Skid Row: United World Rebellion: Chapter One

Siete años han pasado de un criticado ‘Revolutions per Minute’, y ya era hora de darle continuación. Con este lanzamiento, SKID ROW ha echado la vista tanto al pasado como han mirado al futuro. Lo primero, empezando por su fichaje por la mítica Megaforce Records. Sí, aquel sello fundado por Jon y Marsha Zazula a primeros de los 80 y que saltaron a la fama por publicar a METALLICA cuando todavía tenían granos en la cara. También por el gusto añejo de sus composiciones que relataré más abajo. Y al futuro lo digo porque se han sumado a ese grupo de bandas que han visto que la vida útil de un disco es más pequeña de lo que parece en nuestro tiempo.

DOWN han sido una de las bandas que decidieron que era mejor publicar una serie de EPs; STONE SOUR dividió su doble trabajo en dos discos espaciados en el tiempo. Y en otros estilos también hay un replanteamiento de cómo difundir la música. Así que ‘United World Rebellion’ estará dividido en varios capítulos, y aquí tenemos sólo el primero, con cinco canciones en él. Además, con variedad y un poco de todo. ‘Kings of Demolition’ suena macarra, como si no hubieran pasado más de veinte años por ellos. ‘Let’s Go’ rápida, frenética y pegadiza, ideal para directos. ‘This is Killing Me’ es la típica balada con aire semiacústico que no puede faltar en este tipo de grupos, continuada por un buen medio tiempo no carente de potencia como ‘Get Up’. Y para terminar, una de ritmo machacón con ‘Stitches’, demostrando que ahora mismo el grupo goza de buena salud. Que nadie se engañe, las comparaciones entre Johnny Solinger y Sebastian Bach van a estar ahí siempre, y todo el público añorará la formación clásica de la banda. Los rumores seguirán, las declaraciones de una y otra parte continuarán… ya se sabe cómo van estos asuntos, pero la realidad es que, en sus respectivas carreras, unos con este ‘United World Rebellion’ y el otro con ‘Kicking & Screaming’, han demostrado que los años no son obstáculo para seguir creando buen material. Aunque en el EP que nos ocupa, deja con ganas de más. Toca esperar al segundo.