THE UTOPIAN SEA OF CLOUDS

Uno de los tópicos mas habituales en lo que se refiere al Hard Rock y Heavy
Metal en este país es que los músicos hacen las cosas de cualquier manera y
que no se podrá alcanzar nunca el nivel de otros países occidentales en este
aspecto. Siempre me he mostrado de acuerdo con el tópico porque, en la mayoría
de los casos, suele ser cierto. Una banda alemana que lleva dos años tocando
es capaz de editar un disco súblime. Una banda española que lleva dos años tocando
es capaz de editar un disco, a lo sumo, mediocre.

Pero de tanto en tanto, aparece un artista como Jorge Salán. Decidido a ser
la excepción que confirma la regla, se planta en medio del panorama rockero
de país con un discazo debut que convencerá al mas escéptico. Salan y su utópico
mar de nubes tienen la calidad necesaria como para ser exportados a Europa y
USA. De hecho, probablemente el gran futuro de un guitarrista como Salán se
encuentra fuera de nuestras fronteras, pues ya sabemos todos como funcionan
las cosas aquí.

“The utopian sea of clouds” es un disco en el que el joven guitarrista destapa
el frasco de las esencias y nos presenta composiciones muy maduras que probablemente
llevaba años gestando. Temas como “Relaxation” o el tema-estrella del disco,
“Driving through the tunnel”, están destinados a convertirse en clásicos tempranos
en su carrera. Por otro lado, las piezas con letra como la inicial “Sea of clouds”
o “Face to face” tienen el punto a favor de ser cantadas en inglés, lo cual
amplía incluso mas el horizonte del éxito que puede alcanzar el joven musico.

Las voces son excepcionales. Tanto Pau Sastre en “Sea of clouds” como Tony
Guerrero en “One way” y “Face to face” bordan las labores vocales con una maestría
difícil de creer. Personalmente, Guerrero me parece un cantante con un feeling
increíble y es una lástima que no cante mas en el disco.

Así mismo, los músicos de los que se ha rodeado el guitarra son de lo mejorcito
que se puede encontrar en este país. Jose Mena a la batería, Albert Anguela
al bajo y Juan Mendez a los teclados y piano cumplen con creces la labor de
acompañar a Salan.

En definitiva, por primera vez puedo decir que el país en el que vivo ha dado
un artista equiparable a los que proporciona USA o otros países europeos. Espero
que no sea la última vez. Pero me da en la nariz que es algo aislado…