Bárbara Black: “He luchado siempre por la música sin entrar en polémicas”

El proyecto en solitario de la polifacética vocalista Bárbara Black acaba de publicar su segundo álbum, ‘Love, Death & Flies’, un larga duración que está contando con un gran recibimiento gracias a su renovada energía.

La carrera de Bárbara Black ha dado un paso más gracias a su proyecto en solitario, que se consolida con la publicación de su segundo disco. La artista tiene un pasado intenso con una completa carrera donde no ha faltado la formación constante y el trabajo duro. Ahora disfruta de los frutos de su esfuerzo y su talento gracias a la buena recepción de su álbum ‘Love, Death & Flies’.

Un nuevo proyecto: ‘Love, Death & Flies’

Acabas de publicar ‘Love, Death & Flies’. ¿Crees que el confinamiento actual favorece la publicación de un álbum o ha supuesto un mayor reto verse en esta delicada situación?

Sin duda supone un mayor reto, ya que una de las mejores formas de dar a conocer estas canciones es a través de los conciertos y, lamentablemente, nos hemos visto obligados a aplazar estas fechas. La parte positiva es que la creatividad siempre busca formas de expresión, y se nos ocurrió acercar nuestra obra a todas las personas grabando varios vídeos explicando qué hay detrás de cada canción, en la música y las letras. Lo podéis encontrar en nuestro canal de Youtube.

¿Estás satisfecha con la recepción que está teniendo por parte de tus seguidores y de la prensa especializada?

¡Sí, mucho! Todo lo que estamos recibiendo son muy buenas críticas tanto por parte del público como de la prensa. Todo el mundo nos ha transmitido que el nuevo disco suena mucho más metalero y enérgico. Coinciden en que hemos dado un paso más allá, tanto compositivamente como en la calidad del sonido.

Se trata de tu segundo álbum como solista, ¿cómo analizarías la evolución y las diferencias con respecto a tu disco debut, ‘Ad Libitum’?

Nos apetecía mucho volver a nuestras raíces más rockeras y metaleras e incluir un plus de energía y caña para poder trasladar a los conciertos. Es un disco compuesto 100% para tocar en directo, para que la gente se lo pase bien, canten y muevan los pelos con nosotros. Como novedad, comentaros que he grabado por primera vez voces extremas, descubriendo mi registro de screaming en las partes más salvajes, y eso personalmente me ha encantado. Sin duda, seguiréis encontrando influencias sureñas con referentes como Black Stone Cherry, Alter Bridge, Blues Saraceno o incluso Pantera.

Bárbara Black (Foto: Nat Enemede)

Con respecto al proceso de composición y grabación de forma más concreta, ¿ha habido alguna diferencia principal con respecto al primer trabajo? ¿Cómo ha ido el proceso esta vez?

Comenzamos componiendo el single “Tiger Tamer” en torno a febrero de 2019. Lo grabamos con Anti Horrillo y lo mezcló y masterizó Alex Cappa. Después lo estrenamos en junio junto con un videoclip muy chulo que grabamos con Ix Valieri. El resto de meses traíamos muchas ideas al local, pero fue en verano cuando cada uno estábamos de vacaciones, el momento en que cerramos la mayoría de las canciones. Gracias a las nuevas tecnologías nos resultó mucho más cómodo grabar ideas y enviarlas entre nosotros. En octubre entramos a grabar en The Cadillac Blood Studios con Andy C, quien terminó de hacer todo el trabajo de grabación, mezcla y master del disco al completo.

Los orígenes de Bárbara Black

¿En qué momento surgió la idea de crear un proyecto en solitario? ¿Qué nos puedes contar sobre la historia que hay detrás de su formación?

En 2014, tanto Nitro Destruction, Javier Peláez como yo, salimos de los diferentes proyectos musicales en los que nos encontrábamos. Vimos que había mucho feeling personal y musical entre los tres y decidimos montar un proyecto juntos. Nos unía la pasión por la música sureña y por eso también desde el principio hemos compuesto junto con Ix Valieri en ambos discos. En 2016 sacamos un adelanto de nuestro trabajo con el Ep ‘Spiritual rock’, donde nos gustó investigar y fusionar el rock con influencias country y gospel, jugando con matices y dinámicas. El hecho de presentar como primer single la power ballad “Shiva” nos supuso alegrías como el ser elegidos por el Festival AEV por Toledo para participar en Eurovisión. Ese mismo año además Rock FM me invitó a participar en el homenaje a Freddie Mercury en la sala La Riviera, lo que fue una experiencia brutal. En septiembre de 2017 grabamos el primer disco, ‘Ad Libitum’, que presentamos en una gira por UK en 2018 y otra gira por España en 2019. En esta etapa se incorporaron al proyecto nuestro bajista Márquez y guitarrista Carlos Cone.

¿Cómo definirías el sonido de tu banda en base a tus influencias principales a la hora de componer? Teniendo en cuenta la cantidad de estilos que abarcas como artista, ¿cuáles son tus influencias fuera del metal?

Principalmente somos rockeros y metaleros, pero disfrutamos con toda la música que no sea reggaetón (risas). Como ya he comentado, fuera del metal nos mola mucho el country, el blues, el gospel, el soul, el rap, la música clásica… A la hora de componer, todo influye. Yo prefiero hablar de la música en general como lenguaje universal y no restringirnos a nosotros mismos con etiquetas, eso lo único que hace a un artista es cortarle su libertad creativa.

De forma más concreta y para conocer mejor tus orígenes como artista, ¿cuáles son los discos -de cualquier género musical- que más te han marcado?

Warlock – ‘Triumph And Agony’, Mr Big – ‘Lean into it’, Vixen – ‘Vixen’, Rush – ‘2112’, Michael Jackson – ‘Dangerous , Blues Saraceno – ‘Dark Country’, Nightwish – ‘Once’, Alter Bridge – ‘ABIII’, Children of Bodom –‘I Worship Chaos’… Y muchos más.

Un aprendizaje constante

Eres una vocalista que abarca géneros tan diversos como el metal, el blues, el jazz o incluso la ópera. ¿Cómo organizas tus entrenamientos vocales para perfeccionar estilos con técnicas tan diferentes?

Ahora durante la cuarentena precisamente me he impuesto una rutina en la que caliento la voz junto al piano con ejercicios que abarcan todas estas técnicas, desde ejercicios de respiración, de foniatría, búsqueda de impostación y diferentes resonadores… Me obligo a trabajar diferentes timbres: belting, twang, falsete, fryvoice, opera, sob… Después me pongo “autodeberes” y me obligo a cantar mínimo un par de canciones al día para seguir perfeccionando cosas específicas que busco (matices, feels, registro…). Con el tema de la voz, que me apasiona, soy extremadamente obsesiva y constante.

Bárbara Black (Foto: Nat Enemede)

¿Cómo ha ido avanzando tu aprendizaje a lo largo de tu carrera? ¿Sigues estudiando a día de hoy?

Este es el primer año que no estudio oficialmente, pero llevo toda mi vida formándome. Nunca se termina de aprender, hay que seguir estudiando para crecer como persona y profesional. A los 15 años empecé a estudiar lenguaje musical, armonía, piano y canto, y así hasta ahora. Paralelamente he estudiado Magisterio Musical, Musicología, me he habilitado como profesora bilingüe y he aprobado por fin las oposiciones de maestra. Además, también hice diferentes cursos de voz, de maquilladora, teatro, musicoterapia… ¡Me encanta aprender cosas nuevas!

¿Nos podrías contar cómo comenzaste a dedicarte a la música y cuáles han sido los proyectos en los que has participado que más te han marcado?

Desde pequeña me pasaba horas cantando en diferentes lugares muy graciosos (dentro del armario para no molestar a los vecinos, en el trastero de mis padres, frente al espejo con mi pie de micro-escoba practicando a lo Motley Crüe…), pero fue a los 14 años cuando me planté en casa y dije claramente que quería estudiar canto. Mis padres no me tomaron en serio, así que como era menor de edad y no tenía ingresos, me apunté a diferentes concursos (poesía, dibujo…). En las ocasiones en las que gané, los premios eran material escolar, así que me fui a una gran tienda de deportes y cogí mi “premio”. Al día siguiente lo devolví todo y con ese dinero me pagué mis primeras clases de canto. Cuando mi familia se dio cuenta de la que había liado para poder estudiar canto, por fin me tomaron en serio y empecé con mis clases de técnica vocal de forma constante y académica con mi primera profesora Carmen Caballero, una soprano brutal.

A los 16 años me metí en mi primera banda de mi barrio -una banda que depende del día se llamaba My Own Worm o La Niña Without Parpadous (risas)-, pero fue a los 17 cuando entré en Abelian, una banda de rock progresivo con la que grabé mi primera maqueta. Y a los 21-22 fue cuando decidí montar Black Rock con quien grabé dos discos y varios videoclips. Posteriormente formé parte de bandas como Bella Bestia, P.M. y Burning Kingdom, y trabajé durante 10 años en diferentes orquestas. En 2013 montamos Vintage Jazz-Cabaret, con la que tocábamos en bodas, restaurantes…En 2013 también grabé un Ep de 5 temas con un proyecto que no se pudo desarrollar, Black Cross. En 2018 participé en Still Loving You, el musical ópera-rock de la mano de la productora Liricatime (Nacho Bas), con la que grabé la canción y videoclip “Phantom Of The Opera”. Actualmente, a parte de mi proyecto personal Bárbara Black, también estoy tocando en Rock Star Band, una banda de versiones con Martin More, guitarrista de Sangre Azul.

Bárbara Black (Foto: Nat Enemede)

Piedras en el camino

A nivel personal y profesional, ¿a qué dificultades te has tenido que enfrentar dentro de la escena nacional para llegar a donde estás hoy?

Principalmente situaciones de envidias y ambiciones tóxicas, o venganzas por no corresponder en el plano íntimo a alguien. Esto hace unos años me trajo traiciones en las que se rompieron contratos discográficos, me robaron dinero, lanzaron mentiras muy crueles sobre mí o intentaron robarme el nombre de mi proyecto y mis canciones. Además, lamentablemente hay gente que se deja llevar por este tipo de cosas sin contrastar y te vetan en sitios. Afortunadamente he seguido luchando siempre por y para la música sin entrar en ese tipo de polémicas, que para mí no son la música, y todo eso negativo ha quedado atrás, centrándome en lo bonito de este arte de la música.

Para quien no conozca los obstáculos a los que se enfrentan las bandas de rock y metal emergentes en nuestro país, ¿cómo podrías explicárselo desde tu propia experiencia?

Lo más complicado es cubrir todo el presupuesto que conlleva hacer esto bien. Lo ideal sería tener el respaldo de una compañía grande que dé soporte o apoyo económico a sus artistas. De forma independiente no puedes ni acercarte a cubrir gastos de grabación, mezcla y máster, pago de local y equipo de sonido, fotos profesionales, fabricación de copias de tus discos, fabricación de merchandising, gastos de la gira, alquileres de salas y toda la promo posible en publicidad. Eso es prácticamente imposible de suplir o equiparar a bandas que trabajan con Warner, Nuclear Blast, etc. Por tanto, tu visibilidad, posicionamiento e impacto va a ser siempre mucho menor.

¿Cómo estimas que va a afectar a tu proyecto el parón derivado del coronavirus?

Pues de primeras, dos miembros del grupo se han quedado sin trabajo, así que te puedes imaginar las consecuencias en todos los sentidos que supone esto. Por otro lado, hemos cancelado/aplazado todas las fechas de la gira que habíamos cerrado nosotros con tanto trabajo. La promo está como a medio fuelle, porque los discos que tenían que haber llegado a prensa no dio tiempo a enviarlos. En resumen, todo se va a aplazar o cancelar.

¿Podrán bandas como la tuya recuperarse en los próximos meses de este golpe tan duro en la industria?

Muchas de las bandas que no tenemos un respaldo discográfico nos vamos a ver muy afectadas y es probable que muchas tengan que disolverse. Esperemos poder aguantar el tirón, no agobiarnos con la situación e ir poquito a poquito.

¿Qué va a ser lo primero que haréis en cuanto se empiece a retomar la actividad dentro de la industria musical? ¿Por dónde os gustaría ir de gira cuando sea posible?

Lo primero retomar ensayos, ¡que nos subimos por las paredes! También, por supuesto, ir cerrando nuevas fechas para poder salir a tocar en cuanto se pueda, que es lo que más nos gusta. Nos encantaría tocar por toda España lo primero, volver a UK y por cualquier parte del mundo en salas y festivales, el caso es rockear all over the world y disfrutar de esto, que es nuestro oxígeno. Muchas gracias por esta entrevista tan completa y el espacio que nos habéis cedido. Antes de terminar me gustaría mandar un abrazo a todas aquellas personas que estén pasando por esta enfermedad y a aquellas que hayan perdido a algún ser querido en estos días, mucho ánimo a todos. Un abrazo a los lectores de esta revista y al equipo de Metal Hammer y The Metal Circus.