August Burns Red: los AC/DC del metalcore

Sin duda, August Burns Red son gigantes en su género. Y probablemente, de aquellos que aún no han sucumbido a las tentaciones de lo electrónico. Su nuevo disco, "Death Below", es una auténtica paliza en un callejón oscuro por parte de una panda de indeseables.

El metal evoluciona y August Burns Red son viva muestra de ello. Con una carrera que cumple dos décadas en 2023, los de Pennsylvania han demostrado sobradamente que son capaces de sobreponerse a la caducidad de modas y géneros. 

August Burns Red son, por derecho propio, una institución dentro del metal actual más pesado, fruto de una discografía imponente que desde “Thrill Seeker” (2005) no ha hecho sino consolidar la trayectoria del grupo. Si “Found in Far Away Places” fue su eclosión a gran escala, “Phantom Anthem” no hizo más que subrayar todos los puntos fuertes de una banda que ha comandado la explosión del metalcore americano a gran escala comercial.

August Burns Red (Foto: Mara Martínez)

Ahora, con “Death Below” bajo el brazo, el grupo liderado por JB Brubaker (guitarra) y Dustin Davidson (bajo) como compositores se lanza a recuperar el tiempo perdido tras la pandemia y el desgraciado lanzamiento de “Guardians” en plena debacle mundial. Hablamos con Jake Luhrs, vocalista de esta imparable apisonadora, en medio de su gira por Estados Unidos. Veinte años de August Burns Red bien lo merecen. 

El timing de”Guardians” fue poco acertado, teniendo en cuenta todo lo que sucedía en el mundo. Así mismo, tampoco acelerasteis el proceso de edición del nuevo “Death Below”, que ha tardado sus tres años de todos modos. ¿Cómo os afectó todo lo acaecido?

Fue una época muy oscura y muy divisiva para todo el mundo. Había mucho miedo, mucha soledad y mucha confusión. Para JB y Dustin como compositores, fue una oportunidad para escribir canciones tal y como se sentían en ese momento. Por eso el disco es tan oscuro, progresivo y complejo. Hay mucha frustración y cabreo en la música y las letras. Los tiempos afectaron al disco completamente.

En nuestra banda no consideramos hacer discos que sean pegadizos o que enganchen a la gente. Componemos según nos sentimos y componemos según el momento de nuestra vida en el que nos encontramos. Estábamos en un momento muy, muy oscuro y así lo hemos transmitido en la música. 

Siempre intentáis tener un mensaje positivo en medio de toda la agresividad de vuestra música. Supongo que el mensaje positivo ha sido un poco más difícil de extraer en esta ocasión.

Absolutamente. Creo que hemos intentado mantener un cierto halo de positivismo. Las canciones tienen una cierta luz al final del túnel. Pero hay canciones que son muy oscuras y no tienen vuelta de hoja. Hay pena, hay un sentimiento oscuro de dolor. Pero ahí es donde estábamos psicológicamente. Es difícil darle un final positivo a canciones que han sido compuestas con tanta negatividad en mente.

Creo que el disco es muy vulnerable, muy crudo. En algunas canciones no podíamos expresar que las cosas iban a ir a mejor sino que la realidad es la que es y se debe aceptar. Eso no es “luz al final del túnel”, sino que el mensaje es “esto es una mierda y debes aceptarlo para seguir adelante”. Ese es el mensaje en muchas de las canciones. 

Canciones como “Revival” son positivas, al menos musicalmente. El patrón rítmico y las melodías insuflan ánimo y optimismo, pese a los tonos oscuros. Es una canción que casi se puede bailar. ¿Se grabó el disco en diferentes sesiones y momentos temporales con diferentes inputs anímicos? 

Una vez un disco se edita quizá tienes un mes que no quieres pensar en componer pero aparecen algunas ideas. Instrumentalmente, se compone a lo largo de un año o dos y eso es lo que conforma la dirección de la música. Líricamente hablando, componemos todo el tiempo. Cuando las grabaciones de la música se van consolidando, todo sucede a la vez. En el estudio lo normal es grabar la batería primero, luego guitarras y bajo y la voz llega al final del proceso.

August Burns Red (Foto: Mara Martínez)

Algunas canciones se componen como una unidad, mientras que otras llegan de manera más inconexa. Esa dinámica es única y especial y entre Dustin y JB la hacen funcionar. Su manera de componer conjuntamente es muy buena. Como vocalista, mi trabajo es entender el sentimiento que hay tras cada canción y entender el sonido y las sensaciones. Quizá la intro es luminosa pero luego la canción se va por derroteros ultra-heavies. Tengo que leer la letra e intentar que mi interpretación vaya acorde a lo que la música está haciendo en ese momento.

Los gritos son un instrumento para mí, por ejemplo, y los uso para equilibrar mi interpretación con lo que está sugiriendo la propia música.  Cuando yo recibo las canciones están prácticamente acabadas y yo puedo aplicar mi voz de modo que encaje el sentimiento y la estructura de la canción. 

La madurez del metalcore

¿Crees que el uso de la agresividad como un instrumento más en el metal actual devalúa la inteligencia compositiva que hay tras muchos de los grupos contemporáneos?

El metal ha evolucionado. La música es algo vivo que crece y cambia del mismo modo que lo hacemos nosotros como humanos. Hay una progresión lógica desde el metal que se hacía hace 40 años. A la gente, al final, le gusta lo que le gusta. En ocasiones a la gente no le gusta el cambio. Los metalheads de la vieja escuela conectan con grupos de su época porque aquellos grupos les dieron una maravillosa experiencia que les cambió la vida. Luego miran lo que hacemos nosotros y piensan “menuda basura”. Y no pasa nada. No espero que todo el mundo entienda o disfrute de lo que hacemos.

El género musical que hacemos ha crecido muy rápidamente. A finales de los 90 y principios de los 2000’s el sonido del metalcore estaba explotando en todo el mundo y el mercado se saturó porque muchas bandas estaban  intentando producir música a la misma vez. 

La imitación es el mejor cumplido, se suele decir, y eso e exactamente lo que pasó con Pantera y Metallica. Esas bandas nos dieron la plataforma para crear música metal y eso es lo que hemos hecho. Si te gusta o no lo que hemos hecho en base a aquella plataforma ya es una cuestión subjetiva, pero gracias a todos los clásicos que nos dieron el empujón para ser nosotros mismos y crecer. Gracias a eso pudimos darle al mundo nuestra manera de entender la música metal. Quizá algunas  bandas lo han hecho mejor que otras, pero nosotros hemos intentado hacerlo lo mejor que sabemos.

August Burns Red (Foto: Mavi Parra)

Esta es nuestra casa, el metal es en lo que creemos y por eso nos hemos mantenido fieles a nuestras raíces durante veinte años. No esperamos que a todo el mundo le guste lo que hacemos pero si que esperamos el respeto por la devoción y dedicación que hemos tenido hacia esta música. Pero si, entiendo que la gente se agite ante la progresión o los cambios de un estilo musical que siguen y disfrutan. Así es la evolución. Así es el crecimiento. Hay muchas bandas en éste género de musica actualmente y no todas ponen el mismo grado de esfuerzo artístico. Eso es lo que debe tener en cuenta quien está al otro lado escuchando.

“Entiendo que la gente se agite ante la progresión o los cambios de un estilo musical que siguen y disfrutan. Así es la evolución”

De algún modo, os han bautizado como los AC/DC del metalcore. Estables y consistentes pero con cierta aversión al cambio. Muchos de vuestros coetáneos están mutando hacia terrenos más electrónicos. ¿Os resistís a dar ese paso por mantener la integridad de la propuesta de August Burns Red o no os atrae de ninguna de las maneras?

No diría que es algo fuera de alcance para esta banda. Es una puerta que podemos abrir y si la abrimos, no pasaremos corriendo por ella. Si en algún momento integramos algún elemento o estilo musical en nuestra música será meditándolo y experimentando adecuadamente con ello. Somos una banda en constante crecimiento y esa es una de las cosas de las que estamos orgullosos.

En algún momento usaremos elementos que no hemos usado antes en ABR. No sé si serán sonidos electrónicos o si serán otros estilos de voz. Pero si eso sucede y cuando suceda, será algo muy meditado. Lo diseccionaremos bien y nos aseguraremos de que sea algo que encaja en nuestro planteamiento.

August Burns Red (Foto: Yalinku Melero)

A fin de cuentas, componemos música para nosotros mismos, no para la gente. No componemos canciones de un determinado estilo porque “sean populares”. Eso es lo que hace el resto del mundo. La gente nos sigue porque tenemos una identidad y la respetamos. No somos muy impacientes a la hora de apuntarnos a las modas. Durante muchos años hemos mantenido la máxima de liderar éste género musical, no seguir modas puntuales dentro del mismo. Pensamos largo y tendido sobre cualquier cambio en nuestra música. Si nos encaja, lo editamos. Y si a la gente no le gusta, es su problema.

La gente siempre dice que nuestro sonido es reconocible. Otra gente siempre dice que estamos estancados a principios de los 2000. No podemos contentar a todo el mundo y está bien. A la gente le gusta lo que le gusta y no podemos ir mutando según lo que la gente quiera escuchar. Somos August Burns Red y queremos seguir siendo August Burns Red. Tenemos una legión de fans que nos sigue por lo que somos y no podemos ir encajando en todos los moldes, porque entonces le estamos siendo desleales a la gente que nos sigue. 

Las bandas están levantando la voz acerca de los porcentajes que los recintos están quedándose del merchandise de los grupos en los conciertos. ¿Que posición toma August Burns Red en éste tema?

No suelo hablar de cuestiones políticas como esta en público si no voy a hacer un movimiento determinado. No voy a dar una opinión sin la seguridad de que voy a hacer algo por cambiar la situación. No me gusta remover la mierda si no es para hacer algo al respecto. No tengo nada que decir al respecto. 

Girar en 2023, esa aventura

Los costes de gira han crecido espectacularmente en el último par de años. Para una banda como August Burns Red ¿cómo ha afectado todo esto? Hay bandas cancelando giras porque se presupuestaron antes de la inflación y ahora son inviables. 

En ésta banda, los músicos comen los últimos. Cuando cosas como esa suceden, intentamos entender el cambio en las finanzas y absorber el golpe. Si tenemos que alargar una gira para conseguir pagar todo y conseguir un beneficio, lo hacemos. Todos esos elementos hay que tenerlos en cuenta. Hay giras que hemos hecho en las que no se ha ganado nada, debido a la inflación o los sobrecostes.

Pero, a la misma vez, somos responsables de que mucha gente tenga un trabajo. Hay bocas que alimentar que no son las de los miembros de la banda, sino las de nuestra crew. Ésta es nuestra empresa, es nuestro negocio y nosotros entendemos que debemos pagar unos costes antes de hablar de nuestros beneficios. Nuestra crew debe cobrar adecuadamente o en ocasiones debemos apartar dinero para una próxima gira porque hay costes de preparación a tener en cuenta. 

August Burns Red (Foto: Mara Martínez)

Ahora tenéis por delante tres meses enteros de gira. No obstante, con los costes actuales ¿habéis tenido que replantear vuestra operación en directo? Llevar menos montaje, viajar en el mismo bus que la crew, etc.

Si, hemos tenido que replantear cosas. Así funciona un presupuesto. Si vemos que las cosas pintan mal en una gira debido a cuestión macroeconómicas, hacemos un presupuesto a medida de lo que podemos hacer. Eso incluye cuántas luces, cuánta crew o cuantos buses podemos llevar con nosotros. Tenemos que encajar las piezas.

Lo complicado es, como decíamos antes, cuando ya has firmado un contrato para una gira hace muchos meses y la situación cambia en el mundo. Pero si podemos preverlo, lo prevemos. Si tenemos que ir a Australia y tenemos que llevar menos crew, lo hacemos. La gira tiene que funcionar pero tenemos que tener en cuenta de cuánto dinero disponemos para hacerla funcionar y mover las piezas adecuadamente.

Nos llevamos un montaje masivo de luces y allí alquilamos otras, por ejemplo, para hacer cuadrar los números. Pero quizá no nos llevamos a nuestro fotógrafo y videógrafo hasta allí y contamos con alguien local. O nuestro técnico de guitarra también se ocupa de otras cuestiones. Esa es nuestra responsabilidad: hacer que todo funcione bien. 

August Burns Red (Foto: Ray Duker)

Lo importante es que nadie se quede colgado. Si no nos podemos llevar a un miembro de la crew, le avisamos con tiempo para que pueda coger otros trabajos. Quizá nuestro fotógrafo se puede ir de gira con otra banda o dedicarse a hacer bodas en ese tiempo. Intentamos que la gente no quede atrás. En ocasiones los tenemos con un salario mínimo, un retainer, que les permite vivir aunque no estén de gira con nosotros.

Nos preocupamos de los nuestros. Por eso nuestra crew lleva tantos años con nosotros. Nuestro técnico de sonido lleva siete años con nosotros. El anterior también llevaba siete años. No usamos a la gente y prescindimos de ellos, intentamos que todo el mundo esté cuidado. Pero para ello hemos de hacer funcionar los números, claro. 

Durante muchos años las bandas de metal estaban haciendo conciertos con producciones escénicas inexistentes o muy poco trabajadas, especialmente en el nivel de salas o pequeñas arenas. De un tiempo a esta parte, todo el mundo lleva fuego, confetti y pirotecnia en sus espectáculos, ya sean Behemoth, Arch Enemy o Amon Amarth. ¿Habéis percibido una necesidad de mejorar el show escénico e invertir en mayores producciones para competir en el entorno actual? ¿Afectan las redes sociales y la necesidad de vender visualmente a una banda al tipo de producciones que lleváis en la carretera?

No. No siento presión para tener que hacer un mejor show, pero entiendo lo que me dices. Lo he visto suceder en los últimos tiempos. Hemos mejorado nuestro show luminotécnico para los próximos conciertos y tenemos a un técnico, Carlos, que ha programado un show tremendo.

August Burns Red (Foto: Mara Martínez)

Pero no siento que debamos hacerlo. Entiendo que en un show de 20 aniversario hay que hacer algo un poco más remarcable. Pero, igual que la música evoluciona, los shows también lo hacen. Pero no nos vemos forzados a nada. Quizá a veces puede estar bien llevar una pantalla de video pero otras veces tiene más fuerza fijar toda la atención en los humanos que están ejecutando la música sobre el escenario. 

Nosotros no sentimos la presión pero estamos viendo lo que sucede a nuestro alrededor. Quizá añadimos algunas cosas al show. Trabajamos muy duro en que la música y el show creen una atmósfera y lo hacemos bien. No queremos acelerar ningún proceso.