aries y muy cabezota acabó saliendo.

¿Cuál es tu peso en la banda a nivel compositivo?

El mismo que en las anteriores bandas que hemos estado. Todos aportamos ideas, yo hago las letras y de vez en cuando llevo algún riff. Todos aportamos en un mismo porcentaje, menos los 3 miembros que han llegado después que ya se encontraron con el disco casi terminado. Aquí nos metemos todos de lleno. Yo tenía ideas claras de antes, como la temática y la portada, el sonido… Y ahí me he encargado bastante, pero somos 5 cabezas y con el material que disponemos ahora y teniendo el año que viene libre para componer, habrá participación de todos.

Sobre el artwork, se asocia a ti en seguida. ¿Qué has querido expresar con esos diseños?

El artwork de ‘Vórtice’ es una de las portadas más bonitas que podía sacar, representa el gusto que tengo por el arte japonés y es elegante pero con cierta rabia, mezclando la luz y oscuridad. Las letras no iban enfocadas sobre un solo tema, pero una vez compuestas he visto que tenían puntos en común sin quererlo, ha encajado todo a la perfección. Como tú dices, si me conoces sabes que me gusta el arte japonés, Irene ha clavado lo que quería, con una idea bastante clara y ha hecho una obra de arte, bajo mi opinión al menos.

Drago Vórtice

Sobre Vita Imana

Mencionas que las letras llevan algo de esa rabia que llevabas dentro, y eso tiene relación con la creación de Drago y tu salida de Vita Imana. No podemos evitar hablar del tema ahora que estamos charlando contigo. ¿Cómo estabas anímicamente después de todo lo que sucedió?

Muerto. Imagínate, entenderás que no voy a desvelar lo que realmente fue porque todos tenemos nuestra solución, pero yo me llevé una sorpresa, no sabía nada. Imagina lo que supuso eso. Es una banda que llevé en el corazón todo el tiempo que estuve en ella. En el videoclip «Samurai» lo que interpreto no el acto en sí del samurai, que es bastante desagradable, pero mezclo ahí mi historia, me partieron el corazón por la mitad. El palo fue tremendísimo y me lo comí yo solo, aunque hubo mucha gente cercana que se interesó por mi estado pero fue tremendo. Inevitablemente me preguntan, y no me parece todavía real.

Ya estoy bastante curado del palo inicial pero me sigue resultando raro no estar vinculado a ese nombre que llevaré a fuego grabado en el corazón toda la vida. Al menos hasta el último disco que hice con ellos, desde entonces para mí esa banda está enterradísima. Fue un golpe muy duro del que te tienes que rehacer y salir a flote porque no te queda otra. No te vas a hundir en la miseria, pero fue un hachazo tremendo.

“para mí esa banda está enterradísima”

¿Cómo ha influido tu pasado en Vita Imana a Drago? ¿Has querido desligarte para que no los relacionen?

Sí, claro. La voz es inconfundible y estoy en el mismo estilo. Sigue siendo metal groove y las comparaciones van a estar ahí siempre. Yo estaba inquieto por si la gente lo iba a identificar pero a la gente le ha sorprendido que no, y yo quería hacer otra cosa. Hay cosas ligadas a mi pasado, como «El Lobo», cuento esa historia personal donde he querido expresar esa rabia e impotencia, pero no voy a mirar más para atrás porque es absurdo. Si a la gente le puede recordar a mis inicios con Vita Imana es inevitable, pero me he querido desmarcar de esa historia y seguir otro camino diferente y que suene personal y creo que lo hemos hecho.

Vita Imana Javier Cardoso David Sobrino

Vita Imana (Foto: Jorge Bobadilla)

Has dicho que Vita Imana está enterrado para ti, pero has estado con ellos muchos años y te has emocionado con ellos en directo y sentido mucho sus canciones. ¿Todavía podría seguir pasando o no quieres saber nada?

Al principio era incapaz de leer noticias o escuchar sus temas ni nada que estuviese relacionado con el grupo. Era como clavarme alfileres, me dolía en el alma y no era capaz de mirar de frente. Cuando empecé a componer ‘Vórtice’, que es un trabajo que puede disfrutar todo el mundo, sí utilice ciertos temas de Vita Imana para que me entendiesen a donde quería ir y me atreví a poner algunos temas en el local. Un día estaba muy sensible y me pinché unos temas y salí bastante tocado del ensayo. Tenemos muy buen equipo dentro del local y su música es muy contundente, me dolió y me fui bastante tocado.

Mi intención era en relación al tema musical pero he empezado a recordar, es como si te deja tu novia y ves algo relacionado a ese pasado y te duele. Fueron pinceladas. En directo la primera vez con esta formación fue en Zaragoza. Mi amigo David Sobrino que era nuestro manager siempre esperaba en el escalón para acceder al escenario con el micro preparado para dármelo y un abrazo y cuando cogí el micro me acordé de él y se me hizo un nudo en la garganta. Si algo me afecta se me nota, no es teatro, lo siento así.

Volviendo a la pregunta inicial -pero en este contexto-, ¿cómo estás ahora?

Ahora soy capaz de escuchar temas, de ver noticias… Ahora lo que siento es pena. La banda sigue sonando atronadora y aplastante pero lamento decir que, para mí, a parte de que ya no existen como grupo, han perdido todo el carácter, la esencia, el carisma, la conexión con el público y entre nosotros sobre el escenario.

En un bolo que dimos en la sala Santana 27 en Bilbao con Hamlet y varias bandas locales, nos decía el guitarrista Javi García que nunca habían visto una banda tan pegada a sí misma a nivel musical y personal sobre el escenario, que sentía una envidia sana por nuestra conexión en el escenario y lo que hacíamos trasladándolo al público era magia. Lo que he visto ahora en directo no me ha gustado nada, para mí se ha perdido esa conexión y esa esencia, con esos temas que eran un filtro con temas más personales o sociales, y su interpretación en el escenario, ahora mismo ya no tienen lo de antes.

“Lo que he visto ahora en directo no me ha gustado nada, para mí se ha perdido esa conexión y esa esencia”

Vita Imana Rock Arena 2013

Vita Imana (Foto: María del Carmen Celemin)

¿Cómo han sido entonces estos primeros directos con Drago? Evidentemente no puedes evitar comparar.

Claro, han sido 13 años en esa magnífica banda. Todo te recuerda al pasado. Llevaba prácticamente 2 años sin pisar un escenario, cuando llegamos a las 4 de la tarde en la sala de Zaragoza. Al oler esa esencia del escenario se me pusieron los pelos de punta porque lo echaba de menos. Estaba un poco a la expectativa de cómo iba a reaccionar la gente y cómo nos íbamos a desenvolver por primera vez en directo.

La gente a veces se quedaba perpleja por la intensidad y el buen sonido que estábamos sacando y la sensación fue de liberación total, de alivio increíble. Alguna gente ha dicho si iba a interpretar algún tema de Vita Imana pero no es el momento, lo dudo mucho porque no me sentiría cómodo.

La importancia de Javier Cardoso en Drago

Drago es un proyecto nuevo, pero al ser tu banda, para muchos ya es conocida porque ya tienes más popularidad que partiendo de cero. ¿Crees que tu experiencia anterior ha ayudado a Drago a comenzar en un nivel más alto?

No sé si está bien que lo diga yo, pero evidentemente sí. Creo que partimos con cierta ventaja porque estando a ese nivel tienes a mucha gente que te sigue y te respeta como músico y he intentado devolvérselo y volver a engancharles a lo que hago ahora. Lo que sí que he notado es que viniendo de estar con un gran manager y tocando en esos festivales, verte en un tercer piso más abajo hace que te gustaría salir a ese nivel.

Ahora queremos subir y escalar puestos pero sin obsesionarse, pero sí aprovechamos contactos en la industria y aprovechamos cuando se ponen en contacto conmigo. Es el premio de tantos años de trabajo. Ahora es otra presión, es más complicado mantenerte, pero me gusta la presión de grandes festivales. Ahora de momento es salir a disfrutar y que la gente vea lo que hacemos.

Drago

Drago (Foto: Daniel Claudin)

Hablaba con Diva Satánica el otro día que como ella salió en ‘La Voz’, conocen al grupo por ella. Ahora ha entrado en Nervosa (que es una banda grande) y la gente conoce a Bloodhunter como el grupo de Diva Satánica aunque ella no es la que maneja todo, sino que cae más en las manos de Fenris. En el caso de Drago, ¿sientes que la gente lo ve como el grupo de Javier Cardoso? ¿Tienes esa presión de que la gente esté más pendiente de ti que de los demás?

Sí, pero yo eso no lo puedo controlar. No me desagrada ni creo que sea perjudicial para el grupo. Mis compañeros lo saben. Yo cuando intenté exponer las bases de este grupo, yo dije que no soy dios ni voy a revolucionar todo ni a decir cómo hacer todo. Un grupo es un conjunto de músicos y todos tenemos nuestro personaje. Yo no voy a cambiar, no me gusta imponer nada, no me gusta ese estilo dictatorial. Como lo vea la gente no lo puedo controlar.

La mayoría de los medios de comunicación lo venden así, ahí no me meto, pero no hay ningún problema en ese sentido y lo recibimos así. Hubo presión porque cuando me reuní con esta gente y les dije lo que quería yo parto con un extra de presión porque hay gente que estará pendiente de lo que hago, pero no tengo problema.

Antes comentamos los cambios en las filas, pero no sé si habéis cambiado de manager. ¿Qué ha pasado con eso?

Ha sido otra piedra más en el camino. No ha salido bien y ahora mismo caminamos solos. Aprendí en los 13 años con Vita Imana que cada uno tiene que ir a lo suyo y contamos con Ismael que es nuestro técnico de sonido actual, y ahora buscamos un manager que le interese la banda tanto como a nosotros para tirar del carro juntos. Para lo que pensamos para el año que viene tenemos una agencia y veremos como va esta pequeña gira y cómo funciona. Si sale bien puede haber algún tipo de contacto. Ahora nos estamos autogestionando pero queremos a alguien que nos dirija a los mejores festivales y salas.

El futuro de Drago

Sobre este plan para el año que viene y no puedes desvelar, que a día de hoy tampoco hay nada estable sobre planes futuros. Pero, ¿puedes desvelar algo sobre el tema?

Lo vamos a hacer con unas bandas amigas muy profesionales y con trayectoria dilatada. Queremos hacer de momento 3 o 4 fechas conjuntamente y ver cómo funciona esto, serían por el territorio nacional y darnos a conocer, aunque las otras bandas ya son bastante conocidas, sobre todo una de ellas. Queremos disfrutarlo todo lo posible, somos buenos amigos y va a ser todo un espectáculo. Queremos unir fuerzas y tocar pocas fechas pero bien, en salas medias y muy cerca del público, con un cartel específico. Si todo marcha bien, se podrá ampliar un poco más, de momento en España.

Drago Madrid

Drago (Foto: Álvaro Carlier)

Ahora que empiezas de cero después de venir de una banda con trayectoria tantos años, ¿como ves la escena underground metalera para una banda que empieza ahora en comparación con hace 15 años?

Ahora es más complicado, hay muchas más bandas. En comparación ahora muchísimas bandas se autoproducen y promocionan gracias a las tecnologías nuevas y las nuevas generaciones manejan cualquier cosa de sonido e imagen y los discos se hacen viejos muy pronto. Sale mucha gente de ramas ligadas al rock con una calidad alucinante. Hacerte un hueco a codazos ahora es complicado. De ahí la idea que se me ocurrió de unirme a otras bandas y tirar juntas del carro ofreciendo garantías sobre el escenario y reenganchar a la gente. Si se puede ampliar, tal vez metamos una cuarta banda. La idea es unir fuerzas, solo es muy complicado. Todas las bandas tenemos que pelear, las de arriba y las de abajo. Hay un nivelazo escandaloso.

Con tantas bandas es más difícil destacar entre ellas y que te escuchen, cada vez hay más grupos nacionales y también de fuera. Gracias al desarrollo de la tecnología hay más opciones, como dices. ¿Tenéis pensado algo especial para elevar un poco vuestra popularidad?

De base ya está todo inventado. Todo cuesta mucho más y avanza más. Nosotros llevamos un atrezo bastante visible en directo que en algunas salas podemos hacerlo y en otras no. Llevamos una imagen muy chula que cambia de forma, obra de Rodrigo de Lucas, pero no siempre podemos llevarlo. Intentamos dar la máxima caña posible, pero tampoco podemos mucho más.

Se me viene a la cabeza el nombre de David Sobrino, él tenía unas ideas para llamar la atención de metaleros y no metaleros, pero luego es complicado porque todo cuesta mucha pasta y se quedaban ideas en el tintero para atraer al público con algo diferente. Está todo tan masificado que ya no sabes que hacer y necesitas un manager para volcar esas ideas a la banda. Nosotros con tener que componer y esas cosas tampoco nos queremos romper más la cabeza.

David Sobrino, un pilar en su carrera

Ya que hablas de David, ¿qué te pareció que dejara el mundo del management?

Para mí es el número 1, lo ha demostrado y a parte de las envidias de sus detractores, él se declinó más por la movida que está haciendo ahora. Por lo que he hablado con él, le va de maravilla, se ha sabido mover y documentar. Puede gustarte o no lo que haga pero es un crack. Cuando se van estos elementos de una banda, la magia se va, él tiene un cerebro privilegiado para esto. La escena del metal se ha quedado coja sin David Sobrino. Llevó a bandas como Vita Imana hasta lo más alto. Le echo de menos pero hay que respetarlo. Ahora no le veo trabajando con nosotros, está a gusto ahí, pero ojalá, porque nos entendemos a las mil maravillas.

Vita Imana Inordem David Sobrino

Vita Imana + Inordem (Foto: Javier Bragado)

Cuando se produjo la escisión de Vita Imana, ¿él ya estaba fuera o sucedió todo a la vez?

Ya sabíamos de aquella cuando se iba a ir él, nos lo había comunicado ya. Lógicamente no lo hicimos público, fue de sorpresa pero lo sabíamos. Él también derramó varias lágrimas cuando tocamos nosotros y quiere decir mucho. Me consta porque somos amigos que lleva Vita Imana en el corazón. Todo floreció en el mismo instante y duele separarte. A más de uno le impactó, pero ya estaba dicho por él. Fue más desagradable mi salida.

Se dice que el tiempo todo lo cura, ¿crees que podrías llegar a tener relación algún día con Vita Imana o sus integrantes?

Tengo contacto con algunos miembros del grupo por varias circunstancias personales. A varios de ellos los he invitado a la presentación de Drago y han aceptado amablemente. David Sobrino dijo que igual algún día se verían a los dos cantantes sobre el escenario y le he dicho que es imposible. El tiempo todo lo cura, por lo menos aparentemente, pero no podría subir al escenario a cantar una canción de Vita Imana, ni aunque me apuntes con una pistola en la cabeza. Es imposible. El universo es así y hay que entenderlo. Si es que no, por más que insistas es que no.

Tampoco puedo asegurar es lo que voy a pensar de 5 a 6 años, pero a día de hoy es inviable. Imagina que igual en unos años queremos sacar un disco los que le dimos carácter a la banda y se hace, pero tendría que haber una serie de circunstancias para que se diera a cabo, a día de hoy sería imposible.

“No podría subir al escenario a cantar una canción de Vita Imana ni aunque me apuntes con una pistola en la cabeza”

¿Algo más que decir a tus seguidores?

En su día prometí volver y estuve a punto de no cumplirlo. Me sentía en deuda con la gente que me ha estado apoyando, sobre todo en esta última etapa tan dolorosa. Sólo puedo tener palabras de agradecimiento a todos los medios y la gente que me sigue en mi trayectoria musical. Cuando te apoya tanta gente, uno se siente agradecido. Hoy en día eso es un tesoro.

Espero que nos podamos ver las caras en directo con Drago y que disfruten con nosotros hasta donde podamos llegar. De momento estamos dando guerra y deseando volver a los escenarios. Suena a tópico que no se paga el cariño con dinero pero es cierto. Mi deuda es devolverlo saliendo a los escenarios. Gracias a todos de corazón.

Dani Bueno y Olga Vidal