Staind: The Illusion in Progress

Los multiplatino Staind regresan con fuerza y elegancia. Jugaron bien sus cartas como postgrunge y la baza del Nu metal en sus tiempos clave. De hecho hasta contaron con Fred Durst como productor cuando este se elevó hasta la cima de la popularidad. Posteriormente “Outside” fue radiada hasta la saciedad y el disco BREAK THE CYCLE pasó a vender 8 millones de discos sólo en los EEUU.

Cuando parece que la banda está un poco de bajada después de navegar entre platino y oro, firman un compato que no debería llevarles para abajo precisamente. Excelente gusto compositivo y piezas delicadas y trabajadas que huelen a single por los cuatro costados. Si “Believe” ya lo es y sigue esa onda grunge melancólica tan efectiva hay que quitarse el sombrero ante “All I Want”, de largo el mejor tema con un estribillo digno de ponerle un marco, siempre en clave melancólica y a medio tiempo.

“The Way I Am” estará en el videojuego Rock Band y a buen seguro que terminará por ser todo un clásico. Mantienen en su sonido esos toques a Pearl Jam y a Alice In Chains con los que tan bien han jugado siempre. De hecho si se les puede achacar algo es de no querer arriesgar ni un ápice y facturar un disco previsible aunque adictivo y repleto de grandes temas.

Sigue dominando su sonido la preciosa voz de Aaron Lewis y las atmósferas creadas por la guitarra de Mike Mushok, quienes aseguran que el disco suena bastante blues y a Pink Floyd, y así es, aunque lo del blues no es especialmente dominante.  El segundo tramo del disco baja un poco el nivel que seguía brillando en “This Is It” o “Save Me”.

Podemos destacar la desgarradora “Break Away” o las baladas Pink Floydianas “Tangled Up in You” o “The Corner”, esta última con algo de Silverchair. “Rainy Day Parade” sigue ese mismo camino aunque es más netamente grunge.

Finalizan con versiones acústicas de “Schizophrenic Conversations” y una toma en directo de “It’s Been A While”. Cuidado, normalmente se suelen meter al final estas golosinas cuando no se termina de confiar con el disco y la discográfica prefiere asegurar el tanto como gancho a los fans. No parece que el disco necesite de ello.

Mantienen su gran nivel pero no deja de ser un producto muy destinado a los públicos americano e inglés, que incluyen este estilo dentro del heavy metal, cuando poco tiene que ver con él. Se han sacudido bastante ese tufillo Nu Metal, pero visto lo visto cuesta creer que en directo llegaran a versionar el “This Love” de Pantera en homenaje a Darrell.

Buen disco, en su estilo, y mucha conexión con su pasado CHAPTER V. Quizá vaya de más a menos y no mantengan el nivel inicial pero es innegable que en su estilo son una de las mejores bandas que hay. Relajante, melancólico y muy melódico.