El trío de Lasarte confirma con su nuevo trabajo que van mucho más allá de las etiquetas y que encorsetarlos no encaja con su visión heterodoxa de la música, su crecimiento se antoja imparable y ‘Aske’ es el refrendo de esa percepción.

Desde su formación a finales de 2009, la banda ha pasado por varias formaciones hasta asentarse en la actual con Etxahun Urkizu (batería), Pablo Cabasés (guitarra) y Mikel Yarza (bajo y voz) y que van a llevar a Hilotz (Cadáver en euskera) a buen seguro a estar en boca de muchos aficionados al metal. Charlamos con Mikel sobre su último disco y unas cuantas cosas más.

El proceso inicial que dio lugar a ‘Aske’ se remonta prácticamente a tres años atrás, contadnos un poco las circunstancias vividas como banda y disco durante este periodo.

Tres años de preparación pueden parecer demasiados para una banda que todavía no ha despuntado en el circuito estatal. Pero nos decantamos por hacer las cosas bien y con paciencia, cuidar todos los detalles y publicar un disco del que estemos satisfechos al 100%. En ese periodo trienal hemos compuesto y revisado las canciones muchas veces, también hemos mejorado en aspectos técnicos de cara al directo gracias al periplo de nuestro baterista Etxahun en la banda de rock Governos y hemos dado un salto cualitativo como artistas en el apartado audiovisual. ‘Aske’ es un disco cocinado a fuego lento y su sabor es mejor gracias a ello.

Escuchando ‘Aske’ podría decirse que es un trabajo multidireccional, en el sentido de que por un lado sigue manteniendo estructuras thrash y a la vez aumenta la gama de sonidos de Hilotz con toques black, death y algunos detalles más exóticos.

Emprendimos este camino en nuestro disco debut ‘Giza Ankerkeria’. Tratamos de dar un paso más allá del thrash metal de corte clásico que predominaba en el primer EP ‘Hil Ala Bizi’ y mezclar géneros y corrientes compositivas de todo tipo. ‘Aske’ sirve para asentar esa base, pero también para llevar a cabo una mezcla aún más ambiciosa. Nuestro guitarrista Pablo disfruta mucho con la salsa o el merengue. Son estilos que, a priori, uno no asocia con el metal, pero pueden funcionar muy bien en conjunto. Además, en el nuevo disco hemos vuelto a tomar la canción como eje central, hemos tratado de hacer estribillos memorables y melodías que se queden grabadas en la mente.

El formato trío no es extraño ni ajeno al metal en ninguna de sus variantes, ¿ha habido alguno de estos tríos que os han influido de forma especial en vuestro sonido o en la concepción musical que tenéis?

Personalmente, Coroner es una de mis principales referencias. Me fascina el modo en el que mezclan thrash y death metal con la música progresiva y la formación suiza es un espejo en el que mirarme, teniendo en cuenta que el bajista de la banda, Ron Broder, es también vocalista. Por lo demás, no somos conscientes de que un trío en concreto haya influido en nuestra visión, pero somos grandes seguidores de bandas clásicas como Rush, Motörhead, Black Sabbath o Led Zeppelin, aunque una voz solista esté presente en estos dos últimos casos. Entre bandas actuales, Night Demon es una referencia muy interesante.

Hilotz

Hilotz (Foto: Begipuntuan)

Respecto a las letras este nuevo trabajo es más luminoso, abierto, humano e incluso filosófico, ¿Cuáles son los ideales que queréis transmitir con ellas?

‘Aske’ es un disco que gira en torno a la libertad. Son once canciones, once historias, relatadas desde el punto de vista de aquellos que quieren romper sus cadenas. El apartado lírico se ha convertido en un ejercicio de empatía, un intento por entender el sufrimiento ajeno. El disco cuestiona el concepto que tenemos sobre la libertad y la forma en la que esta nos es arrebatada. Sin embargo, y como mencionas, el foco se pone esta vez en la búsqueda de la libertad. No queríamos subrayar lo que nos ahoga, sino el hecho de que algún día conseguiremos librarnos de ello.

“No queríamos subrayar lo que nos ahoga, sino el hecho de que algún día conseguiremos librarnos de ello.”

Un detalle que nos gusta especialmente de ‘Aske’ es que los temas fluyen con naturalidad, sin que suenen forzados o cercenados en su duración por motivos ajenos a la pura creación artística.

Intentamos no limitar nuestra creatividad. En el disco existen canciones que se acercan a una estructura clásica o convencional, mientras que en otros casos hemos tirado por derroteros más experimentales, sin apenas repetir riffs o añadiendo nuevos matices cada vez que estos vienen de vuelta. Tratamos de ser totalmente libres a la hora de componer, de lo contrario estaríamos engañándonos a nosotros mismos y a los oyentes.

Otro giro importante de ‘Aske’ es que deja de ser 100% autoproducido y cuenta con el respaldo de un sello como Maldito Records ¿cómo surgió la colaboración con ellos y qué supone o supondrá para Hilotz como banda?

La autoedición había sido nuestro modus operandi hasta ahora. Te permite controlar todos y cada uno de los pasos relacionados a la realización de un disco y eso tiene ciertas ventajas, pero también límites en lo que respecta a la promoción y el alcance de la banda. Por ello, sentimos que era el momento de dar un paso al frente y buscar un acuerdo discográfico. Pasamos unos cuantos meses tocando diferentes puertas y finalmente cerramos el trato con Maldito Records en primavera, recién comenzado el confinamiento. Cuentan con una experiencia de más de dos décadas en el sector, no solo editan metal sino también bandas de rock y punk, y, además, es uno de los pocos sellos del Estado español que trabaja con bandas que cantan en euskara. Todo esto nos parecía interesante y hemos pasado los últimos meses trabajando codo con codo, con el fin de que ‘Aske’ tenga el mayor alcance posible. Maldito trabaja de cara a España y Latinoamérica y en los últimos días hemos comenzado a ver que el interés hacia Hilotz y ‘Aske’ es cada vez mayor al otro lado del charco. Es algo que nos hace especial ilusión.

A la espera de tener el formato físico, contadnos un poco del gran artwork que envuelve ‘Aske’.

La ilustración ha sido realizada por Xabier Sagasta, con quien ya trabajamos en la etapa de nuestro disco anterior, ‘Giza Ankerkeria’. Por aquel entonces Sagasta ilustró para una camiseta el choque entre la naturaleza y la civilización, y nos quedamos tan a gusto con el resultado que no dudamos en volver a llamarle para ‘Aske’. Esta vez la ilustración gira en torno a la libertad y, tratando de ser fieles a nuestro concepto lírico, dejamos a Sagasta que dibujara con total libertad. La imagen doble, que se extiende entre portada y contraportada, ilustra una gran explosión en medio de una especie de megalópolis. En el centro se encuentra un ser que se deshace de su antigua piel y alza sus manos al cielo, hacia la libertad. Como anécdota o premonición, cabe resaltar que Sagasta llamó “confinamiento” a ese caparazón rojizo del que sale el protagonista. Hizo esta denominación en verano de 2019, mucho antes de que el confinamiento real entrara en nuestras vidas y esto es algo que ha dado una nueva dimensión a la portada.

Este segundo larga duración parece que con el tiempo se señalará como el del asentamiento de Hilotz como banda con personalidad artística propia.

Ciertamente, sentimos que ‘Aske’ ha sentado las bases para la banda de cara al futuro, ya que es el primer disco realizado al 100% por los miembros actuales de Hilotz. Compositivamente ha servido para establecer dinámicas que pueden tener un largo recorrido y la relación entre bajo y guitarra en el contexto de trío es ahora más depurada. Hemos tejido todo en torno al concepto de la libertad y creemos que esa puede ser otra razón de peso para que el nuevo disco conecte con un público más amplio. A fin de cuentas, todos deseamos ser libres en este mundo.

¿Cuánto creéis que queda de ‘Giza Ankerkeria’ en ‘Aske’?

Los ecos son inevitables, la mezcla de thrash, death y black está ahí. Creo que la complejidad compositiva es lo que prevalece principalmente, el intento por no conformarnos con lo estándar o el canon convencional. También existe una conexión directa en cuanto a la producción, ya que Ekaitz Garmendia se encargó de mezclar y masterizar ‘Giza Ankerkeria’.

Hilotz

Hilotz (Foto: Begipuntuan)

¿Qué supuso para vosotros grabar en Black Storm con Ekaitz Garmendia?

Fue una experiencia enriquecedora en muchos sentidos. Ekaitz es guitarrista de Legen Beltza, una gran referencia para Hilotz, para el metal del País Vasco y también para los seguidores del thrash a nivel estatal. Es un excelente músico y tiene una gran experiencia a la hora de grabar en estudio. Nos dio muchas recomendaciones en cuanto a la forma de tocar nuestros instrumentos y el modo de lograr el mejor sonido posible. Ha sido un proceso de aprendizaje placentero y la conexión ha sido mutua, ya que Ekaitz también ha experimentado con nuevos horizontes sonoros y ‘Aske’ le ha servido para mejorar como productor. El hecho de acudir a Karrantza fue clave, Ekaitz nos abrió las puertas de su casa, situada en un entorno natural incomparable y, por un tiempo, estuvimos viviendo en una burbuja. No teníamos más preocupación que realizar el disco y, en ese clima, compartimos infinidad de charlas culturales, sociales y políticas. La pasión generada en torno a ‘Aske’ ha sido muy bonita y nuestra relación es ahora más fuerte que nunca.

Si tuviésemos que resumir ‘Aske’ en un solo corte, tal vez nos quedaríamos con “Hiltegira Bidean”, nos parece el tema más completo y complejo.

Nos alegra que destaquéis este tema. Aunque no lo hayamos incluido entre los singles de adelanto, se trata de una canción que recoge la esencia de Hilotz casi por completo. Riffs agresivos, melodías dobladas con guitarra y bajo, pasajes con tintes progresivos, un solo fantasmagórico… quizás sea el corte menos thrasher, pero también cuenta con un breakdown, una constante en Hilotz, aunque haya acabado siendo algo no tan presente en este disco. Personalmente, siento una conexión muy profunda hacia “Hiltegira Bidean”, ya que es una canción contada desde el punto de vista de un animal que va camino al matadero. La letra ilustra el horror de la industria cárnica y la opresión sistemática que ejercemos sobre los animales no humanos, aunque también contiene un mensaje esperanzador, un destello de luz hacia la liberación futura.

“Aunque no lo hayamos incluido entre los singles de adelanto, se trata de una canción (“Hiltegira Bidean”)  que recoge la esencia de Hilotz casi por completo.”

Hablemos un poco de ‘Agur’, es muy interesante cómo os acercáis a las tradiciones y a lo que podríamos llamar folk sin perder vuestra propia esencia ni desvirtuar el aurresku. Y todo esto sin entrar en lo maravilloso que es el vídeo.

Hace ya unos años desde que empezamos a barajar la opción de versionar alguna pieza folclórica vasca al metal. Existen ciertas canciones tradicionales que tienen un aura melancólica y pensamos que podía cuajar muy bien en nuestro estilo. El aurresku es el baile tradicional más popular del País Vasco, lo hemos escuchado en homenajes, celebraciones últimos adioses… el baile se realiza en todas esas ocasiones señaladas y podría considerarse una especie de rito cultural. Nuestro planteamiento consiste en hacer una relectura de esa tradición, respetarla, pero a su vez traer nuevos aires, tanto a la música como a la imagen y toda la simbología que la acompaña. Hemos trasladado ese choque entre lo viejo y lo nuevo al propio videoclip, donde un hombre y una mujer se enfrentan a través del baile. Además, el trabajo audiovisual ha servido para empezar a explorar el ámbito cinematográfico, algo que nos gustaría seguir ampliando en el futuro. Estamos deseando tocar la canción en directo para darle vida propia y percibir la reacción del público.

“Pertsona, Terrorista” así, en frío, puede llevar a confusión en cuanto al título, ¿cómo surgió la imagen de asociar un término como terrorista a la migración?

El estribillo de esta canción dice “Soy una persona, no soy terrorista”. El título abrevia ese concepto y separa ambas palabras mediante una coma. Es decir, no hablamos sobre una persona terrorista, sino precisamente sobre todo lo contrario. En la Europa actual, donde el neofascismo se expande por las instituciones, muchos responsables gubernamentales dan la espalda a los migrantes y los señalan como cabeza de turco de nuestros propios problemas. Infunden el miedo y el odio en la sociedad, dicen que los migrantes vienen a robarnos y a quitarnos el trabajo, cuando en realidad huyen de la guerra, la miseria y la opresión, en busca de libertad. La historia del ser humano es indisociable a la migración, todos los países han contado con procesos migratorios nacionales o internacionales y por ello reivindicamos la importancia de ponernos en el lugar del otro, de entender su sufrimiento. En el fondo, no somos tan diferentes.

Mojaros un poco: ¿cuál es vuestro tema favorito de ‘Aske’, ese del que os sentís especialmente orgullosos?

Nos hemos implicado tanto en estas canciones que es imposible tomar distancia y ser objetivos. Destacar una sola pieza me parece un poco injusto, pero me quedaría con “Aske”, ya que conceptualiza el disco al completo y recoge casi todos los estilos musicales que uno podrá encontrar a lo largo del nuevo álbum.

“La pandemia lo complica todo en cuanto a la presentación en directo. (…)No sabemos como estaremos la semana que viene, por lo que no tiene mucho sentido planear a seis meses vista.”

Lanzar un disco en la situación actual, sin ser una gran banda a nivel de ventas, es todo un ejercicio de valentía, teniendo en cuenta las salvajes limitaciones que se están imponiendo a los espectáculos musicales que a buen seguro os influirán de forma negativa en la promoción en directo de ‘Aske’.

La pandemia lo complica todo en cuanto a la presentación en directo. El plan de conciertos que empezamos a trazar en primavera de cara al lanzamiento otoñal se ha quedado en nada y ahora mismo no tenemos programado ni un solo concierto. Parece surrealista, ya que lo habitual suele ser publicar un disco y embarcarte de forma seguida en una extensa gira de presentación, pero durante los últimos meses no hemos destinado demasiados esfuerzos a confeccionar una agenda de actuaciones, ya que la situación sanitaria cambia de un día para otro. No sabemos como estaremos la semana que viene, por lo que no tiene mucho sentido planear a seis meses vista. En estos momentos estamos tratando de dar forma a un puñado de citas señaladas, conciertos en los que podamos cuidar aún más el apartado visual, para presentar así ‘Aske’ en su plenitud, aunque por ahora todo está en el aire. De todos modos, no sentimos frustración por publicar el nuevo disco en estos tiempos. De hecho, creemos que este es precisamente el momento de ‘Aske’. Son días de gran incertidumbre y creemos que un disco que gira en torno a la búsqueda de la libertad puede servir de ayuda. Esperamos que nuestra música sirva para iluminar el camino de la sociedad, al igual que la del resto de bandas que apuestan por la creatividad y por seguir publicando en estos tiempos.

Ni cerveza, ni vino, ni whisky, ni vodka, vosotros sois el primer grupo del mundo que tiene su propio patxarán ¿habéis pensado en invitar a probarlo como medida de promoción?

Hacer una cata hubiera sido genial, pero las botellas que producimos se vendieron en seguida, en 48 horas todo estaba agotado. Nos alegramos mucho de la acogida que ha tenido y también del hecho de que Igor Mugerza e Iker Eleicegui hayan participado en este proyecto. Igor es el autor de las portadas de nuestros dos primeros álbumes, mientras que Iker fue fundador de Hilotz y baterista durante los dos primeros años. Nos ilusiona poder seguir colaborando con ellos. El patxarán fue bautizado como “Jainkoen Odola” (Sangre de Dioses) e hicimos una tirada reducida de 40 unidades, pero ha funcionado tan bien que volveremos a producir este otoño.

Toni de Lola