Tommy Bolin: Teaser (Box Edition)

Todo el material realmente vale la pena, especialmente las outtakes pues puedes apreciar mucho mejor lo que vale el guitarrista. En disco ya le conocemos, pero aquí muchas de las canciones que hay expuestas son ideas, intentos y tomas en libertad absoluta. Bolin es mucho más que el tipo que sustituyó a Blackmore. El por qué de su elección no hay más que escucharlo en este genial “Teaser”.

Tommy Bolin fue ese gran guitarrista que sustituyó a todo un Ritchie Blackmore en Deep Purple para el disco “Come Taste the Band”. Un espectacular guitarra con raíces en el jazz fusión y que murió joven debido a una sobredosis de heroína. Tocó también con James Gang y con todo un Billy Cobham, llegándose a codear con la créme de la créme del jazz fusión experimental de los 70. Nunca ha sido reivindicado como bien merece a pesar de que Van Halen y Mötley Crüe nunca han ocultado su amor por el guitar hero. Es una lástima que sea considerado un guitarrista más de la familia Purple, porque cuando uno indaga en su corto legado descubre un artista espectacular que debería haber heredado la etiqueta de “nuevo Hendrix”. Hubo una reedición de “Teaser” hace algunos años pero esta vez se edita como triple, con el disco original, la reedición y un disco con tomas alternativas de cada tema, algunos añadidos y un tema nuevo. Sólo se nos ha facilitado este tercer disco.

El festín de guitarra es tremendo yendo más allá de los 70 minutos. “Teaser” fue grabado en dos días, a la vez que Bolin estaba enfrascado en la grabación de “Come Taste the Band” de los Purple. Hay fiereza, prisa, velocidad pero también grandísimos detalles que harán las delicias de los amantes de las seis cuerdas. Desconocía cortes como las extensas “Flying Fingers”, que hace honor a su nombre. Se nota que es fruto de la improvisación, incluyendo “errores” o derivando a tonadas conocidas como quien no quiere la cosa. En “Wild Dogs” hay voz y una muy buena línea vocal, sin embargo termina en orgía de guitarra con un bajo poco tratado pero sumamente real. Hay momentos sin orden ni concierto, pero es impresionante como el combo le sigue manteniendo el pulso al divo. “Teaser” es quizá la canción más representativa y conocida, por ese gran riff y porque los Crüe llegaron a grabar su versión. Muestra un Bolin inspirado, lleno de energía, pero también siendo un gran vocalista.

Nombres como los de Jeff Porcaro, Phil Collins o Stanley Sheldon estuvieron involucrados en la gestación de este disco del que ya se cumplen 40 años de su aparición. El funky asoma orgulloso en “Cookoo” y termina en un final frenético en el que Bolin despliega todos sus trucos a gran velocidad. “Chamaleon” es bastante inconexa y libre. Pero es impresionante como la batería se va adaptando a los cambios súbitos del maestro. “Lotus” que cierra el disco original, no llega a los cuatro minutos, pero aquí subimos a los 11. “The Grind” abría el LP siendo mucho más festiva y accesible con un piano puramente Quireboys y una guitarra incesante. “Crazed Fandango” es la joya del disco pues estaba inédita hasta ahora. Instrumental con vientos totalmente libre y jam.

“People People” es luminosa con esas percusiones de congas y el saxo, dando un aire latin jazz espectacular. En “Dreamer” también hay manifiesta accesibilidad, entre blues y rock con aires zeppelianos. En la original el último verso lo canta Glenn Hughes. El final con “Oriental Sky” es otra buena dosis de feeling a medio tiempo en clave rockera, de atmósferas cambiantes y jam continua. “Homeward Strut” y “Marching Powder” completan un disco auténtico como pocos. Puede que los ritmos free jazz latin no satisfagan a la mayoría de lectores de esta web, pero es innegable que Bolin poseía ángel y que la cosa te atrapa. La producción del disco es realmente buena. Es ideal dejarlo sonar mientras haces otras cosas para luego volver sobre los temas que más te han impresionado e indagar en ellos de forma más calmada.

La edición en caja consta de tres vinilos y dos CDs en directo a pesar de que se nos ha hecho llegar sólo el material de la versión libre de tomas alternativas. Suficiente para paladear el genio de Bolin. Mucha rabia, fuerza y pasión pero también feeling y técnica rebosante por parte de un guitarra mártir que no posee el aura de leyenda de otros coetáneos. Todo el material realmente vale la pena, especialmente las outtakes pues puedes apreciar mucho mejor lo que vale el guitarrista. En disco ya le conocemos, pero aquí muchas de las canciones que hay expuestas son ideas, intentos y tomas en libertad absoluta. Bolin es mucho más que el tipo que sustituyó a Blackmore. El por qué de su elección no hay más que escucharlo en este genial “Teaser”.